martes, 31 de mayo de 2022

QUE BONITAS ERAN AQUELLAS FIESTAS EN MI ADOLESCENCIA

En el muro del FACEBOOK del amigo de la Villa de La Orotava JESÚS ROCÍO RAMOS, aparece un magnífico y extraordinario trabajo suyo que comparto con su permiso, adaptado por ÁNGELA PÉREZ ROCÍO, que se titula “QUE BONITAS ERAN AQUELLAS FIESTAS EN MI ADOLESCENCIA: “…Hoy voy a recordar como yo viví las Fiestas en aquellos años de mi adolescencia, donde no teníamos de nada, pero que felices éramos.

Esperábamos que fueran las fiestas para estrenar el traje y los zapatos; en mi caso el traje era el que había pasado antes por mis tres hermanos y adaptado para mí por mi tía la costurera Ángeles Sosa. Me quedaba bien, pero no puedo decir lo mismo de los zapatos. Eran de calzados Dorta, más duros que el carajo. No solo las llagas que me hacían, sino los leñazos que me daba, porque eran de suela y resbalaban ¡coño los estregaba en la tierra, pero no se le quitaba! No me digas al pisar el brezo, el jueves de las alfombras patinaba, y con los pies llenos de esparadrapos iba a la plaza de la alameda, donde estaban los puestos con las ruletas.

Recuerdo que entre los premios daban conejos y las mesas con cuadraditos de colores, donde ponías las perras (dinero) y si salía el color donde tú la habías puesto, tenías premio, pero siempre ganaban ellos. En verdad no se cual eran sus nombres, pero yo las conocía así, y por otro lado la tómbola de las dichosas chochonas, amigos que pesados eran. Y como no, la gran tómbola de caridad que al frente de ellas estaba la gente rica, cuyas rifas no se con que las pegaban que no había forma de abrirlas. Prueba de ello que en el mostrador había unos vasos con agua para mojarlas y poderlas abrir.

También había un puesto donde vendían las cotufas y las papas fritas, y otros con las nubes hechas con el azúcar, las manzanas caramelizadas y los carritos con los helados de Víctor Polo, los de Olivera del Puerto de la Cruz y Antero con la garrafa de un lado a otro. Los vendían poniendo en un molde una galleta y según el tamaño te cobraban.

Recuerdo ver a las pobres turroneras que debajo de la mesa donde exponían sus turrones, con una cocinilla de petróleo hacían la comida y se quedaban de noche alumbradas con la luz de un carburo. Ya desde ese tiempo destacaban los turrones de la Rosa, que se situaban donde tenía el carrito de Eusebio, viniendo al frente su propietario Don Emilio de la Rosa con sus célebres turrones y unas rosquillas que a mi madre le encantaban. También un saco grande con manises horneados que eran deliciosos, que los ponía a la venta y los vendía al instante. Sin olvidar los barquillos de Tomas que estaba por los alrededores y las almendras saladas que vendía Eulogio en el Victoria.

Con aquella bonita edad solo pensaba en las fiestas y con una pena tremenda cuando se terminaban…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

lunes, 30 de mayo de 2022

JÓVENES REPUBLICANOS OROTAVENSES

El amigo de la Villa de La Orotava; JOSÉ POLEGRE ÁRBELO “PEPE”, remitió entonces (30/05/2022) desde la octava isla Venezuela, esta fotografía correspondiente a jóvenes republicanos orotavenses, retratados en la playa de Martiánez del Puerto de la Cruz en los primeros años treinta del siglo XX.

En el grupo hay dos con guantes de boxeo, por lo que se fueron de ocios playeros y deportivos.

Solo están identificados los dos de la izquierda; Domingo González que conocíamos por “El Cruzantero” y Manuel Machado suegro del amigo Pepe.

Domingo González “El Cruzantero”, padre de Domingo, Paco y Nicolás González Lemus, tenía un merendero en la calle Zacarías de la Villa Arriba, lugar de reuniones de los villeros de izquierda y progresistas. Tengo una simpática anécdota de él, mi padre  Juan Álvarez Díaz, me manda a por un litro de vino, y me da una moneda de cincuenta pesetas, con la cara de Franco, me voy caminando por la calle León – Tostones hacía arriba, cuando llego al merendero le pido a Domingo un litro de vino para mi padre, al final cuanto es, le pago con la  mencionada moneda, tal fue la sorpresa, que Domingo a ver la cara de Franco. La lanzó hacía la calle, por lo que me puse a encontrarla para mis ahorros y nuca la vi.

De Manuel Machado, solo tengo referencias de algunos amigos mayores de la Villa, que me contaron que por sus ideales progresistas y republicanos, emigró exiliado a Venezuela.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

sábado, 28 de mayo de 2022

FELIZ CUMPLEAÑOS JUSTO

En el muro del FACEBOOK del amigo de la Villa de La Orotava JESÚS ROCÍO RAMOS, aparece un magnífico y extraordinario trabajo suyo que comparto con su permiso, adaptado por ÁNGELA PÉREZ ROCÍO, que se titula “FELIZ CUMPLEAÑOS JUSTO: “…Hoy 28 de mayo es tu cumpleaños, ya ves que no me he olvidado, y al igual que lo he hecho con los demás hermanos, hoy voy a tratar de contar parte de lo vivido contigo; en verdad que no sé por dónde empezar.

Tal vez no sea lo más propio comentando a cuantas bodegas y guachinches fuimos, con todos los amigos. Yo creo que no se nos quedó ninguno porque los conocías todos ¡Cuántas veces nos pasábamos bebiendo! Al final cantábamos, discutíamos y si la cuenta o el vino no nos gustaba, tu eras el que dabas la cara y por eso tenías fama de protestón. Tu tenías la fama y nosotros el provecho. Cuántas veces nos marchabamos enfadados, y al día siguiente sonaba el teléfono y me decías: ¿Tú me llamaste?

Eras un buen ebanista, todavía conservo el juego de cuarto que con tanto cariño me hiciste para mi dote. Qué bien se te daba la cocina y tu especialidad eran los conejos en salmorejos y el bacalao encebollado.

Cómo disfrutabas cuando el domingo de la romería nos invitabas a pasar por tu casa, que ese día se convertía en un ventorrillo, a tomarnos un vaso de vino y probar tus almaderos. Las papas bonitas que se las descogías al bueno de Domingo, para reservarlas para ese día, lo mismo que con el vino que si te gustaba donde íbamos, traías una botella, para reservarlo para ese día.

Que gracia me hacía cuando le decías a tu hija: “Carmen vete a la bodega y trae vino”, en verdad te esmerabas y había que ver la cara que se te ponía cuando te decíamos que nadie los arreglaba como tú

Qué bien lo pasamos cuando fuimos con Pepe Calzadilla, a las Fallas de Valencia, llevábamos todo pagado con anticipación por una agencia en La Orotava. No sé cómo te las arreglabas, todas te las encontrabas, la primera noche que pasamos en el hotel, te levantaste el primero y te llamo el director para comunicarte, que no habían recibido el pago por la agencia, que dicha agencia estaba en la lista negra, pero que no nos preocupáramos, que gozáramos de las fallas que cuando regresáramos le enviáramos el dinero, había que ver cómo te quedaste, me lo comunicaste y en ese mismo instante yo me puse desde el hotel en contacto con la agencia y bajo amenaza judicial, le comunique la situación y nos fuimos a dar una vuelta y de regreso al hotel ya habían enviado el dinero.

Recuerdo como si fuera hoy cuando eras novio de Guillermina, yo siendo un chaval iba a la casa a verla porque era muy cariñosa conmigo, me quería mucho. Qué buena era, guapa, trabajadora y con el tiempo una buena madre. Recuerdo en aquel patio, al pie de los bastidores cerca del granero, entre las helechas y corales, tenía su pequeño taller de calados. Me encantaba oírlas cantar la canción calle de Elvira (donde habitan las manolas). Fue una mujer que amaba a la familia y siempre estaba dispuesta a ayudar a los demás, lo demostró no solo ayudando a las hermanas, sino a mi hermana Onelia en los bailes en el camino de Chasna y a mí en la venta. Espero en otra ocasión poderle dedicar mi baúl a ella y contar todas sus virtudes, la pobre no merecía la fatal enfermedad, pero puedo asegurar que no le falto los cuidados y el cariño de sus hijos quedando los médicos asombrados con la delicadeza que la trataban.

Recién casado emigraste a Venezuela, no te fue bien y regresaste más pronto de lo previsto, y seguiste trabajando en tu oficio y más tarde con Guillermina de ventero.

Como son las cosas, la venta de casa no te gustaba, estabas muy orgulloso de tus hijos: Ernesto, Enrique, Margarita, Carmen María y Milagrosa. Tal vez a ellos no se lo demostrabas, pero a todos nosotros y a los amigos si. Siendo más tarde tu nieta Sara, la niña de tus ojos, (todo te parecía poco para ella) si la vieras hoy toda hecha una señorita, con su carrera terminada.

Tu hijo Ernesto como todos sabemos emigró a Venezuela y después de tantos años de trabajo se vio afectado como tantos por el dichoso régimen (fue demasiado duro) y más tarde se le declaró una maldita enfermedad, que terminó con su vida. La que a mí me la tuvieron silenciada y (todavía me cuesta creerlo) sufriste una delicada operación, pero, cómo la llevabas, madre mía con aquella muleta y sin poder caminar y de repente nos sorprendiste a todos viajando con tu hija Magali y tu Sara a Venezuela, esta vez a ver a tu hijo.

Yo no me lo podía creer de la forma que estabas, hacer ese largo viaje. Fuisteis muy atrevidos en ir a Canaima y coño, ¿No te picaron los mosquitos?. Magali no podrá decir lo mismo, te montaste en las lanchas y fuisteis para todos lados, menuda fiesta cuando al regreso me enseñaste las fotos y contándome como lo pasaste y como lo gozaste increíble.

Se te daba bien cantar cuando estabas entonado, recuerdo que dentro de tus canciones preferidas era La cieguita, Lamento borincano, Amapola y Sivoney, y otras a cuantos les hacías creer que eras músico enseñándoles la foto que te hiciste con el uniforme de Lalo, el tapicero, en verdad que no eras músico, pero a veces te hacías. Tenías cada ocurrencia.

Voy a terminar por hoy contando cómo me la pegaste, fue en una Navidad, en la venta me sobraron unas cajas de pasteles y ya pasada la Navidad a quien se los iba a vender y tú te enteraste, me llamaron por teléfono, preguntando que si era la venta de Rocío y si teníamos pasteles, que si teníamos cantidad que llamaban del Hotel Las Vegas, coño yo vi los cielos abiertos, dije menos mal, yo esperando a que vinieran a buscarlos y no aparecieron, pasada unas horas llegaste a casa y me preguntaste si habían venido a por los pasteles y muerto de risa me dijiste que habías sido tú quien me llamó, coño, que bien la estudiaste. Otra, cuando le dijiste a Ángel que salías con él a por el coche que si no lo hubieras tenido te mandaba al carajo y cuantas cosas más que las contaré en otra ocasión si todavía estoy por aquí.

En verdad que te echo de menos porque no solo fuiste mi hermano, sino también mi amigo.

Feliz Cumpleaños, un abrazo Jesús…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

RONDALLA GARACHIQUENSE 1910

El amigo desde la infancia de la Villa de La Orotava; JOSÉ POLEGRE ÁRBELO “Pepe”, desde la octava isla Venezuela me remitió entonces (27/05/2022), esta interesante fotografía, referente a esta inolvidable Rondalla Garachiquense del año 1910.

Agrupación de pulso y púa XXVII DE MAYO de Garachico, una rondalla compuesta por músicos garachiquenses que no identifico, pero quizá mis compañeros de docencia; Lorenzo Dorta (ex alcalde de la ciudad) y Carlos Acosta podían esbozar.

Según me cuenta el amigo Pepe, que su abuelo paterno Cirilo Polegre López se localiza en el centro de la misma. Era zapatero y músico, emigrando a la Villa de La Orotava, donde se incorporó a las  rondallas villeras y a la Banda de música Municipal que entonces dirigía el maestro vallisoletano don Tomás Calamita y Manteca.

La panorámica está tomada en el viejo muelle de Garachico, en la trasera de  la Cooperativa Agrícola Norte de Tenerife (FAST).

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

¡FELIZ MAYO CANARIO!

Fotografía referente a mi colección particular tomada de mi cámara.

 

El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (28/05/2022) estas notas que tituló; “¡FELIZ MAYO CANARIO!”: “…Trata el Puerto de la Cruz de incorporarse a las celebraciones del Mayo Canario con arreglo a las características de su destino turístico. Siempre fueron los portuenses amigos de romerías y bailes de magos, pero eso sí: aquellos que se convocaban en los programas de fiestas de las localidades vecinas. Luego se hacían en la propia y les costaba más, mucho más, lucir la vestimenta típica. Y lanzarse a la diversión. Eso sí: después eran los primeros en buscar cualquier excusa para hablar de mala organización, poca gente o ambiente desanimado.

Bueno, las tradiciones hay que crearlas y hay que perseverar hasta que la población va evolucionando y las va haciendo suyas, hasta identificarse y proporcionar una vitalidad que, en distintas formas, y ajustadas a la idiosincrasia y hábitos sociales del lugar, terminan creciendo y enriqueciéndose.

Por eso es de agradecer, por ejemplo, que en los colegios haya actividades donde el profesorado y los alumnos participen y aprendan, donde cultiven las costumbres y forjen la etnografía del lugar y de la colectividad a la que pertenecen. Que acudan esos días a clase con la vestimenta identificativa, que se les vea por las calles, divertidos y alegre, entonando aires típicos de las islas, es una manera de ir profundizando en los valores autóctonos. Que haya banderas canarias en ventanas y balcones, además de en los centros oficiales e instituciones, es una manera de contribuir a ese ambiente que se procura con nobleza y coadyuva a la identidad en torno al 30 de mayo, el Día de Canarias.

El Puerto, decimos, intenta tener sus propias celebraciones. Quienes primero lo intentaron, hace años, están comprobando que, poco a poco, la cosa empieza a lucir. Por ejemplo, una nueva edición del paseo romero previsto para hoy sábado, que este año va seguido de un baile, se va convirtiendo en una convocatoria atrayente que en esta edición igual se ve limitada por la final televisada de la Champions League. Pero, bueno, siempre hay gente y las generaciones más jóvenes están llamadas a desafiar este y otro tipo de imponderables.

Habrá un festival folklórico el próximo martes, festividad de la Comunidad Autónoma, última estación de una programación en la que la Ruta de la tapa, el Concurso de escaparates, ventanas y balcones y De compras por el Puerto se suceden como interesantes reclamos para vitalizar la conmemoración, ampliar el espíritu participativo y fortalecer las tradiciones. La iniciativa conjunta de la concejalía de Comercio del Ayuntamiento y de la Asociación Casco Antiguo ha incluido jurados profesionales y premios para motivar a los establecimientos que participan y a sus clientes.

Se trata de que el Mayo Canario 2022, como lo titulan, sea una conmemoración animada y atractiva, máxime después de la pandemia. No puede ocurrir que el Puerto deje de brindar sus encantos y sus opciones en una fecha tan identificativa y tan señalada. No solo a los extranjeros sino a los nativos y residentes que seguro pueden encontrar, en la sempiterna singularidad portuense, los atractivos para disfrutar.

¡Feliz Mayo Canario!...”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

jueves, 26 de mayo de 2022

MISS LICEO DE TAORO 1935.


El periódico tinerfeño “La Prensa”, publicaba en su portada principal esta fotografía de la belleza orotavense LILIA ESTÉVEZ GARCÍA (primera fotografía)

Nacida en la Villa de La Orotava el día dos de Febrero del año 1918 y fallecida rodeada de su familia el día ocho de Octubre del año 2021, a los 103 años de edad.

Con 17 años, elegida “MISS LICEO TAORO” en el año 1935, entonces coronada por el presidente de la mencionada sociedad Maestro Nacional don Eulogio Borges Coello (segunda fotografía).

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL


miércoles, 25 de mayo de 2022

UN TRIBUTO A DOMINGO Y DOLORES

Fotografía compartida con la página digital del Excelentísimo Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife.

 

El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (25/05/2022) estas notas que tituló; “UN TRIBUTO A DOMINGO Y DOLORES”: “…Un ensayista extraordinario y una periodista cabal y cualificada, a quienes unió la pasión por la literatura, cada cual en su óptica, uno esmerándose permanentemente para interpretar la realidad; y la otra, en un ejercicio admirable de trasladar a la pieza informativa los elementos noticiosos con la sutileza del lenguaje poético.

Domingo Pérez Minik y Dolores Campos Herrero. Les conocimos y les tratamos, bien es verdad que nos hubiera gustado hacerlo en mayor medida, sobre todo para profundizar en su sabiduría y en la sutileza de la que hicieron gala en su pensamiento y en su escritura.

El primero, en la antesala de una entrevista televisiva en exteriores. Nos presentó --¿quién si no?- Juan Cruz Ruiz, que le considera, como saben, uno de sus maestros. El paisanaje pudo lo suyo, hace ya tantos años. Cuando supo de nuestro lugar de origen, se explayó en pocos minutos sobre sus valores históricos y culturales. Fue una lección, dicha además con la visión empírica de un profesor que sabía mucho y pasaba de un personaje a otro con pasmosa facilidad.

El azar y las circunstancias quisieron que muchos años después asistiéramos a la instalación de una fotografía de gran tamaño, original de otro discípulo suyo, Carlos Schwartz, en una de las vidrieras de la remodelada Biblioteca Pública Municipal ‘Tomás de Iriarte’, en el Puerto de la Cruz. Carlos había plasmado un espacioso rincón de la biblioteca de Pérez Minik, con su sillón vacío, de modo que cuando entramos en el recinto y la contemplamos, nos imaginamos allí sentado al ensayista y crítico enriqueciendo su erudición.

Leíamos a Dolores Campos Herrero desde que ingresó en Canarias 7, un proyecto periodístico que cristalizó en una época trascendental para la convivencia de los canarios que, dicho sea de paso, se quedó a medias para representar una aspiración noble que, por circunstancias que no vienen al caso, se frustró. La suya era una delicadeza palpable, la que muchos años después, trabajando ya en televisión, trasladaba a cada pieza, cuando la crisis de los cayucos, cuando había que consultar a la Delegación del Gobierno las cifras, las nacionalidades, el estado físico de los migrantes irregulares y el lugar donde quedaban internados.

Campos imprimió naturalidad al drama, a la tragedia que era un fenómeno inusual y de indudable impacto sociológico, pendiente aún, por cierto, de una solución estable. Era difícil acreditar sensibilidad pero Lola lo consiguió para hacernos ver que el drama iba más allá de la reiterada llegada de ciudadanos de ambos sexos, de todas las edades, de muy diversas nacionalidades, unidos por la ilusión de haber alcanzado la tierra de promisión… que no era tal.

Si Pérez Minik, en sus libros y en sus artículos, fue el autor capaz de auscultar la condición humana del insular hasta situarlo en el centro de una convivencia solidaria y humanamente enriquecedora y plasmarlo en “Isla y Literatura”, una obra fundamental para entender su quehacer literario y su interpretación de la realidad que captaba por muy distintas visiones que contemplara; Campos Herrero brilló con la redacción atractiva y sencilla para exponer las aristas de un problema transfronterizo que ni el Derecho Internacional ni la diplomacia ni el supuesto poder de organizaciones, teóricamente unidas para prevenir y afrontar coyunturas desequilibrantes, han podido estabilizar mediante políticas y alternativas respetables y factibles.

A uno y a otra, a Domingo y a Dolores, rendimos hoy tributo con propósito de seguir aprendiendo de su obra y de su entrega. Para los periodistas canarios, una referencia. Para los destinatarios de su mensaje, para los amantes de la literatura, de prosa efervescente como fue la de Pérez Minik y de poesía latente como la de Campos Herrero, para los lectores empedernidos y para los consumidores de información en general, especialmente la de épocas muy distintas pero no menos atrayentes, con la renovación de los lenguajes artísticos o la interpretación del surrealismo o los versos esclarecedores, para todos ellos, confiamos en que este audiovisual y estos testimonios resulten de interés y les acerquen a su producción intelectual.

 

(Texto leído anoche en la introducción del acto convocado por el Observatorio Domingo Pérez Minik en el TEA de Santa Cruz de Tenerife)…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

martes, 24 de mayo de 2022

ANDOMI (III)

Al final de la década de los años cincuenta y principio de los sesenta del siglo XX, tres entonces joven emprendedores de la Villa de La Orotava, crearon una empresa sociedad colectiva mercantil de gaseosa y fábrica de hielo con el denominativo de las primeras silabas de sus nombres propios “ANDOMI”, que estaba compuesta por los socios; hermanos Miguel y Antonio Herreros y González de Chaves y el licenciado en ciencias químicas por la Universidad de La Laguna Domingo Pérez.

La empresa tenía su domicilio y fabrica en la plaza de San Francisco de la Villa de La Orotava, compitiendo en el mercado local y comarcal con otra de más antigüedad con domicilio en la calle La Carrera denominada EL DRAGO, propiedad de los hermanos Juan y Camilo Padrón.

La panorámica es una instantánea tomada en la carretera Nueva (actual Obispo Benítez de Lugo), a la altura de la casa de don Francisco Dorta y Jacinto del Castillo y la trasera del chalet de don Emilio Luque Moreno, al final de  los cincuenta o principio de los sesenta del siglo XX.

Corresponde a dos de sus operarios; Cabrera y Pedro chofer del Barrio de San Antonio. Retratados delante de una de sus camionetas de reparto.

Los hermanos Miguel y Antonio Herreros y González de Chaves, regentaban paralelamente una empresa familiar que todavía coexiste “ALMACENES HERREROS”, y Domingo Pérez, que era licenciado en ciencias químicas, se encargaba de elaborar los polvitos para la fábrica de gaseosas, además era profesor de química y física en el colegio de San Isidro de La Orotava, daba clases particulares conjuntamente con su señora doña Berta en su domicilio particular en la calle de la Iglesia (Inocencio García Feo), en la mansión donde estaba la barbería del recordado maestro Juan Regalado. 

De don Domingo Pérez tengo gratos recuerdos como alumno suyo en el colegio de San Isidro de Química de quinto curso de Bachiller y Física de sexto curso de Bachiller. Lo llamábamos cariñosamente don Domingo “El ANDOMI” como alusión a su industria, recuerdo sus explicaciones de las formulas de química orgánica e inorgánica. Años más tarde a través de unas oposiciones entró a formar parte del claustro de profesores del Instituto de Icod de Los Vinos, retirándose de su vida como docente en el Instituto de Villalba Hervás en La Orotava ubicado en la zona La Torrita.

Las fabricas de gaseosas desaparecieron al final de la década de los años sesenta por la competencia de las multinacionales de marcas conocidas como La Pesi Cola, Coca Cola, Sprinter, Seve Up etc…

ANDOMI y EL DRAGO, ya forman parte de la historia mercantil de La Villa de La Orotava, en casa aun conservo un sifón ANDOMI, que se canjeaba para su relleno del agua con gas.

 

BRUNO JUAN  ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

lunes, 23 de mayo de 2022

SEBASTIÁN, CHANY, CHILENO


 

El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (23/05/2022) estas notas que tituló; “SEBASTIÁN, CHANY, CHILENO”: “…En Santander, donde asistíamos a la asamblea anual de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), nos sorprende –bueno, sabíamos de su largo proceso de salud quebrantada- el fallecimiento de Sebastián González Villavicencio, a quien conocimos cuando, siendo niños, cuando jugaba en el Infantil Dehesa, un equipo pionero en el pujante proceso del fútbol base del Puerto de la Cruz, cuando no había más campo que El Peñón y cuando los entrenamientos eran absolutamente rudimentarios.

Después, pasó al Infantil Puerto Cruz, en el que ya destacaba, a las órdenes de Norberto Castilla, como eje de la defensa. Sebastián –así le llamaría años después Antonio Soriano, uno de sus entrenadores- sería popularmente conocido como Chany y también como Chileno, quien formara en el centro de la zaga y posteriormente como lateral derecho o izquierdo, pues para eso era ambidiestro. Chany, el de Berta, le decían.

Sebastián, Chany o Chileno jugó en el Puerto Cruz y también en el Vera. Pero formó en otros equipos, incluso de aficionados, cuyos últimos campeonatos impulsó, desde fuera, desde la organización, con el entusiasmo característico de su juventud.

Más que un defensor brillante, se trató de un jugador resolutivo. Lo que Fernando Cova, otro entrenador de postín en el fútbol regional, decía: “¡Expeditivo!”. Pero sería autoengañarse si no se reconociera su fama de jugador duro. Soriano, en el Vera, hizo célebre una frase para los restos: "¡Juegue a su aire, Sebastián!", animándole para incorporarse al ataque desde la banda.

Pero en esa piel de rudo había un hombre con temple, puede que no formalmente moderado, pero sí predispuesto para decidir con bonhomía, con espíritu constructivo, con ganas de aportar para resolver, para buscar soluciones. Algunos recordamos su intrépida aparición en el incendio de San Francisco, cuando desde el campanario manejaba las escasas mangueras y los baldes de agua con soltura. En fiestas y celebraciones, allí estaba, siempre activo. Por eso, Sebastián, Chany o Chileño, se dejó querer. Y no fueron pocos quienes le entendieron y trataron de ayudarle en las adversidades de la vida que abundaron y a las que combatió como buenamente pudo.

Ahí salió el emprendedor, el hombre consciente que sabía que las soluciones dependían de él mismo.

Y ahí, en la senectud, consciente de que su pasado juvenil y futbolístico le pertenecía, no se arrugó. Y siguió luchando. Hasta que no pudo más…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

sábado, 21 de mayo de 2022

GRAN NOTICIA: LA OBRA DE VICKI PENFOLD SE QUEDA

El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (21/05/2022) estas notas que tituló; “GRAN NOTICIA: LA OBRA DE VICKI PENFOLD SE QUEDA”: “…Una excelente noticia.

La hija de la artista Vicki Penfold, Lyn, residente durante muchos años en el Puerto de la Cruz, se dispone a formalizar la donación de obras, documentos, libros, fotos y catálogos, al Museo de Arte Contemporáneo Eduardo Westerdahl (MACEW) del Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias (IEHC), culminando las conversaciones mantenidas con dirigentes de esta entidad, especialmente con el director del Museo y vicepresidente de arte del Instituto, Celestino Celso Hernández Sánchez.

De esta forma, será posible conservar una extraordinaria colección artística. La catalogación previa, grosso modo, fue realizada entre el 6 de septiembre del pasado año y el 19 de abril del presente. Durante este tiempo, según consta documentalmente, Hernández Sánchez fue trasladando el total de la donación hasta la sede del IEHC, en la portuense calle Quintana.

Pinturas, dibujos, fotografías, esculturas, grabados, catálogos, carpetas, archivos y libros, en muy buen estado de conservación, formarán parte del rico legado que esta ciudadana polaca, hija adoptiva del Puerto de la Cruz, superviviente en la Segunda Guerra Mundial, deja a dos instituciones locales de gran prestigio.

Cuando falleció, en febrero de 2013, publicamos una entrada que condensaba su creatividad y su proyección artística. Cabe recordar aquel texto:

“Había recorrido medio mundo y no era ajena a las intrigas, a las persecuciones y a las inconsecuencias de los humanos. Hasta que en 1964 se afincó en el Puerto de la Cruz, donde a la sombra de la montaña de Las Arenas, en La Asomada, trabajaba en silencio y con una delicadeza fuera de lo común, apoyada en todo momento por Doris Tamajón, una buena amiga y una eficacísima colaboradora. Nacida en Polonia, alumna del célebre pintor Oscar Kokoschka, le echó valentía a la vida, residió en varios países africanos y cuando retornó a Europa, fue atesorando la sutileza que distinguió su producción artística, la que valió un generalizado reconocimiento de crítica y público. Había ingresado en la Academia Real de Bellas Artes de Londres y la de San Miguel Arcángel de Tenerife la había elegido miembro correspondiente en 1998, año de una inolvidable exposición antológica de su obra. La corporación municipal portuense la hizo Hija Adoptiva en 2004: su trabajo y su trayectoria se veían merecidamente recompensados.

Los ojos y las manos de Vicki Penfold dejaron de hablar en la festividad de Nuestra Señora de Candelaria. Era, por encima de todo,  una excelente observadora. De ahí la finura de su concepción artística, ya en la pintura ya en la escultura: quedó plasmada en lienzos, en bronce, en grabados y cartones donde se reflejaba su interpretación de la realidad. En ocasión de su noventa cumpleaños, subrayamos su dulzura, la dulzura de la miel artística apreciada en cada obra suya, fruto de un tratamiento esmerado que exaltaba la sutileza de su personalidad creadora.

Acompañamos a Vicki Penfold cuando hizo entrega en el hotel Mencey a Su Majestad el Rey de un busto que impresionó a don Juan Carlos. Tuvo el detalle de enseñármelo antes, recién acabado, cuando explicó pacientemente las características del proceso de elaboración. Hablaron en inglés y el monarca le dirigió palabras tan emotivas como cariñosas. La obra era digna de admiración. Debe andar su busto, tan realista, tan certero, en algún lugar distinguido del palacio de La Zarzuela.

Era otra expresión de sutileza de una artista polifacética, capaz de dominar varias técnicas pictóricas y de esculpir con golpes certeros. Por siempre Vicki”.

Su obra, gentilmente donada, ya es patrimonio portuense.

Gracias…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

domingo, 15 de mayo de 2022

AQUELLA VERBENA

En el muro del FACEBOOK del amigo de la Villa de La Orotava JESÚS ROCÍO RAMOS, aparece un magnífico y extraordinario trabajo suyo que comparto con su permiso, adaptado por ÁNGELA PÉREZ ROCÍO, que se titula “AQUELLA VERBENA”: “…Ya en vísperas de las fiestas del Corpus Christi y San Isidro Labrador de La Orotava, me vino a la memoria la primera verbena popular que se hizo a petición de los propietarios de los bares y feriantes en la avenida de José Antonio, hoy de canarias. El escenario para las orquestas lo instalaron en frente del bar tapias, y fue amenizada por las orquestas Orotava, y copacabana, al que mis amigos al saber que yo había sido vocalista de las dos orquestas, y que existía un pique entre ellas, lo compararon como un

España vs Rusia.

Fue una verbena memorable. Desde la tarima de las orquesta era un espectáculo impresionante ver el gran ambiente que reinaba en la verbena y en sus alrededores. Estaba a tope, y de qué manera la gente se divertía, unas bailando y otras paseando en la calle anexa, que en aquel entonces se conocía como la de la calera, hoy la avenida de Emilio Luquez.

a disfrutar de la feria, donde estaban los cochitos, los caballitos, las casetas de tiro, etc, y de los célebres ventorrillos formados con sábanas, el de Ventura, y el de la bailona, y de otros que venían de Tacoronte con unos vinos exquisitos; en cascos

de madera y para que se conservara fresco lo cubrían con helechos de los mencionados ventorrillos salían unos olores a la carne en adobo que te trastornaba y los bares, casa de comidas (restaurantes) de la zona, el tapias, la academia, travieso, segundo sacramento, el rubio en la trasera de del bar fariña, el polvorín, el Almeida, el Fariña, y el Parada, preparaban buenos almaderos y junto a las turroneras, y a la churrería de la esquina de Temístocles, y con al bullicio de la feria les daban un gran ambiente festero a la verbena.

Las verbenas siempre se hacían en la plaza del ayuntamiento, donde se concentraba toda la gente, dejando vacía la zona de los negocios y la feria y atendiendo la petición de los dueños de los bares y feriantes la trasladaron allí. Fue un gran acierto en aquel tiempo. A los vecinos de la calle de la Calera, no les molestaba que montaran allí la feria. La gente acudía a los ventorrillos, donde colgaban los cochinos en canal y creo que para llamar la atención, Ventura colgaba la cabeza de uno con un puro en la boca (sin fijarse en las condiciones sanitarias en que se encontraban)

¿quién no pasó por los ventorrillos a comerse un bistec, una chuleta o aprobar el adobo? ¡coño esa carne sí que estaba rica! Hoy con todos los adelantos y requisitos sanitarios, la carne no sabe a nada ¿no es verdad? Pero eso fue el ayer, que distinto al de hoy. El tiempo ha podido con todo, con la feria, con los ventorrillos, y con las casas de comidas, pero con lo que no ha podido, ni podrá es con el recuerdo…y

Señoras y señores, como lo hacíamos todas las orquestas, con el pasodoble “Islas Canarias” nos despedimos, esperando que lo hayan pasado bien, y deseando que pasen unas felices fiestas.

El video que les muestro corresponde a la orquesta actual Orotava, y su gran vocalista Máximo…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

sábado, 14 de mayo de 2022

TALENTO Y CREATIVIDAD EN LAS VI JORNADAS CERVANTINAS


 

El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (14/05/2022) estas notas que tituló; “TALENTO Y CREATIVIDAD EN LAS VI JORNADAS CERVANTINAS”: “…Broche de lujo a la sexta edición de las Jornadas Cervantinas Villa de La Orotava, una convocatoria que, promovida por la asociación cultural Alisios, cualifica la siempre atractiva oferta cultural del municipio y lleva camino de consolidarse como uno de los acontecimientos singulares de Canarias.

Esta tarde-noche, en efecto, en el recinto de San Agustín, se pone el colofón a ese recorrido que Miguel de Cervantes, don Quijote y la música de su época han hecho por destacados emplazamientos de la localidad: desde el salón noble del Ayuntamiento al auditorio Teobaldo Power, pasando por el Museo Iberoamericano de Artesanía y la iglesia de La Concepción para concluir, como decimos, en San Agustín. Todo ello, con el patrocinio del Ayuntamiento, del Cabildo Insular y de la empresa Canaragua.

Con un cartel de lujo: una conferencia del director de la Cátedra Cultural Padre Anchieta, Fremiot Hernández, en la que disertará sobre los primeros textos en español escritos por el jesuita y santo canario, José de Anchieta, cuya obra es muy conocida, si bien es cierto que queda mucho por investigar. “Nadie mejor que Fremiot para desvelarlo”, dicen fuentes de asociación organizadora.

Además de la conferencia, la Camerata Lacunensis ofrecerá un concierto con la música que se escuchaba durante los imperios de Carlos I y Felipe II. Los instrumentos como el laúd renacentista y la vihuela harán sonar las piezas de músicos españoles y franco-flamencos.

Desde mediados de abril, las Jornadas Cervantinas han sabido atraer a diferentes públicos a sus actividades pensadas para abordar disciplinas variadas como la literaria, la música y el campo matemático.

Así, las letras, muy patentes, han seguido acercándose a los adolescentes con el Taller de escritura a cargo del director de Teatrejo, Manolo García. La tinta de estas jóvenes plumas seguro marcarán en un futuro la literatura en Canarias.

La obra ilustre de El Quijote fue desmenuzada por el escritor Sergio Barreto, en una conferencia inaugural que dejó a todos atónitos ante el gran saber del poeta sobre la obra de Cervantes. Barreto mostró a los presentes pasajes claves, frases determinantes en la trama de El Quijote y su relación con la posverdad.

Y es que la asociación cultural Alisios gusta en su organización de cuidar los temas tratados, el contenido de cada actividad y la incorporación de novedades que sorprenden cada año. En esta edición quisieron mostrar las matemáticas a través de El Quijote, para lo cual contaron con el experto y profesor Luis Balbuena. Una clase magistral donde los números cobraron vida a través de la pluma cervantina.

Esta edición, no obstante, no solo ha sido de actividades sino de nombres. La Premio Canarias de Patrimonio Histórico 2021, Rosario Álvarez Martínez; la reciente galardonada Premio Canarias de La Literatura, Elsa López; y la Coordinadora El Rincón, asociación que ha defendido la conservación del patrimonio paisajístico del Valle, han sido homenajeadas en diferentes actos desarrollados en las Jornadas. Todo un lujo cada uno de ellos, al estar arropados los protagonistas por un público en el que han dejado huella con sus conocimientos, sus palabras y sus proyectos.

Grande ha sido el acercamiento al nacimiento del folclore en Canarias. Sobre el escenario, pocas veces se ha reunido tanto talento del Archipiélago: Víctor Batista Velázquez, Fabiola Socas, Héctor González, Félix Ramón Morales, Sara Miranda, David Duque, Josele del Pino y Chema Estévez.

Un espectáculo literario con romances de la época de Cervantes e instrumentos como la guitarra barroca, la tiorba o la zanfona sonaron en el Auditorio Teobaldo Power. Una experiencia única que, probablemente, gustaría repetir.

Este sábado La Orotava despide a Cervantes, pero hay que confiar en que se volverán a abrir las hojas de sus obras, imaginar las características de la época, respirar y sentirla por medio de una programación tan sugerente y atractiva como seguro que programarán en las séptimas Jornadas Cervantinas Villa de La Orotava del próximo año.

En este, éxito de público y crítica. Un reconocimiento al talento y la creatividad…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

viernes, 13 de mayo de 2022

MARUCHI

María Victoria Paz Hernández García que conocíamos por “MARUCHI”, nació en la Villa de La Orotava en el año 1938 y falleció en la misma Villa el  13 de Mayo del 2022.

Triste noticia que me llega, del fallecimiento de una amiga, hermana y vecina de la calle el Calvario de la Villa de la Orotava.

De la pandilla de mi hermana Carmilla, jugaban en la plaza de Franchi Alfaro, participaban en las procesiones infantiles que organizaba su hermano Máximo, se criaron juntas y siguieron siendo amigas a por vida.

Trabajó varios años en la desaparecida tienda de calzado “MAJA” (posterior exposición de muebles Isaac Valencia Pérez, aun se conserva el escaparate), con Lourdes Méndez en la calle Tomás Zerolo – Agua de la Villa, ayudándole en tiempos extras a su familia en la tienda bazar de la calle El Calvario.

Contrajo matrimonio con el orotavense José Antonio Martin ex funcionario de la firma comercial Miguel Herreros y del Banco Hispano Americano, con el que tuvo 3 hijos; Toño, Carlos y Juan Lorenzo Martin Hernández y cinco nietos; Laura, Raquel, Eduardo, Elena y Adrian.

Excelente y bondadosa persona perteneciente a una larga y conocida familia orotavense que se le conocían por los “Castros”.

Sus padres; Lorenzo Hernández Castro (Impresor – músico) y Dolores García (ama de casa), tuvieron once hijos: Lorenzo, Nieves, Rafael, Angelita, Nazario (Chile), Aureliano, Dolores, Máximo, María Victoria Paz (Maruchi), Francisco y Candelarita.

Todos ellos convivieron con nosotros en la villera calle El Calvario, puesto que nuestras casas estaban situadas frente a frente, balcón a ventanas, ventanas a balcón. Siendo la comunicación muy familiar y sobretodo entrañable con afecto.

Maruchi descansa como se te merece en el paraíso eterno colmado de esperanza, fe y misericordia.

Un abrazo, amiga, hermana y vecina desde mi infancia.

Hasta siempre.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL

 

jueves, 12 de mayo de 2022

EL SILBATO DEL MERITORIO Y DISTÉFANO


El amigo del Puerto de la Cruz; SALVADOR GARCÍA LLANOS remitió entonces (12/05/2022) estas notas que tituló; “EL SILBATO DEL MERITORIO Y DISTÉFANO”: “…Manuel Martín Ramos, a quien muchos llamábamos Emeterio, y casi todos le decíamos Tete, fallecido ayer en el Puerto de la Cruz, jamás imaginó que algún día arbitraría al mismísimo Alfredo DiStéfano.

Hasta que llegó el día, claro. Fue en El Peñón, aún con cancha de tierra, a mediados de los años setenta del pasado siglo. Allí no cabía un alma más en aquella fecha en la que rindieron tributo a Segismundo Tito Del Pino Real, aquel genio que no quiso traspasar las fronteras del fútbol regional pese a que reunía cualidades sobradas para jugar en categoría superior.

Para despedirle, trajeron, ni más ni menos, que a los Veteranos del Real Madrid, un seleccionado en el que militaban Marquitos, Vidal y otros afamados jugadores de épocas anteriores. Se enfrentaron a la Peña Celti, un equipo de aficionados y también viejas glorias, que así se denominaba entonces cuando reaparecían en las canchas. Sería injusto no consignar que Fernando Díaz, propietario del hotel Marquesa, y el inolvidable Gilberto Hernández, se encargaron de la organización y la logística. Sin embargo, se olvidaron de solicitar el arbitraje oficial. Claro, hubo que improvisar hubo que improvisar -a escasos minutos del comienzo y con el recinto abarrotado- una solución con árbitros locales (Martín Ramos y Rodríguez Perdomo) que alternaron las bandas y el tiempo. Con el primero de ellos, después de señalar un fuera de juego y con los senior madridistas en plena reclamación, se encaró el gran Alfredo DiStéfano. Le quitó el silbato a Martín Ramos y se lo dio al compañero. La ‘Saeta Rubia’, muchos años después también inmortalizado como tal en el himno del Rea, desconocía cómo le apodaban (¿quién en el Puerto no tiene nombrete?) pero soltó una de las suyas:

-Déjale no sabe más. Mira que es animal.

Cuando terminó el choque y le advirtieron el mote del árbitro, DiStéfano dijo con aquel laconismo que le caracterizaba:

-Lo siento, no lo sabía.

El encuentro, para deleite de los espectadores, acabó igualado (3-3). Martín Ramos pasó a oficiar de linier. O de línea, que así se les denominaba entonces. DiStéfano anotó el primer gol, un increíble remate, casi de espuela, en la portería del naciente. Los aplausos duraron. Aquel era el sello de un futbolista que, cruzado el ecuador de los cincuenta, conservaba las esencias técnicas. Era el jugador que había cambiado la historia del fútbol y del Real Madrid. Dejó un lance de la leyenda en la vieja cazuela portuense. Al día siguiente el vespertino La Tarde publicó en primera página una gran foto suya junto al otro protagonista, Del Pino, con el título ‘Los dos maestros’.

Pero es de Tete de quien queremos escribir unas líneas y recordar aquel lance. Era una especie de árbitro fijo, es decir, cuando se disputaban encuentros de distintas categorías, oficiales, amistosos o de aficionados, aparecía él, con su modesta vestimenta negra que portaba en una pequeña maleta de madera. Él siempre estaba allí, en El Peñón. La gente memorizó el que fue un célebre trío arbitral: Tito (en referencia a Norberto Castilla Yanes), Tano (nombre con el que se conocía a Cayetano Rodríguez) y Tete, el inefable meritorio. El trío de las ‘tes’.

Con una sonrisa ladeada y socarrona, hacía abstracción de los insultos e improperios que, a menudo, se ganaba a pulso. Solía solventar los lances dudosos elevando un dedo de la mano izquierda. En cierta ocasión, presumió de haberse inventado una sanción: señaló penalti tras una plancha de un jugador visitante en el área. Le recriminaron desde la grada que ese lance jamás se sancionaba con la pena máxima. Y él dijo:

-Pues a partir de ahora, sí se pita.

Muchos no pudieron contener las risas. El caso es que un equipo infantil de la localidad ganó gracias a esa decisión.

Era auxiliar de mecánica en una conocida empresa de transportes. Y durante años, colaboró en el cementerio, como si se tratara del sepulturero.

Una persona muy servicial. Será recordado siempre…”

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL