jueves, 5 de agosto de 2021

AÑATERVE ABRÉU MONASTERIO, EL PRIMER PUNTAL “A” EN LA HISTORIA DE LA LUCHA CANARIA DE LA VILLA DE LA OROTAVA

La lucha Canaria en la Villa de La Orotava, a lo largo de la historia siempre estaba centralizada en un equipo característico que se llamó CL. Echeyde. Equipo que tenía su terrero en una huerta propiedad del ex luchador Pedro González de Chaves y García, ubicado en la esquina de la calle Castaño (actual Domingo González de Chaves y García), con la Calle Duque (actual Buenaventura Machado Melián). Celebraba sus encuentros de luchas en el Estadio Municipal de La Villa de La Orotava “Los Cuartos”, en la época de pista de tierra en el lateral derecho de la zona sur. A partir de ahí la lucha se entendió por los Barrios de la Villa; Las Candias, San Antonio, Aguamansa, Camino Chasna, Barroso y finalmente en La Florida, donde actualmente conserva una pulcra cancha de terrero para la lucha cubierta, manteniendo un equipo de alto nivel durante varias décadas.

En cuanto a puntales villeros, me cuentan que solo se recuerda al Pollo de La Orotava (Pedro González de Chaves y García), pero  no es supuestamente seguro. Por eso traigo a mi blog personal y altruista “Efemérides”, a un muchacho de la villa, alto y grueso que ha dado toda su vida por el deporte autóctono canario como la Lucha.

AÑATERVE ABRÉU MONASTERIO se convirtió en uno de los grandes puntales de la Lucha Canaria, es natural de la Villa de La Orotava, en donde nació  el 7 de marzo de 1982.

Procedente de una familia  muy conocida y apreciada Los “Monasterio”,  cuyos patriarcas eran don Miguel Monasterio  (natural de Santa Cruz de Tenerife, administrador del Hospital de la Santísima Trinidad de la Villa e Industrial) y doña Regina Oliva (natural de la Villa de Los Realejos, magnifica artesana de los calados canarios).

Añaterve es hijo de mi amiga y convecina de la Villa Carmita Monasterio Oliva. Estudió en el colegio Público “Los Poyos”, y en el IES La Orotava Manuel González Pérez. Nunca destacó en los estudios, pero si en el deporte autóctono y rey canario, La Lucha.

Empezó a luchar por culpa de su hermano Mauro que le llevó a entrenar a la Florida con José Pacheco que era el Presidente. Ha luchado en todas las islas del archipiélago canario  también en Corea en la lucha Ssirum.

Por lo tanto comenzó a hacer su primeros pinitos de la lucha en el CL. Florida y pasando posteriormente por diferentes equipos como;  Tijarafe, Brisas del Teide, Tegueste, Playa Honda de Lanzarote etc.

Con el Punta Brava (Puerto de la Cruz) conquistó una Liga y alcanzó su mejor nivel. En la mejor Liga y Más reñida que todos recuerdan.

Ha luchado a la contra con los famosos puntales canarios; desde el Pollito de la Frontera y Romen Luis el Katire hasta los puntales de la actualidad.

A título anecdótico, en una lucha en la octava isla de La Graciosa (Lanzarote) un aficionado en vez de darle dinero que es lo normal en este grandioso deporte canario siempre que se interpreta una buena agarrada o hacer una buena lucha, lo llevó a su casa y le dio una bolsa enorme de pejines y jareas.

Por equipo ha quedado campeón de Tenerife en varias ocasiones, Trofeo Pancho Camurria,  con la selección de Tenerife y varios subcampeonatos de Canarias aparte de ganar el campeonato de puntales absoluto.

Este muchacho es una excelente persona, un muchacho cabal, entrañable luchador, que llegó  a ser puntal en sus distintas categorías; “C”, “B” hasta llegar a la máxima “A”.

Merece un gran respeto deportivo en La Villa de La Orotava, en su villa, sobre todo por su dignidad y sus preparaciones en la famosa Playa  “El Bollullo”,  ser Villero de Honor  entre comilla con todo el merecimiento.

El amigo de Pago de Higa “La Perdoma” Villa de La Orotava; LUIS HERNÁNDEZ MELO, remitió (2014) entonces estas notas referentes al inolvidable club de lucha PERDOMA: “…El Club de Lucha Perdoma, fundado el año de 1959, siendo su primer presidente D. Esteban Hernández Delgado. 

En un principio entrenaban en un salón propiedad de Don Sebastián García Cabrera, frente a la actual sala Francisco Álvarez Abrante, y las bregas oficiales en un solar adjunto, propiedad de los hermanos Lucio y Jesús Hernández González.

Más tarde se entrenaba y luchaba en el solar de la familia Díaz Hernández, ubicado por debajo del famoso bodegón de don Teodosio Hernández Martín.

Competían con un plantel de magníficos equipos que proliferaban en el Valle: como el Cruz Santa, El Florida, El Camino de Chasna y otros más distantes como el Sardina, El Batán...

Luchadores de aquel entonces: Candelario Hernández Ramos, Antonio Díaz González, Domingo Estévez Lorenzo, Domingo Cabrera Pérez, Nicolás Hernández Marrero "Colacho", Santiago Luis Perdigón (Bco. La Arena), Manuel González Yanes "Somatén", Manuel García Pérez, Manuel González Díaz "El Vieja", José Oliva Díaz "Pepe El Terry", Domingo Rodríguez Hernández, Santiago "El Matanza", Juan Pedro, Antonio Díaz Rodríguez, Tomás González Yanes "El Enamorado", Manuel Romero "El Niño de la Cuna", el utillero Genaro Pérez Hernández…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL


miércoles, 4 de agosto de 2021

ORTEGA (II)


 

El amigo de la infancia y compañero de pupitre en la Academia Mercantil Atlántida de la calle El Calvario de La Villa de La Orotava; JOSÉ MARTÍN GONZÁLEZ (PEPE), remitió entonces (25/06/2015) esta fotografía, donde vemos a ORTEGA, en el inolvidable y desaparecido Club GOLDEN de la calle de Santo Domingo del Puerto de la Cruz.

De izquierda a derecha; Gigí, (cajera francesa) Nicolás, Manolo Álamo (encargado) Ortega, y Pepe Martín (propietario de la foto): “…Para rendir un pequeño homenaje a título póstumo (D.E.P.) Se llamaba Félix Ortega Valdivieso. Era natural de Santander. La pequeña historia que él me contó es breve. Era republicano y no coincidía con el régimen de entonces. Se ganaba la vida como fotógrafo ambulante. Muchas fotos. En la zona de Martiánez y en el Puerto de la Cruz en general. Vivía en la Pensión de Pedro Avero, entonces en el Peñón. Gran fotógrafo tenía su propio estudio, pero le podía más las charlas con los amigos que entregar las fotos a sus clientes. Excelente persona. Desde entonces han pasado muchos años…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

ORTEGA (I)

El fotógrafo ORTEGA, era bohemio se ganaba la vida entre la Orotava y el Puerto de la Cruz, en las calles regateando bares. Era un gran artista de la fotografía con mucha técnica, había sido reportero de guerra, en la contienda incivil española en el bando republicano.

En principio nunca supe de donde procedía, ni tenía persistencia de sus familiares, lo recuerdo con mucho cariño pues sacó fotos en todos los acontecimientos festivos y populares, de hecho quien no tiene en su casa fotos del gran “ORTEGA”.

Su sobrino SANTIAGO ORTEGA CABRILLO. Remitió entonces (05/12/2013) estas notas: “…Félix Ortega Valdivielso era natural de Santander. Tío carnal mío. Mi difunto padre Carlos, también era fotógrafo como lo fue su padre, que regentaba dos tiendas de fotografías y estudios de grabación de discos. El incendio de 1941 las arrasó. Sabíamos que andaba por Canarias, pero mi tío era un pájaro libre. Tengo algunas fotos de él y su padre (también Félix). Era el mayor de seis hermanos. Durante el franquismo estuvo dos meses escondido en mi casa. Nueva Montaña, Santander…”

En la Villa de la Orotava vivió en tres fondas populares, primero tenía un cuartito en la casa de Los Balcones (colegio Farraís), después en La Ciudad de los Muchachos en la calle La Hoya (hoy Hermano Apolinar), y finalmente en la pensión El Suizo (de don Paco Polo Verdugo, oriundo de Málaga) en la calle García Beltrán, en esta ultima su propietario don Paco Polo terminó quemándole todo su archivo (que locura cometió este viejo malagueño) en una casa que tenía en la calle El Calvario, al lado de mi propio domicilio, por no pagarle la pensión, locura, porque se pudo haber conservado un archivo fotográfico de incalculable valor. Hizo escuela, pero en la calle muchos aprendieron el relevar de fotos de él y fue el primero que introdujo la técnica de la fotografía en color en el Valle de La Orotava.

El Amigo de la infancia de la Villa de La Orotava; EVARISTO FUENTES MELIÁN “ESPECTADOR” remitió entonces (05/12/2013) estas notas: “…Ortega el fotógrafo nos hizo una foto en carnavales (perdón: fiestas de invierno) año 1961 a un grupo de amigos medio disfrazados y medio en copas –Ortega y nosotros- y resulta que esa foto NUNCA EXISTIÓ, no tenia rollo…jamás la pudimos ver…jajaja.

Éramos cuatro: Manolo Rodríguez Mesa,  Pepito Linares, Antonio Catalán y Evaristo Fuentes, somos testigos  y víctimas de esa anécdota…”

 “…Anécdota que fue vivida y contada por uno de mis primos Machado Melián y otros condiscípulos del colegio Farraís, años 40 y primeros 50 del siglo XX. Resulta que en el colegio Farraís, Ortega hacia fotos y tenía el magnesio en polvo, explosivo flash de aquella época, en un retrete del interior del edificio, algo escondido. Pero algunos de los alumnos descubrieron dónde estaba el magnesio y fueron y le prendieron fuego. La explosión fue con humo tan intenso y denso que, al decir de los vecinos, parecía que estaba ardiendo por un tremendo incendio el colegio y hasta el colindante local de La Venta Nueva. El cabreo de Ortega fue, por supuesto, de órdago. Y  trancó y cogió por el cuello de la camisa al mayor de los Gajate, y cuando se disponía a darle un fuerte puñetazo en toda la jeta, el mayor de los Gajate cagándose literalmente por las patas abajo, le suplicó diciéndole: “”¡¡YO NO FUI, SEÑOR ORTERGA….¡¡¡YO NO FUI, SEÑOR ORTEGA¡¡¡…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

martes, 3 de agosto de 2021

DOÑA REGINA OLIVA EN EL RECUERDO


Hacía tiempo que buscaba fotografías de doña Regina Oliva, para poder escribir, tal como la conocí a lo largo de mi vida.

Gracias a su hija pequeña Regina Monasterio Oliva, he conseguido estas tan extraordinarias, lo suficiente para escribir de una gran mujer que fue una expendedora – artesana de productos totalmente autóctonos  canarios.

En la primera panorámica le acompañan sus hijas Cari (agente de policía local de la Villa de La Orotava) y Carmita (madre del gran puntal de la lucha Canaria orotavense Añaterve Abréu Monasterio). Y en la segunda su operaria de confianza en la elaboración de los calados.

Doña Regina Oliva era natural de Los Realejos, desde su juventud aprendió el oficio de los calados y bordados, fue ingresada por causa de una enfermedad en el Hospital de La Santísima Trinidad de la Villa de La Orotava, donde conoció al que fue su esposo y acompañante en la vida Miguel Monasterio, chicharrero – santacrucero del Cabo, que en principio estaba hospitalizado en dicho centro y posterior se convirtió en administrador del mismo. Se casaron y se fueron a vivir a la calle Salazar, trasladándose a la nueva Barriada de San Isidro en el Paseo de Las Araucarias, donde montó con su propio esposo una industria de Calados y Bordados en lo bajo de la Casona de estilo colonial -  plateresca, diseñada por don Mariano Estanga, que aún se conserva en el lugar conocido por “Los Poyos”. Producto del trabajo y la constancia y lucha en la vida, fabricaron en el mismo lugar un nuevo hogar que en la actualidad viven sus herederos.

La industria de Calados y Bordados en el famoso Barrio de La Orotava “Los Poyos” que conocíamos por “Casa Regina”, se convirtió durante tres décadas como el centro neurálgico empresarial y turístico de la Villa, paralela al Boom turístico del Puerto de la Cruz.

Recuerdo ver guaguas  repletas de turistas, que partían desde la primera ciudad Turística de Canarias estacionadas en el lugar, como visitas de cortesías y de rigor, para iniciar rutas turísticas a lo largo de la Villa de La Orotava, Las Cañadas del Teide y el Sur de la Isla entonces totalmente desconocido a través de largas y curvilíneas carreteras.

Doña Regina Oliva y su esposo don Miguel Monasterio, formaron un matrimonio ejemplar, digno de caridad, de ayudar a los demás, puesto que recuerdo, cuando me desplazaba a su casa a dar clases particulares a sus hijos y presenciar en ese digno hogar acontecimientos sociales y humanitarios jamás visto en mi vida.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL


 

lunes, 2 de agosto de 2021

DOÑA LOLA LUIS BORGES EN LA VENTANA DE SU CASA

Esta sorprendente fotografía me lleva en la memoria a la infancia y a la adolescencia. Una fotografía que me es familiar, una familia que aunque eran vecinos, éramos como familia, nos comunicábamos tanto por fuera que por dentro de nuestras casas en la Calle El Calvario de La Villa de La Orotava.

Este matrimonio que vivió anexo a mi casa familiar, lo formaban y le recuerdo con mucho cariño y amistad; la abuela doña Flora Borges. Los padres; don Vicente Delgado Expósito que conocíamos por “Vicente Lucas”, su señora doña Lola Luis Borges y sus dos hijas; Flori y Loli.  

Anécdotas son muchísimas, pero la que más me llamó la atención en la infancia, un día de vuelta a casa desde el Colegio, me encuentro a Doña Lola leyendo la prensa en la ventana de su casa con el papel virado. Meditando como era posible que doña Lola leyera las noticias con el periódico al revés, enseguida me di cuenta que lo que leía eran las noticias que en ese instante trasmitía la radio que tenía en el fondo de su habitación.

A don Vicente lo recuerdo, con un maletín cobrando facturas y recibos, en el Estadio municipal de Los Cuartos en los partidos de fútbol (decía que había jugado de portero en el Sporting Orotava, suplente de Olmo), y recuerdo su fallecimiento, ver su cadáver por la ventana que daba a la calle, lo que me supuso una depresión infantil terrible que me tuvo una semana en cama con mi tía Consuelo Abréu González mi segunda madre que vivía con nosotros. A doña Flora no la recuerdo mucho, era demasiado pequeño, ni recuerdo su fallecimiento.

Los juegos infantiles eran monumentales, tanto en mi casa como en la suya, siempre con el espectáculo de realizar veladas de niños.

La fotografía habla por sí mismo, vemos en la ventana de su casa, (la única, pues por la derecha estaba la puerta de entrada principal); a doña Lola con sus hijas Loli y Flori.

Doña Lola era una gran modista de caballero había trabajado en los talleres de don Lorenzo Villavicencio, y en su casa hacía su propios trabajos.

Con el tiempo alquiló la habitación que daba para la ventana de la calle, convirtiéndola en portada, siendo el primer inquilino el amigo y convecino desde la infancia de la misma calle Tino Santos Cruz. El cual montó una especie de pequeño comercio que a lo largo del tiempo sufrió una metamorfosis en el argumento del tipo comercial. Llegando a tener; Pollería, frutería, Bazar, juguetería, hasta una relojería que se le montó al amigo Eduardo en un despacho acristalado que se le ubicó a la entrada por la izquierda.

En el tiempo, ambas familias nos mudamos del lugar, sin cambiar de calle; nosotros vendimos y fabricamos encima del salón industrial que teníamos en la misma acera unos cincuenta metros más abajo y doña Lola y sus hijas, permutaron su vivienda por un piso a seis metros de diferencia.

Y así hasta que Flori y Loli contraen matrimonio y se marchan a vivir a Los Realejos y a Santa Cruz de Tenerife, quedándose doña Lola sola en el piso hasta su fallecimiento. Puesto que la última noticia que me llegó como un jarro de agua fría fue el fallecimiento de Loli en la capital tinerfeña, siendo aún joven.

Todo una familia, querida por todos, una madre de la calle El Calvario orotavense y unos recuerdos que hacen revivir la esperanza y los tiempos románticos de glorias y luces.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

EL ADIÓS DE UN GRAN PRESIDENTE



 

Nada más que encender el ordenador, en privado me comunican la triste noticia del adiós al infinito del amigo y convecino de la Villa de La Orotava LUIS GONZÁLEZ ACEBAL Licenciado en Derecho, ex presidente de la Sociedad Cultural Liceo de Taoro, nacido en Villaviciosa (Asturias) y fallecido en la Villa de La Orotava el día dos de Agosto del 2021.

Llegó a la Villa de La Orotava, con su familia, su padre don Luis González maestro nacional de gratos recuerdos, fue destinado a ejercer la docencia, primero en la escuela de la Florida y después en la graduada de Nuestra Señora de la Concepción.

Estudió bachillerato en el colegio Farraís de segunda enseñanza de la Villa de la Orotava, y la licenciatura de derecho en la facultad de la Universidad de la Laguna.

Por oposiciones obtiene la plaza de Secretario de Ayuntamiento, ejerciéndola en las localidades tinerfeñas de; Fasnia, Santiago del Teide y La Victoria de Acentejo.

Deportista acérrimo al balompié, jugó en el Unión Piedad equipo adherido, y siempre fue asiduo seguidor del Real Madrid y de su UD. Orotava.

Liceísta hasta la esencia, fue el presidente qué promovió la compra de la actual sede en la casa de la familia “Ascanio – Monteverde”, considerada una de las mejores de Canarias, en la que hoy el pueblo se orgullece de sus modernas instalaciones deportivas y culturales.

Su etapa presidencial, coincidió con la ilustrada visita a la sociedad del premio Nobel de literatura, el guatemalteco Miguel Ángel Asturias (segunda fotografía).

Fundador de la Coral Polifónica “Liceo Taoro” y sobre todo de la sección de Tenis, la que ha sido merecedora de una excelente cantera del deporte de la raqueta.

Por estos meritorios, altruistas y desinteresados lances sobre la histórica Sociedad del Liceo Taoro, fue nombrado por unanimidad “Socio de Honor” de la mencionada sociedad orotavense.

Contrae matrimonio, con la dama de La Piedad (Villa Arriba) María Magdalena Delgado García, con la que tuvo en común tres hijos: Magdalena, María de los Ángeles, y Luis Sebastián González Delgado. Así como varios nietos.

Conocí a Luis, siendo aún niño, acudía con frecuencia a mi casa familiar de la calle El Calvario con su entonces novia María Magdalena, que compartían amistad con mi hermana Lola.

Ensalza simpatía me unía, siempre hablábamos sencillamente de la Villa de La Orotava, del Liceo, y de su deporte favorito el Fútbol.

El saludo de rigor  amablemente se engendraba cuando nos encontrábamos en las calles de la Villa.

Comparto con convecinos y socios, que Luis fue considerado el mejor presidente que tuvo la Sociedad Cultural del Liceo de Taoro. Además de su amable personalidad, comunicativo con sus amigos y enemigos, y el ser un maravilloso esposo, padre y abuelo.

La ordenación y el esplendor de la Romería de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, los viajes culturales de la Coral Polifónica en las “Semana Santa” a tierra peninsular, fueron productos de sus excelentes gestiones al frente de la Sociedad.

Luis espero que descanse en el paraíso eterno colmado de; fe, esperanza y misericordia, dile a tu querida esposa María Magdalena, lo mal que lo estamos pasando por esta triste pandemia, en la que se producen olas, tras olas.

Un abrazo Luis, hasta siempre.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

domingo, 1 de agosto de 2021

“HIGINIO”

Higinio González García, fue un personaje popular de la Villa de La Orotava, al que le tenía un cariño especial desde niño, era zapatero, y tenía su zapatería en la calle García Beltrán (en el lateral de la plaza de Franchi Alfaro). Allí íbamos con la chiquillada del Barrio (El Llano), a veces a verle trajinar en los arreglos de zapatos y a veces hacerle alguna que otra vileza, pero de aquellas graciosas y vivas, de años idos, de la infancia de mi generación.

Después apareció vestido de agente municipal de la Villa. El respeto de nuestra pandilla pasó del juego de la imaginación infantil a la seriedad de un policía local. Ejerciendo de agente, continuó en sus tiempos libres trabajando de zapatero, hasta que cerró definitivamente la pequeña industria.

Higinio fue un destacado, folclorista, parrandero, dominando a la perfección y con oído absoluto los instrumentos de pulso y púa. En la Villa de Arriba (que conocemos por la Republica), tenía un grupo que ensayaba en casa del Amigo Jesús Rocío (vocalista de la orquesta Copacabana de la Cruz Santa), posteriormente formó un grupo en la Perdoma (antiguo Pago de Higa), regresó a la calle San Juan, casa de Juan Oliva y  finalmente en la Florida.

Decir que en esto de los grupos folclóricos que organizaba, destacaría; la famosa Parranda conocida por “Pancho Pitera” (original del proletariado Tin Victoria), que participaba anualmente en la Romería de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza y en segundo lugar, el famoso grupo de los “Divino”, que amenizaba las recordadas y desaparecidas misas de Luz de  la parroquia de San Juan Bautista en Farrobo, así como el alegre paseo navideño por las nocturnas calles del Casco Histórico de La Villa de La Orotava.

Higinio González García, simplemente “Higinio”, nació en la Villa de La Orotava, en el famoso Barrio “El Ramal”, en el año 1924. Casó en la misma Villa con la dama orotavense María Jesús Bello Hernández. Del matrimonio poseyeron cinco hijos;  América,  Carmelo, Higinio, Irene y David.

En la Orotava vivieron en la calle del Doctor don Domingo González (Castaño), y en La Florida.

Al final del año 1963, con 39 años de edad, decide emigrar a Inglaterra, concretamente a Londres, en donde nacen sus hijos David e Higinio.

En Gran Bretaña trabaja en una compañía llamada GESTETNER que hacia maquinas de forjar fotocopias del mismo nombre y luego haciendo calzado ortopédico que era su verdadero oficio. Falleciendo  aún joven en la capital anglosajona en el año 1990, a los 66 años de edad.

A titulo anecdótico, el amigo desde la infancia en mi Barrio El Llano de la Villa; José Castro (Joseito), de profesión militar,  como fue vecino de su zapatería en la calle García Beltrán. Me contó que, en un viaje que hizo a Londres, se tropezó a Higinio en unas de sus calles, contándole, que seguía comiendo el típico potaje de su terruño canario.

Con este corto relato quiero hacerle un merecido homenaje a este orotavense de corazón, que por circunstancias en la vida tuvo que dejar su querida villa, sin poder regresar a ella. Además agradecer a mi amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava Carmelo González Bello (su hijo), por facilitarme datos que desconocía de su padre al que le tenía un cariño especial en mi infancia orotavense.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL