viernes, 3 de abril de 2020

FICHAS DEL UNIÓN PIEDAD


Mi alumno del IES La Orotava Manuel González Pérez del Barrio de San Antonio: ANTHONY ESTÉVEZ DUREY. Remite entonces (03/04/2020), estas notas que tituló; “FICHAS DEL UNIÓN PIEDAD”: “…Bruno han encontrado en la carpintería de Quillo (Domingo Pérez Hernández) en la Cruz del Teide, estas fichas de jugadores del Unión Piedad de la temporada 1952/1953, las dos primeras fichas de izquierda derecha son las de Carlos González "Campana". Y la de abajo la de su hermano Pepe González “Arencibia”…”

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

DON GUILLERMO CAMACHO Y PÉREZ GALDÓS. TRIBUTO A SU MEMORIA VEINTICINCO AÑOS DESPUÉS


El amigo de la Villa de La Orotava; JAVIER LIMA ESTÉVEZ. Graduado en Historia por la Universidad de La Laguna remitió entonces (03/04/2020) estas notas que tituló; “DON GUILLERMO CAMACHO Y PÉREZ GALDÓS. TRIBUTO A SU MEMORIA VEINTICINCO AÑOS DESPUÉS”“…El 3 de abril de 1995, a la edad de 96 años y muy próximo a cumplir los 97, fallecía don Guillermo Camacho y Pérez Galdós. Un referente y una referencia para el conocimiento de la realidad canaria desde diversos puntos de vista.
Militar, profesor e historiador; ocupó esta última faceta una parte importante de su vida. Sus contactos, numerosos y variados, nos aproximan ante la presencia de un ser comprometido con la intelectualidad de la época y acreditan, a su vez, su prestigio y valía. En su casa realejera, la bella e histórica Hacienda de los Príncipes, vivía junto a su inseparable esposa, doña María del Pilar de Alós y de Fontcuberta, teniendo el matrimonio tres hijas: doña María de la Concepción, doña María del Carmen y doña María de las Mercedes. La Hacienda era un espacio del saber al que acudían desde notables personalidades del ámbito histórico hasta escolares, con el fin, estos últimos, de obtener algún dato para realizar algún trabajo o investigación inicial sobre algún tema del pasado local.
Su huella como investigador se advierte en una fértil producción que se extiende a lo largo de varias décadas. Artículos en revistas de prestigio como             El Anuario de Estudios Atlánticos, La Revista de Historia, El Museo Canario, y, otra serie de publicaciones, incluso de carácter periodístico, dan cuenta de su trabajo meticuloso. Letra a letra, hilaba en su máquina de escribir los trazos de averiguaciones con documentos añejos que en sus manos, y a través de grandes dosis de paciencia y capacidad, fluían en artículos históricos. Temas  religiosos, económicos, arquitectónicos y biográficos marcaron su línea de interés. Hasta el final de su vida mantuvo la necesidad por seguir en la senda de la investigación y la difusión de cuestiones relacionadas con el pasado. Ejemplo de ello se advierte en las referencias históricas que ofreció con motivo de las Fiestas de la Cruz Santa, en el año 1988. Breves aportaciones sobre la redistribución de aguas en el siglo XIX y la deforestación en los siglos XVII y XVIII que Esteban Domínguez incluye en sus Apuntes realejeros.
Don Guillermo obtuvo a lo largo de su existencia numerosos reconocimientos. Símbolos y distinciones a toda una vida que terminó el 3 de abril de 1995. Uno de sus discípulos más cercanos, el Memorialista de la Villa de La Orotava, don Antonio Luque Hernández, llegaría a expresar en prensa pocas semanas después lo siguiente: La muerte se llevó con él una parte de nuestra memoria colectiva, y aunque su magisterio permanece en sus escritos, desconsuela su ausencia. Pero nos conforta la esperanza del creyente, y el pensamiento de aquella frase, tan repetida por él, «Dios es sobre todo un padre amante», y en esa seguridad, estoy seguro, habrá acogido Dios el alma de este varón de virtud que en vida fue Guillermo Camacho…”

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

jueves, 2 de abril de 2020

LA ACADEMIA DE DON INOCENCIO SOSA HERNÁNDEZ (III)


Escribo estas letras, obsesionado por la crisis que estamos pasando, encerrado en mi hogar con mi querida esposa.
Deseo un homenaje a todos los que estamos en esta situación, a los que están al pie del cañón; médicos, enfermeros, policías, bomberos, militares, a todos ellos,
Sobre todo a todos los niños, que están sin sus amigos colegiales, y aquellos que sufren en la vida.

En la década de los años cuarenta y principio de los cincuenta del siglo XX. En la calle La Hoya – Hermano Apolinar de la Villa de La Orotava, existía una academia Mercantil y de cultura general que regentaba el recordado DON INOCENCIO SOSA HERNÁNDEZ.
Era de característica mixta, sus aulas estaban ubicadas entre el patio de la mansión, y algunas habitaciones, incluso desde su cama por enfermedad llegó don Inocencio a ejercer su docencia.
Las disciplinas de: Contabilidad, mecanografía, taquigrafía, calculo mercantil, caligrafía y cultura general eran evidentes en esa recordada Academia orotavenses.
En ella se prepararon muchos villeros y villeras, que a lo largo de su vida, se incorporaron al mundo empresarial, comercial y bancario.
Compartía la enseñanza con don Inocencio su hermano Don Félix Sosa Hernández concejal del Ayuntamiento en la Republica y contable de la firma comercial de los “Herreros”.
Cecilio Hernández, Pedro Serrano e Higinia Hernández Sánchez, fueron alumnos destacados que se convirtieron en el tiempo en ayudantes de la enseñanza en la misma Laureada Academia de don Inocencio Sosa Hernández.
En la fotografía observamos, una de sus clases con las pequeñas féminas en el patio de su casa. Muchas de ellas son conocidas, pero prefiero que el lector se lo haga suyo.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

LA ALFONBRA DESPUES DEL CONCILIO VATICANO II


Tapiz central del mes de junio del año 1965, de la plaza del Ayuntamiento de la Villa de La Orotava.
De las manos del recordado artista y alfombrista Pepe González Alonso, con su bello y difícil arte de transparencia, sobre el cuadro que en su parte superior representa la cena y en la central la eucaristía, con el sacerdote de cara a sus feligreses, leída en castellano en su totalidad.
Ese año el tapiz tuvo su relación con el Vaticano II a través del entonces párroco y arcipreste del templo parroquial y Matriz de Nuestra Señora de la Concepción; Don Leandro Medina Pérez y su amistad con el director del tapiz don Pedro Hernández Méndez, para que diseñara en el boceto lo que fue el concilio del Vaticano II.
Un concilio ecuménico de la Iglesia católica convocado por el papa Juan XXIII, quien lo anunció el 25 de enero de 1959, siendo uno de los eventos históricos que marcaron el siglo XX.
Pepe González Alonso fue un artista genial, y en sus actividades alfombrísticas dejó impresa una garra de gigante. Pero ese gigante lo creaba con los mejores tesoros extraídos del Teide, como el cobre de los azulejos o el polvo anaranjado de Izaña.
Sus grandes alfombras son el resultado de un gran quehacer artístico y de un gran esfuerzo de muchos años de trabajo.
Es verdad; que Pepe se quedó solo. Hubo un tiempo en el que le gustó estar solo, el único, el más ingente, el más confidente de sus propios secretos. Sus alfombras, su arte, sin par, sin rival, era lo más admirable para el florecimiento de la Villa de La Orotava.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

miércoles, 1 de abril de 2020

EL PARVULARIO DEL COLEGIO DE LA MILAGROSA


El amigo desde la infancia y compañero de pupitre en los colegios: La Milagrosa y San Isidro de la Villa de La Orotava: BERNARDO PIZARRO HERNÁNDEZ, remitió entonces (01/04/2020), esta fotografía que encontró en el baúl de los recuerdos, referente al curso escolar 1956 – 1957.
Grupo de párvulo del Colegio de la Milagrosa de las Hermanas de la Caridad de La Villa de La Orotava.
La Milagrosa era entonces un colegio simplemente y exclusivamente femenino, se admitía el parvulario y la primaria mixto pero separados en clase; dos filas a la izquierda para niños y dos filas a la derecha para niñas.
En ese recordado colegio estudié el párvulo con Sor Catalina de origen cubano y la primaria con la oriunda de San Juan de la Rambla Sor Dolores Borges, así hasta la primera comunión que realizamos en el templo de Santo Domingo de Guzmán del ex convento dominico de San Benito de la Villa de La Orotava.
Los recuerdos con sor Catalina eran muy embrujados, se trataba de una monja vetusta encargada de tocar la campana que estaba en la terraza del patio interior del colegio de entrada y salida de clases.
La tocaba de una forma tan apesadumbra que unas veces nos ponía tristes y otras un poco alegres.
Con sor Dolores, hacíamos veladas de niños, excursiones caminando hasta el popular Barrio orotavense de la Florida (caminos de tierras y piedras con la merienda en la cestilla), también visitábamos el Jardín Botánico, en esto sor Dolores se adelantó a la ilustración, al siglo de la luces.
Campeonato de fútbol en una cancha de césped en el jardín del colegio, escribíamos la célebre caligrafía de aquellos recordados cuadernos de dos rayas etc.
Con esta impresionante mujer tengo una anécdota, estaba compartiendo pupitre con el amigo y convecino de la Villa; Fernando Zarate Salazar, él estaba sentado frente a mí, se me ocurrió empujarlo con las dos piernas, tal fue mi fuerza que lo lancé contra la pizarra de la pared.
A primera vista me pilla sor Dolores y me deja arrestado como castigo. Pero mi querido y recordado padre Juan Álvarez Díaz, acostumbraba a buscarme todo los días al colegio, casi siempre me llevaba un regalito para regresar a casa contento. Y siempre me esperaba en el muro del jardín por fuera del colegio.
Al ver que no bajaba, se encontró con mi prima hermana Centa Álvarez Acosta que salía del colegio, le preguntó que donde estaba metido, que llevaba tiempo en mi aguardo. Mi prima subió inmediatamente al aula de Sor Dolores, y me ve que estaba arrestado, entra y le dice a Sor Dolores que su tío Juan está esperando abajo por mi primo Bruno. Sor Dolores le contestó vete y dígale a su tío que el niño está arrestado a mi orden. Tanto fue la sorpresa que a los cincos minutos Sor Dolores me dice Brunito váyase que tu papá te espera en el muro de a fuera. Salí como un cohete, pero enseguida pensé que Sor Dolores respetó la decisiones de mi progenitor.
La foto está tomada en la escalera de bajada por la izquierda hacía una pista de césped natural.
Son muchos los conocidos, no me gusta nombrar, puesto que de muchos no me acuerdo de sus nombres y otros no los identifico.
Prefiero que sean ellos los lectores, los que se identifiquen por sí mismo.
El grupo pertenece al parvulario del mencionado centro docente que estaba a cargo de la entonces longeva Sor Catalina.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

UD. CRUZ SANTA EN EL TIEMPO


El amigo ROMÁN LABRADOR HERNÁNDEZ. Remitió entonces (01/04/2020) esta fotografía y notas sobre el UD. Cruz Santa en el tiempo: “…Siempre de izquierda a derecha. Por arriba....Víctor entrenador, Isidro portero, Maxi, Juan el 7 pisos, Manolo el alcalde, Andrés, Tino el delegado....Por la parte baja: Minguí el Casa Blanca, Pedro Luis el chamo, Fran, Jorge el rubio, Alexis, Carlos el coleta...
En esa alineación son 9 los jugadores salidos de la cantera de la Suerte y esa foto fue sacada en el campo del Carrizal de Las Palmas en un partido de promoción de ascenso a doble partido donde aquí en La Suerte si no me equivoco gano La UD Cruz Santa por 4-1 y en Las Palmas perdió 3-0 con el mayor  robo de la historia del fútbol.  Les expulsaron a 4 jugadores del Cruz Santa y le pitaron dos penaltis que se inventó el árbitro.
Yo estuve en esa plantilla, pero ese año me fui cedido al CD Vera…”

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

TRES FUTBOLISTA DEL CD. EUROPA


CD. Europa de La Villa de La Orotava, fue un equipo de fútbol que se fundó al principio de los treinta del siglo XX.
Su sede social estaba ubicada en la calle El Calvario, y lo presidía el que posterior fue alcalde de la Villa de La Orotava; Cándido Acosta Hernández.
Don Antonio Delgado González era el secretario – tesorero.
Según nos cuenta el amigo de la Villa de La Orotava, ÁNGEL GARCÍA GONZÁLEZ: …El 21 de septiembre de 1930 se reorganizó el Orotava FC., para ello tuvieron que funcionarse dos Clubes; Europa y Estrella, en un encuentro entre ellos que venció el Europa por 5 - 1, actuando de arbitro don Victoriano Ríos de la capital, que cobró 50 pesetas, muy caro, pero la taquilla fue la mejor hasta la fecha.
Según la estadística de Amadeo Hernández Lorenzo, publicada en periódicos locales de la época, recoge que el Orotava jugó, ya reorganizado, 7 partidos en 1930, 35 en 1931 y 31 en 1932.
Mientras, el Estrella juega 7 en 1930, 10 en 1931 y desaparece.  El Europa reaparece en abril de 1932 y desaparece en abril de 1934, tras un reto con el Orotava de triste final. Su presidente el Teniente Morlán y Ricardo Álvarez Díaz (tu tío) pasan a la directiva del Orotava F.C.…”
Panorámica tomada delante del Mausoleo de los jardines del Marquesado de la Quinta Roja, el sepulcro vacío donde se iba a enterrar en defensa de la tolerancia al marques don Diego Ponte del Castillo, por el recordado fotógrafo del jardín “Francisco Roda”.
De izquierda a derecha: Manolo González, Ricardo Álvarez Díaz (mi tío) y Cleofás Castro.
TRES FUTBOLISTA DEL CD. EUROPA, dos defensas y el portero.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL