sábado, 7 de septiembre de 2019

ENTRE LÍNEAS Y COLORES


El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (07/09/2019) estas notas que tituló; “ENTRE LÍNEAS Y COLORES”: “…Ni recordábamos la existencia de aquel texto ni que Marían Lorenzo Ríos lo conservara. El azar ha querido que nos reencontráramos en torno a una exposición pictórica y que aquella escritura haya recobrado vigencia.
Releemos aquel breve texto, escrito durante una etapa común, a principios de la década de los noventa, en Diario de Avisos:
“Tiene Marían esa sensibilidad femenina que cautiva a la primera. Imposible negarse a una petición suya, a una atención que demande o precise, incluso sin explicitarla. Observadora, atenta, sutil...
“Lo mejor es que sabe corresponder: interpreta fielmente tanto lo que es la sinceridad como aquello que brota desnaturalizado.
“Marían Lorenzo Ríos es el arquetipo de la luchadora amable, de aquella que sabe sufrir y aguantar pero que no se resigna y reacciona con elegancia, consciente de que hay un día después y de que torres más altas han caído. Fina y delicada, pero también tenaz.
“Es realista también, por eso no se deslumbra ante cualquier mensaje. Las experiencias de la vida le han enseñado que hay que obrar de forma cabal y consecuente. Por eso, es admirada y respetada por una legión de amigos de toda condición social”.
Han transcurrido casi treinta años desde entonces. El tiempo ha confirmado las apreciaciones que expresamos. De aquella personalidad abierta, de la que brotaban ideas constantemente, que desprendía una clara sensibilidad artística, a esta pintora hecha a sí misma, interesada en todas las corrientes, identificada con el cuidado y el estímulo creativo entre quienes se desenvuelven en la diversidad funcional, hay una Marían Lorenzo Ríos que ha acreditado saber lo que quería y cómo hacerlo. Su generosidad le condujo a transmitir sus conocimientos y a hacer partícipes de ellos a quienes lo precisaban y salieran airosos de las pruebas que tenían ante sí.
Pintar para enseñar, para hacer artistas a quienes quizá nunca imaginaron que podían serlo. Marían aprovechó todos los conductos a su alcance para relacionarse de forma creativa con un mundo especial -y también onírico, por qué no- que tienen los chicos y chicas con habilidades diferentes. La profesión escogida, la expresión artística le llevaron a conocer a Lala, su hija adoptiva, con la que estableció una sin igual complicidad. Han creado su universo, Entre líneas y colores, el título de esta exposición que reúne una treintena de obras, acrílicos sobre lienzo y técnicas mixtas, concebidas con finura y, sobre todo, con mucho amor, el derivado de cada pincelada, de cada impacto de espátula y hasta del infinito posibilismo de las manos.
Lala se ha integrado más en la sociedad, ha elevado su autoestima y ha equilibrado su estado emocional. Por eso, su madre confiesa sentirse motivada para afrontar nuevos proyectos y perfeccionar su estilo y sus técnicas. Para sumar más personas a ese mundo especial que no solo es accesible sino que integra la creatividad difícilmente imaginable.
Y Marian pulió su formación con cursos e incursiones en el maremágnum audiovisual, con proyectos para la inserción de personas con diversidad funcional y para la participación activa de mujeres que estuvieran dispuestas tanto a demostrar sus potencialidades y sus recursos como a hacer efectivo el principio de igualdad. Unos cuantos programas televisivos, coloquios, performances, series y representaciones teatrales llevan el sello de una creadora polifacética. Sin descanso, sin desmoralización pese a las tribulaciones de la vida, con denuedo y con tenacidad infatigable, su trayectoria ha ido fraguándose a base de tesón, experimentación y sensibilidad. Ha llegado a ejercer como estilista de moda y productora publicista.
No en vano, pues, su vida ha estado siempre vinculada al arte. Hija de una pintora y profesora de Historia del Arte y sobrina de un pintor, la autora se educó mientras oía hablar de exposiciones, pinceles, retratos, óleos y olores propios de un taller o una galería. En esos ambientes fue creciendo quien ahora insiste en que se la reconozca como mezcladora de colores. “Los colores -dice- vienen solos; yo simplemente los visualizo y empieza el movimiento”.
Siempre sensible, siempre comprometida, en 2005 creó un centro de iniciativas artísticas para la integración de personas con habilidades diferentes y personas en situación de exclusión a través de las artes creativas visuales y no visuales con las nuevas tecnologías. A partir de ahí surgió la “Asociación Detrás del Objetivo” que pretende llegar a todos aquellos que quieren expresar lo que sienten y no tienen los medios para hacerlo.
De forma autodidacta, pues, se convirtió en pintora y aún sigue atendiendo encargos desde los talleres de la Asociación. Y de alguna forma es lo que la trae aquí, en esta tarde que parece amenazada por la llegada del ciclo otoñal. Son sus líneas y sus colores, que dan vida a esta suerte de composiciones metafisicas, reflejo de su inclinación por el abstracto cuyos valores inculca a dos chicas con diversidad que la acompañan mientras trabajan, aprenden y se relacionan.
Entre Líneas y Colores pareciera que el pintor ruso Vasili Kandinski, precursor del abstracto y teórico del arte, alarga su mano en busca de algún karma. Y así, saltamos entre títulos, entre interpretaciones que nos trasladan a la tarde de Carnaval, entre círculos, primavera nueva, ángeles de colores, más allá de lo físico, calma, ramas al viento... Esa aspiración permanente, la mezcla de colores, genera una policromía singular, una fiesta que viene de oriente, rojos y azules, dos (sin más) hasta que llega el hombre de la guitarra azul.
Toda la creatividad de Marían Lorenzo Ríos es también fruto de su constancia; recuerden “el arquetipo de luchadora amable”, también cuando descubrió a Joaquín Sorolla y se apresuró a interpretar cada gesto, cada rasgo, hasta los haces de luz que caracterizaron la obra del pintor valenciano.
Pero es en Tierra de colores, uno de los títulos que forman parte de esta colección, donde la luz, el color y hasta la emoción no pueden frenar el sentimiento de la pintora, sus ansias de volar, admítasenos la expresión. Es una obra, si se quiere, sin perspectiva, si acaso plana, donde los colores surgen para sugerir profundidad. Sencillamente, aparecen y Marían (que bebió en las fuentes de Jacqueline Lamba, la pintora francesa, esposa de André Breton) los plasma hasta dotarlos de la energía precisa para armonizarlos en un día dorado sobre la tierra de paisajes mágicos. Para ella, es fácil, hasta el punto de “crear -según revela- poesía pictórica que me hace sentir libre al pintar”.
Entonces, mezclar y jugar con los colores, imaginar o trazar las líneas, resulta un ejercicio vitalista que se convierte en una especie de danza sobre el lienzo, allí donde los giros simples, hasta planos, revelan, por sí mismos, la imaginación inagotable de la pintora.
Con unas palabras suyas, vamos a finalizar: “El desarrollo de la creatividad es realmente un gran estimulo para mí y me da grandes satisfacciones. La luz, la vida de los colores aplicados en diferentes formas hacen surgir obras realmente increíbles y, aunque todos puedan ver la misma imagen, todos los ven con algo diferente y con una luz diferente”.
Aquí lo podemos comprobar. Marían Lorenzo Ríos nos ha brindado en el Castillo San Felipe su arte y su compromiso social, su posibilismo pictórico, su predilección por el abstracto, su noble ambición artística.
Entre líneas y colores sirve para reafirmar que era imposible -lo escribimos hace casi treinta años- negarse a una petición suya -presentar esta exposición, hecha hace tres días- pues para eso conserva la tenacidad y la delicadeza.
Cualidades, sin duda, de una gran artista.
N. del A.- Texto leído ayer tarde en el Castillo San Felipe, en ocasión de la inauguración de la exposición Entre líneas y colores, de la artista Marian Lorenzo Ríos.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

martes, 3 de septiembre de 2019

FRAGA, EN CAMELLO


El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (04/09/2019) estas notas que tituló; “FRAGA, EN CAMELLO”: “…Un lector habitual se ha interesado vivamente la referencia que hicimos días pasados a la segunda visita al Puerto de la Cruz del que fuera ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga Iribarne, y de la que se han cumplido ya cincuenta y siete años. Se produjo el 1 de septiembre de 1962.
La fuente es el Libro de Efemérides que estaba al cuidado del entonces cronista oficial del municipio, Nicolás Pestana. Hizo su entrada -según puede leerse- a las cinco de la tarde, acompañado del capitán general de Canarias, Ramón Gotarredona Prats; y del gobernador civil (entonces también jefe provincial del Movimiento), Manuel Ballesteros Gaibrois, así como de otras autoridades y jerarquías provinciales.
El relato de Pestaba señala que “el señor ministro y séquito visitó en primer lugar el histórico Castillo San Felipe; y seguidamente, la zona turística de Martiánez, siendo recibido en la puerta del Gran Hotel Tenerife Playa por el Excmo. Ayuntamiento en pleno y por el propietario de dicho hotel, don Cándido Luis García Sanjuán”.
Dice el cronista que en uno de los amplios salones del hotel se exponían los planos y proyectos de obras realizadas y otras cuya inmediata realización requiere la ayuda del Estado. El alcalde, Isidoro Luz Carpenter, acompañado por la corporación que presidía “fue explicadnos detenidamente la esencia de cada “ministrante” proyecto (El entrecomillado es nuestro), entre ellos el de mejoras del litoral marítimo de Martiánez como el más urgente de ser ministrado”.
Independientemente del rango de la actuación, elevada a la que podía ser excelencia de entonces, parece evidente que los portuenses querían tratar esta franja del litoral con una clara voluntad transformadora. Téngase en cuenta que ya lucían “las piscinas de Gilbert”, como se decía en lenguaje coloquial. En su configuración, cobró forma el Lido San Telmo, un local que dio vida a todo el sector y a la incipiente industria hotelera.
El Ayuntamiento ofreció un brindis, naturalmente, una copa de vino español, terminología empleada hasta bien entrada la democracia en invitaciones, recepciones y otros actos públicos. Fraga siguió la actuación de las rondallas típicas de la Sección Femenina “de la FET y de las JONS y de Educación y Descanso, que fueron largamente aplaudidas, terminando con una exhibición de lucha canaria a cargo de valiosos luchadores del pueblo de La Victoria de Acentejo”.
El cronista Pestana señala que el señor Fraga Iribarne se mostró sumamente agradecido por todas estas atenciones, manifestando que “se encontraba verdaderamente asombrado por todos los adelantos turísticos hechos en la ciudad durante los últimos años años que han transcurrido desde que la visitó por última vez”.
La referencia de Pestana termina con el apunte de que Manuel Fraga e Isidoro Luz se subieron a un camello en plena avenida de Colón. Era uno de los camellos de Lázaro, uno de los personajes más populares de la época y pionero en este tipo de atracciones. Baeza da testimonio gráfico de ello, con una graciosa instantánea en la que puede verse a Enrique Talg Wyss, al periodista Luis Álvarez Cruz y al sacerdote José Siverio Pérez…”

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABVRÉU
PROFESOR MERCANTIL

lunes, 2 de septiembre de 2019

AA. AA. SALESIANOS CF.




El amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava “POLOLO”, potente y entusiasta guardameta del UD. Orotava, remitió entonces (02/09/2019) esta fotografía, referente al AA. AA. Salesianos CF. En su últimos años.
En el mes de febrero del año 1965, se constituye por primera vez en el colegio de San Isidro de la Villa de La Orotava. La Asociación de AA. AA. Salesianos que presidió el AA. AA. Salesiano de la Villa; Juan José Reyes Duclos.
Su junta directiva se decidió por fundar en club de Fútbol que militara en la segunda categoría regional del norte de Tenerife. Ya que varios de sus AA. AA. Habían sido futbolistas.
Su primer entrenador fue don Sebastián Hernández Lorenzo “don Chano”, comenzando sus entrenamientos en el viejo campo de deporte del mencionado colegio.
Presentándose oficialmente en el estadio Municipal de la Villa de La Orotava “Los Cuartos”, en un partido amistoso contra el Unión Silence de los Silos. Su primer presidente fue el también AA. AA. Salesianos; Chito Rodríguez “Franco”.
El club duró dos temporadas oficiales, continuando la vida futbolera, con nueva denominación de ATLÉTICO OROTAVA, que presidió Isidro Álvarez “El del Rincón”.
La Foto corresponde a uno de sus encuentros en el Estadio Municipal de la Villa de La Orotava Los Cuartos “Entonces” de pista de tierras.
De izquierda a derecha, de arriba abajo: Antonio Muñoz (Entrenador), Domingo “Iribar”, Juan Luis, Felipe, Oliva, Bienvenido, Pepito Siverio, Pololo, ¿?, Antonio, Oscar, Arzola, Castañeda y Tito “El Pelado”.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

CUESTA LA VILLA CF.



El amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava “POLOLO”, potente y entusiasta guardameta del UD. Orotava, remitió entonces (02/09/2019) esta fotografía, referente al equipo aficionado; CUESTA LA VILLA CF.
Tomada en el viejo campo de deportes de dimensiones irregulares del Colegio de San Isidro de la Villa de La Orotava. Podemos observar al fondo como los ventanales de las aulas, estaban protegido por redes de hierro, y evitar posible roturas por balonazos.
CUESTA LA VILLA CF., fue un equipo de aficionado que se creó para jugar los celebres campeonatos de los cincuenta y sesenta del siglo XX, que se celebraban en dicho recinto colegial, organizado por el Oratorio Festivo que entonces dirigía el recordado salesiano don Antonio Montero Marroquí.
Desconozco a los jugadores que lo formaron, pero curiosamente, el amigo “POLOLO”, aparece de lateral,  no de guardameta como le conocimos.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

CAMPO DE FUTBOL DE LA CRUZ CHICA “SUPREMA”



El amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava “POLOLO”, potente y entusiasta guardameta del UD. Orotava, remitió entonces (02/09/2019) esta fotografía, referente CAMPO DE FUTBOL DE LA CRUZ CHICA “SUPREMA” al final de los sesenta del siglo XX.
Este campo de futbol, era un tanto curioso, puesto que la pista de juego entonces, tenía un desnivel, por lo que el equipo que jugaba por la parte de arriba tenía la ventaja de llegar primero, pero de subir el último.
La fotografía corresponde a un partido de futbol entre el UD. Orotava – Suprema de segunda categoría Regional.
Aparecen: Pololo en primera plana, detrás Juanito “El Carajito” y a su derecha de espalda; Goyo “El Macuto”.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

MURGA LOS CANGREJOS



El amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava “POLOLO”, potente y entusiasta guardameta del UD. Orotava, remitió entonces (02/09/2019) esta fotografía, referente al equipo aficionado de la murga LOS CANGREJOS.
LA MURGA LOS CANGREJOS se fundó en la Villa de La Orotava, al final de los sesenta del siglo XX, para animar y divertirse en los Carnavales. Su primer director y fundador: Domingo Quijada.
En los veranos participaba en el campeonato de futbol aficionado, que se organizaban en el nuevo campo de futbol del Colegio de San Isidro.
De izquierda a derecha. Arriba: Pololo, Nino, Juanito el del ramal, Melchor, Manolo Pérez, y Santiago Raya (el bombero).
Abajo Tomas, Lima, Domingo, El Nene y Dionisio casado con Angelita Sálamo.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

domingo, 1 de septiembre de 2019

EL RETORNO A LA ERMITA EN EL TIEMPO


EL MUSEO DE ARTE SACRO “EL TESORO DE LA CONCEPCIÓN” de la Villa de La Orotava; remitió entonces (01/09/2019) esta inédita fotografía (perteneciente al archivo de la Hermandad del Calvario. De La Villa de La Orotava).Principio del formulario

 Referente a la procesión del Retorno a la Ermita del SANTÍSIMO CRISTO DEL CALVARIO en los sesenta del siglo XX.

“…Tratase de un grupo escultórico realizado por Fernando Estévez en 1814 que se ubica en la ermita del Calvario de la Villa de La Orotava.

La obra fue encargada por el presbítero Domingo Calzadilla y Osorio al citado artista a fin de poder brindar a la ermita de una obra escultórica del misterio hasta ahora representado únicamente por una pintura de Gaspar de Quevedo…”

Nos llaman la atención los miembros de la hermandad. En primer plano; José María González Pérez, detrás por la izquierda: Fernando Álvarez Arbelo, Ignacio Hernández, Juan Álvarez Armas.

Cargando el Cristo; Rogelio Lima, Magensio González. Por la derecha: Santiago Oramas, Juan Hernández Sánchez, Melchor Suarez González. Y en el centro al entonces sacristán; Demetrio Mesa.

El monaguillo que tiene las manos a la espalda es el convecino de la villa de La Orotava de la calle Nueva; Domingo Hernández y Hernández.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL