viernes, 12 de abril de 2019

SEGISMUNDO


 Otra triste noticia en tan corto espacio me llega a través de mi compañero de pupitre y de promoción bachiller superior y revalidas en el Colegio de San Isidro de la Villa de La Orotava, su hermano: RAFAEL RODRÍGUEZ DÍAZ.
SEGISMUNDO RODRÍGUEZ DÍAZ, nace en la Villa de La Orotava el día dos de Julio de 1942. Fallece en la misma Villa, el día 12 de Abril del 2019, a los 76 años de edad.
Estudió en el Colegio de San Isidro de la Villa de La Orotava, y Magisterio en la Normal de la Laguna.
En el mundo profesional, ejerció de profesor en el Colegio de Santo Tomás de Aquino de la Villa de La Orotava. Locutor de la recordada Emisora Sindical y Local “La Voz del Valle”. Y Finalmente se integró en el mundo de la hostelería, ocupando altos cargos directivos en varios hoteles de Tenerife.
Intervino en la presentación de varios festivales de variedades, sobre todo en el concurso que se celebró en la emisora Sindical “La Voz del Valle”, referente a la música ligera de los sesenta del siglo XX, en el que resultó ganador el conjunto musical “Los Rayos Verdes”.
Estuvo un tiempo con su padre en Venezuela. Contrajo matrimonio con la dama de origen gallego; Benilde Cabo Eireos el 28 de Abril de 1962, tuvieron cinco hijos: Segismundo, Luis Alberto, Francisco Javier, Mónica y Yanira Rodríguez Cabo.
Fue el cuarto presidente de la Asociación de AA. AA. Salesianos de La Villa de La  Orotava (1974 – 1975). Durante este periodo de su presidencia se le concedió a la Asociación de AA. AA. Salesianos de la Villa de La Orotava, La Placa San Juan Bosco, por su trabajo desarrollado en el Consejo Regional de la Inspectoría de Córdoba.
En el deporte practicó el Baloncesto, siendo jugador del CB. Rayo San Isidro de la Villa de La Orotava.
SEGISMUNDO fue un hombre bueno, con una capacidad comunicativa enorme, amigo de sus amigos.
Fue uno de los regentes más interesantes en la dirección y organización de hoteles, además de un gran valedor y defensor del mundo turístico en Tenerife, concretamente en el Puerto de la Cruz.
Amigo, espero que descanse en la paz, en el paraíso eterno, colmado de esperanza y misericordia.
Un Abrazo hasta siempre.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIOL


jueves, 11 de abril de 2019

EL QUINTO MOLINO DE LA RUTA OROTAVENSE (II)


La amiga de la Villa de La Orotava: CANDE ABRANTE, remitió entonces (11/04/2019), esta fotografía referente al EL QUINTO MOLINO DE LA RUTA OROTAVENSE.
El quinto molino de la ruta orotavense. Ubicado entre las calles Rosa de Ara y San Juan y enfrente de la Plazoleta que vemos en la foto, lo construyó el Conquistador  Diego de Mesa en el siglo XVI. Fueron algunos de sus dueños José Molina y Briones, 5º Marques de Villa Fuentes (XVIII), Santiago de Molina y Fierro (nieto) alrededor de 1840, mientras que para 1920, figura como su dueña doña Fermina Monteverde y León Huerta.
Los Chorros en fundición en hierro se fabricaron por encargo en Inglaterra, fueron colocados en diferentes lugares de La Villa, siendo Alcalde el ilustre jurista Don Agustín Hernández y Hernández, estaban espaciados por toda La Orotava, reminiscencia de verlos y disfrutarlos desde que era un niño, a ellos acudía en busca de aquella agua cristalina que procedían de las fuentes municipales para el abasto desde Aguamansa.
En la actualidad solo quedan dos; el de la foto y el del  popular Barrio “Los Cuartos”, según me informa la amiga orotavense Conchi González Martín, que está al lado de la Ermita, que se engalana todos los años por la festividad de San Juan (24 de junio) y ya van muchos años. Los demás desaparecieron, del depósito municipal, a raíz de la colocación del agua corriente al final de la década de los años sesenta. Muchos de ellos lo he vistos en domicilios particulares adornando sus jardines, pero en este caso me atesoro, como pudieron llegar a esos términos, el pueblo lo sabrá. Lo normal que se colocaran en sus lugares preferentes e históricos en forma de adornos y que se enramaran como el de “Los Cuartos”.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

MOLINO DE DON CHANO (II)


La amiga de la Villa de La Orotava: CANDE ABRANTE, remitió entonces (11/04/2019), esta fotografía referente al MOLINO DE DON CHANO de La Villa de La Orotava).
Su molino es uno de los molinos que está activos en nuestra Villa de La Orotava, al que acuden desde todos los rincones de la isla, incluso muchas veces lo hacen desde otras islas de nuestro archipiélago, a buscar el sabroso gofio canario, es el conocido por el Molino de “Don Chano” DON SEBASTIAN GONZÁLEZ HERNÁNDEZ, fallecido, esto es curioso porque en todos los establecimientos culturales, sociales, civiles y mercantiles, habitualmente se observan como símbolo de nuestras tradiciones, un grabado de este simpático molino de Don Chano de la antigua calle El Castaño, a plumilla, a carbón, en acuarela, en óleo, en madera y en cerámica etc.
El Molino de don Chano data desde el noviciado de La Orotava como lugar, fue construido en el siglo XVI por Don Bartolomé Benítez de Lugo, regidor perpetuo de Tenerife en el año 1507, alcalde de la Orotava en el año 1512, benefactor del convento franciscano de San Lorenzo Mártir en la villa, hijo 2º,y nacido en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz. Curiosamente podemos observar que el Molino limitaba por lado sur de la Mansión de los Benítez de Lugo.
Don Chano nos facilitó unos datos inéditos de la gestión del histórico molino, tratase de recibos de arrendamiento, fechados en abril del año 1850, y noviembre del año 1880. Facturas y Pagares de reparaciones del molino con fechas de enero del año 1876. Recibos de contribuciones territoriales fechados en diciembre del año 1862 siendo recaudador el Sr. Hernández Barrios. Y otro con fecha de Diciembre del año 1866 siendo recaudador Don Juan Salazar.
En esta documentación observamos que desde el año 1850 hasta el año 1905, el arrendatario era don Pedro Hernández Fuentes. Y el propietario desde el año 1850 hasta el año 1880 era la señora esposa de don Nicolás URTUSÁUSTEGUI. Y a partir del año 1880 lo fue su hijo don Francisco URTUSÁUSTEGUI. Parece que el segundo propietario mencionado toma la propiedad del molino por el fallecimiento del primero, porque los recibos que firma el segundo están confeccionados en papel enlutado. Según testimonio de Don Chano, a partir del año 1906 es propietario Don Emiliano Illada y arrendatario su padre, don Santiago González de Chaves. El cual continuó como arrendatario, con dos nuevos propietarios: don Ubaldo Martínez Casañas (Vecino de la Orotava) Y don Casiano Sosa Martín (vecino de la Victoria de Acentejo). A partir del año 1955, Don Chano (don Sebastián González Hernández), adquiere en propiedad el molino hasta hoy.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

CALLE DEL LEÓN, VILLA DE LA OROTAVA (III)




La amiga de la Villa de La Orotava: CANDE ABRANTE, remitió entonces (11/04/2019), estas fotografías referentes a la calle Los Tostones (actual León) de La Villa de La Orotava.
El amigo y compañero de docencia; JUAN JOSÉ MARTÍNEZ SÁNCHEZ. En su libro “LA OROTAVA, SUS CALLES, SU HISTORIA” en las páginas 34, 35 y 36, con la colaboración del amigo, compañero de docencia de la Villa de La Orotava; RAÚL GONZÁLEZ SUAREZ, nos habla de la calle de Los Tostones (actual León) : “…En el padrón de habitantes del año 1842, ya figuraba el nombre binario de; León y Tostones tal como la conocemos en la actualidad, puesto que Tostón es el valor equivalente a cinco reales y medio de vellón, utilizado en moneda portuguesa. Siendo alcalde de la Villa el abogado don Francisco Sánchez García, se le dio nombre al último tramo de la calle al estadista venezolano Rómulo Betancourt, como recuerdo a su padre don Luis Betancourt que había nacido en una de las calles del popular distrito del Farrobo), una de las arterias más antigua del Casco histórico de la Villa de La Orotava, por donde se unen ambas villas, pues en ella existe una importante confitería de origen alemán subiendo la calle por la izquierda, fundada por EGON WEBEN, destacan los tamboritos unos dulces que tienen una forma y un sabor especial y son único del lugar, muchos son los visitantes de toda la isla, de las islas y de todo los rincones de España y Europa.
Por Los Tostones baja conmovedor el Jueves Santo por la noche, el señor de la Columna del sevillano Pedro Roldan Onieva, y por ella sube en silencio bajo lo acorde de la marcha procesional “Tosca” de Puccini interpretada por la Banda de Música de la Agrupación Musical Orotava, el señor difunto del imaginero sevillano  Vega discípulo de Moltabán.
La calle LEÓN, junto a las de San Juan y Dr. Domingo González García, recorren de Sur a Norte el casco de La Orotava y se convierten en los ejes estructurales y arterias que comunican el barrio El Farrobo con la Villa de Abajo.  Siempre hemos oído hablar que la calle León "era la mayor" del pueblo, pues  inicia su recorrido en la Cruz Verde, en la Piedad, y termina en la confluencia con la C/. Carrera.
Su origen viario parece que lo debe a la reformación que hizo Ortiz de Zárate el 29 de Mayo de 1506: a petición de varias personas hizo repartimientos de solares para casas, "desde el último Ingenio de azúcar sobre la Sierra hasta la parte alta de los cañaverales". Estamos ante el nacimiento de La Orotava.
La calle León aparece primero como una salida hacia "el Camino Real Guanche" que atravesaba de Oeste a Este el barrio El Farrobo y continuaba en dirección a la Florida y Pino Alto por el actual Camino Polo.  A lo largo del siglo XVI se va configurando una trama viaria que queda bien definida en el último tercio del XVII como consta en el plano del Farrobo que se conserva en el archivo de Simancas.
Esta vía, como las citadas de San Juan y Castaño, debido a la acusada topografía, era estrecha y tortuosa, sobre todo en la parte alta del casco urbano; "Las calles pinas son características de la Orotava, que se halla edificada toda en pendiente".
El papel de nexo y comunicación entre las dos zonas del núcleo urbano ha sido muy importante durante siglos y más cuando La Orotava permaneció replegada en sí misma hasta los años sesenta del S. XX, en los que el núcleo primitivo se expandió. Hasta entonces la calle LEÓN constituía el límite oriental del Casco Urbano.
A partir de ella y a lo largo de siglos irradiarán toda una serie de calles perpendiculares, que iban apareciendo en las sucesivas ampliaciones urbanísticas, desde la calle Zacatín a la de San Agustín, conformando un trazado viario bien definido.
La calle León de la Villa de La Orotava conocida desde el siglo pasado por “Los Tostones”, ha centralizado su vida cotidiana a lo largo de su historia, en la paridad entre sus gentes, sus casas, su propia estructura e incluso en la concepción religiosa, dependiendo si el tramo pertenece al Farrobo o a la Villa de Abajo. Fue habitada por miembros de grupos sociales bien distintos: en la parte baja, la aristocracia y miembros de la llamada burguesía agraria; en la parte alta, las clases populares. Recorre del norte al sur el casco histórico, su deformación en forma de pina nos conduce hacia el camino Real Guanche conocido en la actualidad por el “Camino Polo”. 
La arquitectura popular en esta histórica calle se mezcla de acuerdo con  la fisonomía peculiar de la villa. Sus denominaciones a lo largo de su vida se debe; a Don Diego de León que disfrutó de importantes propiedades en el Valle de Taoro, concretamente en el Pago de Higa en el año 1503. 
El día 13 de Mayo del año 1931 a propuesta del entonces alcalde republicano Don Manuel González Pérez, le da nombre a la calle, Capitán García Hernández, principal héroe de la proclamación de la segunda república.
En el padrón de habitantes del año 1842, ya figuraba el nombre binario de; León y Tostones tal como la conocemos en la actualidad, puesto que Tostón es el valor equivalente a cinco reales y medio de vellón, utilizado en moneda portuguesa. Siendo alcalde de la Villa el abogado don Francisco Sánchez García, se le dio nombre al último tramo de la calle al estadista venezolano Rómulo Betancourt, como recuerdo a su padre don Luis Betancourt que había nacido en una de las calles del popular distrito del Farrobo. En los Tostones cabe destacar la casa con el numero 1 con dos plantas y jardín, hoy de la familia Monteverde, fue en otros tiempo propiedad de Don Juan Antonio Urtusáustegui y Lugo Viñas, que escribió el Diario de viaje a la Isla de El Hierro en 1779.
Las casas nº. 2 y 4., comercio de doña Carolina Rivero, y Familia Casanova, fueron propiedad de Don Bernardino González Hernández, conocido por el de las barbas de macho,  rico hacendado. A su muerte el 6 de octubre 1874, hereda las dos casas su hijo natural Don Nicandro González Borges, junto a su madre doña María del Carmen Borges. Ascendiendo la calle hacía el sur, por la izquierda se encuentra la portada de los jardines del marqués de la Quinta Roja donde se celebró la exposición de Horticultura en el año 1888, siendo su gran promotora (la Madama), marquesa viuda Doña Sebastiana del Castillo, en ese jardín se encuentra un mausoleo vacío, que la Madama encargó al arquitecto Francés Adolph Coquet para enterrar a su hijo Don Diego de Ponte VIII Marqués de la Quinta Roja.
Las casas nº.  19, 21, y 23 pertenecieron a la familia del Conde del Palmar, la heredó doña Julia Llarena y Lercaro, a su muerte en el año 1942, dejó un testimonio de crear una fundación piadosa denominada Patronato del Conde del Palmar. La casa 23, La compró don Manuel Borges Hernández, instalando en ella la bodega denominada “La Mereja”.  La casa nº 43,  fue comprada en el año 1904 por James Hyd Dumcan Ingran, médico cirujano inglés, y vendida a una familia de agricultores de apellido “Jiménez”. La calle finaliza en la gran hacienda que fue de un señor cubano llamado Blas Luis, conocida por la Casa Azul, en la actualidad es propiedad de la familia Fuentes Melián.
Los Tostones fue una calle muy importante dentro del contexto histórico de la villa, siempre ha estado al servicio de ir y venir o transportar, pero la calle Los Tostones es de quienes ya están donde quieren estar. Convirtiéndose en el tejido conjuntivo de la ciudad, por ello es necesario recuperar el sentido de la convivencia ciudadana, de humanizar la ciudad y no continuar perdiendo más detalles históricos de los que fue la imborrable calle Los Tostones.
LEÓN: La denominación León aparece con la configuración de la calle, en el siglo XVI.  Consideramos que el nombre se debe a la importancia del linaje de los León y no a un personaje concreto, ni siquiera al conquistador Diego de León, pues siguiendo las Datas no encontramos ningún repartimiento de tierras a los miembros de esta familia, en el nacimiento de La Orotava; pero si aparecen repartimientos dados a Fernando de León, Bartolomé de León, Rodrigo de León y al propio Diego de León (a quien consideramos el iniciador del linaje en Tenerife) en otros lugares. A éste hace referencia una Data de 30 de Abril de 1503 que dice: "que se den 3f. de  t a .. en Guyma y 80 ,f. de s. en lugar que no sea dado". Creemos que Diego de León pasó a disfrutar de importantes propiedades en Taoro, sobre todo en Higa.
CAPITÁN GARCÍA HERNÁNDEZ: Fue la  denominación que se dio a la calle por acuerdo del Ayuntamiento de 13 de Mayo de 1931, a propuesta del Alcalde D. Manuel González Pérez, "a fin de perpetuar en esta Villa tan glorioso  acontecimiento (se refiere a la instauración de la República) así como los nombres de los inmortales héroes los capitanes señores Galán y García Hernández".
En sesión de 30 de Septiembre de 1936 la Corporación municipal acordó "se vuelvan a designar en adelante con los nombres que anteriormente tenían, o sea, León..."
RÓMULO BETANCOURT: En sesión celebrada el 31 de Agosto de 1982, el Ayuntamiento presidido por D.  Francisco Sánchez García aprobó una moción, a sugerencia de la Asociación de Vecinos "24 de Junio", presidida por D. Felipe Hernández Ruiz, en la que se le solicitó la denominación de  " Rómulo Betancourt" para el segundo  tramo de la calle León, que va desde la Casa Azul hasta la Cruz Verde.
Rómulo Betancourt (1908-1981), hijo de padre canario vecino del barrio del  Farrobo (D. Luis Betancourt García) fue Presidente de Venezuela en el período de 1959 a 1963 y un  gran defensor de la democracia en aquel país. A finales de Junio de 1981 visitó La Orotava donde fue nombrado "Hijo predilecto" y recibió un cálido homenaje popular en el barrio donde naciera su padre.
TOSTONES: Es la denominación popular que se ha dado y se sigue dando a la calle León. No tenemos Constancia  documental del inicio de su uso; pero en el Padrón de habitantes de La Orotava de 1842 encontramos la calle "León o Tostones".
La palabra Tostones procede de Tostón o Testoen, que se utiliza en portugués para designar una  moneda de plata. En Canarias se usó el Tostón con valor equivalente a cinco reales y medio de vellón.  …”

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

sábado, 6 de abril de 2019

GLOSA DE UN CORRESPONSAL


El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS, remitió entonces estas notas que tituló “GLOSA DE UN CORRESPONSAL”: “…Ya no se usa tanto, desde luego, o no se usa como antes, pero si alguna encarnación quiere hacerse de la figura del corresponsal, hay que situar como ejemplo a Antonio Expósito Mesa quien pone punto final a cuarenta y cinco años de ejercicio informativo desde su Villa natal.
Desde allí, desde La Orotava, ha venido cumpliendo ininterrumpidamente con una afición que alternaba con su profesión de dependiente comercial para dar cuenta de la actualidad villera, la que él mismo contribuyó a fabricar con crónicas e intervenciones que, a veces con alharacas, reflejaban el quehacer y el devenir de la localidad norteña.
Ahora que se despide, bueno será recordar que llegué a Radio Popular de Tenerife, a principios de los años 70, de la mano de Antonio Expósito Mesa. Un compañero suyo de trabajo, Felo, nos trasladó hasta La Laguna. Antes vimos un partido de infantiles en el desaparecido campo Don Pelayo. Antonio fue hablando de su actividad, de la búsqueda de resultados y del ‘modus operandi’. Uno había iniciado estudios de derecho pero la vocación podía y pudo más, de modo que aquel primer contacto con el padre Siverio, director de la emisora, era todo un impulso: nos estrenamos aquella misma noche en un programa inolvidable, Tablero deportivo. Fue con una crónica deportiva telefónica, rubricada con aquella despedida “Desde la ciudad turística…”, que quedó acuñada para los restos y que de vez en cuando el propio Antonio resaltaba en cualquier conversación amistosa o “intercomunicadores”.
Le estoy, pues, sumamente agradecido. Le conocía de sus inquietudes en el baloncesto, de su presencia en la plaza del Charco o en la de Franchi Alfaro, en  los tiempos heroicos del deporte de la canasta, sobre todo cuando llovía y había que obrar milagros en esas canchas. Y también de su trabajo en tiendas portuenses. De verle luego en cualquier rincón de los campos tomando nota para las crónicas que publicaba Jornada Deportiva.
Antonio fue el prototipo del informador, del corresponsal válido para todo. Ofició sin alardes, sin grandes pretensiones y sin grandes retribuciones a cambio. Su máxima era cumplir. Cumplir con cada envío, con cada transmisión, porque sabía que había gente esperando su información. Era una conciencia periodística, un compromiso con la comunicación adquirida sin enseñanzas ni manuales teóricos, sin otras guías que las que marcaba la propia experiencia y alguna que otra orientación.
Así trabajó durante casi medio siglo, repartiéndose en Radio Popular de Tenerife (COPE) y Jornada Deportiva. Y hasta hizo sus pinitos en Archipiélago Televisión (ATV), una local donde también dejó sello de su amor por la Villa, por sus tradiciones y sus celebraciones. Terminó, claro, haciendo de presentador de festivales o concursos y de maestro de ceremonias de toda condición. Siempre voluntarioso, siempre predispuesto: acabó convirtiéndose en el recurso fijo para cualquiera de esas convocatorias. Para eso le encantaba profesar de villero.
Ganó el premio Domingo Rodríguez Ramírez de periodismo deportivo y ha sido distinguido con las insignias de oro de la Asociación de Periodistas Deportivos de Tenerife y de la Federación Insular de Baloncesto.
En su última etapa activa, ya en el Ayuntamiento, en el gabinete de la alcaldía, siguió trabajando en todo eso que le gustaba y que, con su aportación, se proyectaba adecuadamente. Con razón, le ha confesado a Raúl Sánchez, en El Día, que se retiraba "con la satisfacción del deber cumplido de acuerdo con mis posibilidades, y de haber contribuido en todo este tiempo en honrar y divulgar el buen nombre de La Orotava".
Antonio Expósito Mesa, autodidacta, el corresponsal leal y cumplidor, dice adiós con la satisfacción de haber dado cuenta de tantos y tantos acontecimientos, en algunos de los cuales, fue, además, partícipe activo. En cualquier otro ámbito, sería un corresponsal más. Para nosotros, para aquel equipo inigualable de Radio Popular, desde luego que no.
Ahora, queriendo disfrutar de la familia y de los amigos, sacrificados durante muchos años para atender los deberes de informar, buscará tiempo para dedicarse a la Fundación proyecto Don Bosco y al coro de La Concepción.
Lo hará con el mismo espíritu del eficaz corresponsal que fue.
¡Gracias y suerte!...”

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

viernes, 5 de abril de 2019

INOCENCIO

La verdad que esta vez no sé como escribir, a un amigo, un hermano, un alumno, un jugador de baloncesto a mis órdenes, además de ser su prefecto, y asesor contable – financiero.
Le conocí desde que nació, lo tuve como jugador del Infantil y Juvenil Águila del Valle en Baloncesto (de la Cadena del CB. AA. AA. Salesianos – actual CB. San Isidro), en una inolvidable etapa, de teñir camisetas en la azotea de mi casa, y llevársela a Lala la del Victoria, para que les pusiera los números y letras.
Demasiado recuerdos de la juventud y de la vida, pasé con este muchacho entonces con coleta hasta la mitad de su espalda, que quería como hermano, y que siempre me seguía en todos, sobre todo en lo profesional.
Un muchacho bueno, servicial, amigo de sus amigos y siempre luchando por su familia, sus hijos y su esposa. Qué pena que siendo joven, se nos vaya al eterno, aun no me lo creo.
Inocencio García Torrens nació en la Villa de La Orotava en el año 1957, y falleció en la misma Villa el día cinco de Abril del 2019, a los 62 años de edad.
Estudió en los colegios: La Milagrosa y San Isidro de la Villa de La Orotava, San Idelfonso de Santa Cruz de Tenerife, Instituto de enseñanzas medias La Torrita de la Villa de La Orotava y Ciencias Empresariales en la Escuela universitaria (antigua Escuela de Comercio) de la Plaza Los Patos de Santa Cruz de Tenerife.
En la cultura, fue con fundador de la recordada Asociación juvenil “TAURO”, con la que participó, en aquella inolvidable labor social y educativa por los altos de la Villa de La Orotava.
En el mundo laboral, desde muy joven se integró en las empresas familiares, en las que trabajó con mucha constancia y esfuerzo, desde su gerencia y administración.
Penúltimo hijo de doce hermanos, del ilustre matrimonio orotavense: don José García Bartlet (industrial) y doña Teresa Torrens.
En el deporte, jugó al Baloncesto en el Infantil y juvenil Águila del Valle de la Villa de La Orotava.
Colombofista de pro, perteneció al club Colombófilo de la Villa, desempeñando varios cargos directivos.
Contrajo matrimonio con la dama villera “INMA DOMÍNGUEZ MESA”, tuvieron dos hijos maravillosos: AYOSE Y DAVID GARCÍA DOMÍNGUEZ.
INOCENCIO: en el paraíso eterno, descansa y disfruta de la paz, esperanza  y misericordia.
Ahí están tus padres: don Pepe y doña Teresa,  dile que esto sigue de maravilla, tu niñera doña TORIBIA.
No olvide de jugar al baloncesto como siempre lo hiciste en el Águila del Valle, algunos compañeros como DARDI andan por ese esperanzador lugar, procura jugar con las camisetas que teñimos de amarillo con la ayuda de tu hermano Casiano,
Un abrazo, hasta siempre querido amigo y hermano.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

jueves, 4 de abril de 2019

FIN DE AÑO EN LOS SOTANOS DE LA SINDICAL



El amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava: MANUEL MARTÍN Y MARTÍN, CONOCIDO POR MANUEL "CABRERA”. Remitió entonces (04/04/2019) esta encantadora fotografía referente a la celebración de un Fin de Año (1967), en los sótanos de la Casa Sindical en la calle Cantillo de la Villa de La Orotava.
Evento entonces organizado por la Murga orotavense “PEÑA EL CASCO”, cuya gastronomía corrió a cargo del villero Braulio González (Leal).
Recuerdo que estudiaba en el Colegio de San Isidro de la Villa, sexto curso y revalidas superior. Y esa noche llovía intensamente.
De derecha a izquierda: Víctor Sálamo, Pedro Abelardo, Manolo Cabrera, Antonio Méndez Sálamo y sus esposas.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL