En los años
cincuenta del siglo XX, el Valle de La Orotava carecía de Institutos de
Enseñanzas Medias, estudios que se realizaban en colegios privados reconocidos,
dos de ellos religiosos, aunque muchos se formaban con profesores
particulares y en academias privadas. La labor de estos fue muy valiosa y
se prolongó hasta finales de los años sesenta, cuando empezaron a funcionar los
Institutos de Enseñanzas Medias en el Valle. Hablamos aquí, de las
singularidades de cada uno de los centros, que realizaban las enseñanzas del
Bachillerato como preámbulo a los estudios universitarios, en la década de los
50. El Colegio de "San Agustín" de Los Realejos, entonces situado
frente a la plaza de García Estrada, fue un centro de Enseñanzas Medias en la
categoría de Autorizado Superior. Este establecimiento resolvió uno de los
grandes problemas planteados a la población de Los Realejos donde las familias
económicamente débiles, se veían antes imposibilitadas para sufragar los gastos
que suponía el desplazamiento de los estudiantes a otros pueblos al objeto de
asistir a un colegio donde seguir sus estudios. El Director y fundador, Don
Rafael Yánez Pérez, Licenciado en Ciencias, Ilustre Realejero, muy querido por
sus alumnos, dedicado exclusivamente a la docencia en una etapa económicamente
difícil. Ayudándole en su labor, dos Profesores Licenciados en Ciencias, dos
Licenciados en Letras, dos Sacerdotes Profesores de Religión Católica, una
Profesora de Idiomas, un Profesor de Dibujo, un Profesor de Educación Física,
una Profesora de Escuela Hogar y dos Maestros Nacionales de Enseñanza Primaria.
En lo que a sus peculiares actividades se refiere, el Colegio contaba con dos
escuelas Preparatorias, una de hembras y otra de varones, dirigida
respectivamente por una Maestra y un Maestro Nacional, cuyo alumnado continuaba
en el colegio los estudios correspondientes a las Enseñanzas Medias. Recibía
subvenciones del Excmo. Cabildo Insular y del Ayuntamiento de Los Realejos,
posibilitándole la enseñanza a 30 alumnos con becas, 20 con medias becas.
Además tenía 2 becas importantes denominadas "Viera y Clavijo" y
"Agustín Espinosa". La matrícula en el curso escolar 54-55, fue de
225 escolares, todos ellos de Los Realejos, excepto algunos de San Juan
de La Rambla. En el curso anterior, obtuvieron el título de Bachiller
Elemental, 13 alumnos, y de Bachiller Superior, 7. Las calificaciones que
lograron en los diferentes cursos de Bachillerato, los restantes escolares,
merecieron el unánime elogio del público en general, a la gran labor que el
centro desarrollaba. Durante el curso 1.955-56 se organizaron diversos ciclos
de conferencias públicas, las cuales tuvieron un éxito halagüeño, así como las
destacadas actuaciones de sus conjuntos artísticos de teatro y de música,
mereciendo el aplauso de los espectadores de los diversos pueblos, a los
cuales, el Colegio de San Agustín llevaba a estos grupos de alumnos, como
embajadores de las inquietudes, en todos los órdenes de la cultura de tan
prestigioso colegio. El Colegio de San Agustín, disponía de un equipo juvenil
de fútbol, federado, y organizó uno de baloncesto. Inauguró su biblioteca en el
curso 1.955-56, que constó con interesantes volúmenes, seleccionados teniendo
en cuenta el alumnado a que se dedicó. Fue un importante centro que influyó
notablemente en el progreso cultural de Los Realejos de entonces.
El Colegio
Salesiano de San Isidro de La Orotava, administrado por la Comunidad
Salesiana, que llegó a la Villa de La Orotava el día 24 de
Agosto de 1.948. Fue este un día jubiloso para el pueblo y en especial para los
salesianos, porque en el mismo se cerraba un doloroso paréntesis de clausura
que pesaba sobre el Colegio de San Isidro, la gran fundación del insigne
orotavense Don Nicandro González Borges, que desde 1.909 hasta 1.941 había sido
regentado por los Hermanos de Las Escuelas Cristianas, que abandonaron por
progresivo deterioro en sus relaciones con el Patronato. El día 16 de Julio de
1.941, se produce la salida definitiva de la rememorada institución, de una
manera bastante diferente a como había entrado en aquel ya lejano enero de
1.909, decía la prensa: "Sin ruido, salió de madrugada la comunidad, con
el fin de tomar parte en los ejercicios espirituales que debían comenzar en
Arucas de Gran Canarias el día 21, pero con el propósito bien decidido de no
regresar a la Villa sino es el hermano director para las diligencias
y requisitos del cierre definitivo del colegio". La marcha de esta
comunidad, fue debida a la extensión del conflicto que enfrentaba
ya abiertamente a los hermanos y a la Junta: "La familia del
Presidente del Patronato propaga especies en disfavor de los hermanos, con mira
a sembrar en la opinión pública (entre los que no son de su posición social).
Produciéndose una reacción popular, según recoge la crónica, ya desde principio
de junio de 1.941, "varias personas de toda condición tratan de mostrar su
desagrado con la Junta, porque a su juicio es culpable de que los hermanos
tengamos que ausentarnos de la Villa. Se ha procurado disuadirle de
ellos". El hermano Guillermo Félix en su contestación a la alcaldía
orotavense, después de agradecer la actitud de la corporación y el buen trato
recibido siempre del pueblo de La Orotava, manifiesta: que no siendo sólo
cuestiones económicas las que nos fuerzan a dejar una obra proseguida con tanto
cariño durante treinta y dos años, sino diversas causas de muy diversa índole,
los superiores se ven obligados a mantener su resolución de alejarse de La
Orotava, deseando sinceramente que el Colegio de San Isidro encuentre personas
que den al pueblo completa satisfacción, y nos sustituyan con ventaja. Más si
por cualquier circunstancia, andando el tiempo, desaparecieran o amenguaran las
dificultades que ahora nos obligan a tan dolorosa resolución, gustosísimos
volveríamos los hermanos a ese hermoso Valle donde tanta virtudes germinas. Ya
en septiembre de 1.939 se detecta documentalmente por vez primera la noticia:
"Corren rumores entre la gente de esta Villa de que los Hermanos se
retirarán y vendrán los Pp. de la Compañía de Jesús. El destino hizo
que vinieran los Salesianos, parece ser que no eran del nivel docente y
pedagógico de los hermanos de San Juan Bautista de La Sallesegún
testimonios de ex-alumnos de la Villa, pero realizaron una labor
pedagógica basada en un sólido régimen disciplinario. Su primer Director Don
Claudio Sánchez Martín, de grato e imperecedero recuerdo, pues a él se debe la
eficaz organización de dicho Centro, cuyos frutos se recogieron brillantemente
por los alumnos que por él desfilaron. Desde los primeros momentos del establecimiento
de la Comunidad, se abrieron las clases de primera y segunda enseñanza. El
año 1.954, salió la primera promoción de Bachillerato, aprobando todos los
ejercicios de Revalida de cuarto y sexto curso. En el curso 1.954-1.955, se
abrió una clase nocturna de obreros, de doce a veinte años, a la cual asisten,
con rara puntualidad, unos cincuenta jóvenes, atendiéndose, con preferencia, a
la enseñanza agrícola, que tanto recomendó el fundador de la Institución.
El Oratorio Festivo organizado por el recordado Don Antonio Montero,
recogía a ciento cincuenta niños y jóvenes los domingos y días festivos, con lo
que se cumplió el "sueño dorado" de Don Bosco, que se desvivió
constantemente por reunir en sus Casas a los pequeños desheredados de la
fortuna, inculcándose los más puros principios de la comunidad salesiana. En
este curso, cursaban doscientas noventa y cinco alumnos. Se incorporan los
Sacerdotes, Don Pedro Alba Montesinos, Don José Rodríguez González, y Don
Rafael Soldevilla Hidalgo; los clérigos Don Juan Urbistondo de los Ríos y Don
Leonardo Girón Sánchez; y el Coadjuntor, Don Emilio Gómez Cantero. El cargo de
Director lo ocupaba el Sacerdote, Don Pacífico Medina Sevillano. Además de los
citados, la comunidad salesiana contaba con; Don Guillermo Navarro González,
Don Manuel Cereceda Pascual y los clérigos Don Alicio Elvira Primero, y Don
Antonio Escobedo Rodríguez. En este Colegio, se respiró en aquellos años,
ambiente que se inculcaba, en un constante amor al trabajo, en medio de un
cordial afecto a los profesores y un espíritu de fraternidad entre los alumnos.
También en el curso 1.954-55, se abrió por primera vez el internado,
acondicionándoles largas salas para ello. Entre las mejoras llevadas a cabo, en
el mismo Colegio en aquellos años, se contó con la de un amplio campo de
deportes, como el fútbol y baloncesto, así como las reformas del salón de actos
y laboratorio.
Colegio de
Santo Tomás de Aquino de La Orotava, -en la categoría de Autorizado
Superior de Enseñanzas Medias- realiza desde su fundación una labor educativa e
instructiva que se hace extensiva a todos los pueblos del Valle de La
Orotava, ya que en él recibían los beneficios de la enseñanza alumnos de las
localidades de esta zona. Su Director era el Licenciado en Ciencias Químicas, Ilustre
hijo de La Orotava, ex-alcalde de su Villa natal, ex-gobernador Civil de
Valladolid y Málaga, Don José Estévez Méndez, muy conocido y admirado, quien
contó con un competentísimo profesorado que reseñamos a continuación: El
Sacerdote Mateo Báscones García; Doña Társila Sicilia Hernández; Doña Ofelia
Díaz Fernández; Doña Minita Stjerholm F. Carmona; Doña Candelaria Hernández;
Doña María Pérez Núñez; Doña Milagros Méndez Pérez; Doña Candelaria Estévez
Méndez; Don Rafael Yánez Pérez; Don Domingo Hernández Perera; Don Domingo Pérez
Betancourt; Don Anselmo Fariña Molina; Don José María Perdigón Hernández; Don
Juan Manuel Hernández Delgado; y Don Argeo Marrero Ojeda. El número de títulos
de este competente profesorado, es uno de Religión Católica, tres de Licenciados
en Filosofía y Letras, tres Licenciados en Ciencias Químicas, uno
Licenciado en Derecho, dos de Peritos Mercantiles, seis de Maestros de Primera
Enseñanza, uno de Profesor de Idiomas, uno de Profesor de Dibujo, dos de
profesores de Educación Física y tres de Profesoras de labores. El Colegio de
Santo Tomás de Aquino de La Orotava, fue inaugurado durante el curso
1.953-54, con una matrícula de 212 alumnos. Se cursaban los estudios de:
Bachillerato -Curso Preuniversitario y los seis cursos con las dos Revalidas
correspondientes en la categoría de Autorizado Superior-; Carrera de Comercio,
Ingreso; Contabilidad; Cultura General; Mecanografía, etc. Los precios que se
fijaron durante el curso 1.954-55, con derecho al uso de biblioteca,
laboratorio, material, etc., estaban sujetos a descuentos progresivos por
número de hermanos del alumno, que alcanzaban al 20 y 50 por ciento hasta la
concesión de beca completa desde el 4º hermano inclusive. Entre otros
beneficios figuraban los descuentos del 10 y 15 por ciento para viajes, a los
alumnos de los barrios de esta Villa y pueblo limítrofes. Se les concedieron 7
becas a estudiantes de bajos recursos económicos, entre ellas, el denominado
Fernando Estévez y Nicandro González Bórges. Asimismo se concedió 18 medias
becas y 23 cuartos de becas. Además el Excmo. Ayuntamiento de La
Orotava le concedió una subvención anual con la que el colegio sostuvo 11
becas más. Estos datos dicen mucho más que toda ponderación de otro género.
Quedando demostrada la gran labor cultural que desarrolló este importante
centro en la década de los años cincuenta, promovido y fundado por el
mencionado Ilustre D. José Estévez Méndez.
Colegio
de La Milagrosa de La Orotava, regentado por la
Comunidad de Hermanas de La Caridad. Fue por Agosto de 1.884,
cuando la citada comunidad dedicaron para la educación de las niñas la amplia
sacristía del templo del Hospital de la Santísima Trinidad, habida cuenta
la necesidad por entonces de centros de enseñanza en la
Villa de La Orotava. Junto a esta aula que se destinaba a las
alumnas "de pago" se inauguró otra en que se educaba gratuitamente a
las niñas carentes de medios económicos para sufragar los gastos de su
enseñanza. Este centro denominado en principio de la Inmaculada Concepción,
obtuvo un éxito cada vez más creciente, por lo que fue necesario habilitar
otras dependencias, para atender a una matrícula que iba rebasando en mucho,
los cálculos previstos. Los donativos y el tesón ejemplar de las Hermanitas,
originó la construcción de un segundo piso sobre los antiguos claustros del
patio central del Hospital, para ser dedicado a dicha tarea educadora. Pero
como a los pocos años, a pesar de la última mejora del edificio, éste resultaba
insuficiente para recibir a tantas alumnas, se pensó en trasladarlo a una casa
que reuniera mejores condiciones, con lo que además, se lograría alejar el
colegio del hospital. Y así, en Julio de 1.921, siendo directora de este
colegio, Sor Soledad Cobián, se logró su traslado a la casa núm. 1 de la calle
de Nicandro González Borges, alquilada porla Comunidad. Una vez allí, su
primitiva denominación de Colegio de la Inmaculada Concepción, fue
sustituida por la de Colegio de La Milagrosa. Hasta el año de 1.930,
jornada tras jornada, las Hermanitas, que continuaban residenciadas en el
Hospital, a él regresaban cada noche luego de sus tareas educativas para al
rayar de cada aurora, ir hasta su casa de la Calle de Nicandro González
Borges, en que las esperaban ansiosas las alumnas. El 15 de Junio de 1.939,
siendo Visitadora de las Hijas de la Caridad, Sor Teresa Sánchez, en
ocasión de su visita a esta Villa, colocó la primera piedra del edificio, en
que actualmente funciona el nombrado centro. En el curso 1.954-55 en las
espaciosas aulas del Colegio de La Milagrosa, dotada con suficiente
material pedagógico moderno se educan 400 niñas, de las que 200 se le daban
clases gratuitamente. Veinte y una Hermanas tenían a su cargo esta tarea
docente, con Párvulos, alumnas de Cultura General, de Bachillerato, Magisterio,
Comercio, Música, Pintura y enseñanza completa del Hogar. Dirigiéndose la
educación física y el ejercicio del deporte en los amplios patios interiores.
Con los mencionados centros, en el curso 1.954-55, funcionaban en el Puerto
de La Cruz, un colegio de Enseñanzas Medias "El Gran Poder de
Dios", un Taller-Escuela Profesional Sindical en las modalidades del
metal, madera y formación comercial, denominado Instituto Laboral, en la
actualidad Instituto de Formación Profesional, además existía una Academia
Mercantil y dos colegios religiosos, de las Madres de la Pureza de
María, y Padres Agustinos de "El Escorial", este ultimo requerido por
el inolvidable padre "Flores", inaugurado el trece de Enero de 1957.
BRUNO JUAN
ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR
MERCANTIL
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