martes, 9 de enero de 2018

EL CUADRO ARTÍSTICO INFANTIL DE DON GUSTAVO DORTA HERNÁNDEZ



Fotografía correspondiente a los entonces pequeños actores en uno de los descanso de la comedia infantil en el escenario del desaparecido Teatro Cine Atlante de la Villa de la Orotava.
En la fila de pie de izquierda a derecha; J. Augusto Hernández, Paco Morales Rodríguez, Tomás Muñoz Quintero, Juan Felipe Hernández González), Ezequiel León Domínguez, Alberto Hernández, e Isabelino Martín Pérez.
Sentado por el mismo orden; Chito León Domínguez, Pedrito Hernández Álvarez, Fefita Díaz y Carmen Rosa Trujillo.

La desaparecida revista semanal de La Orotava "Canarias" correspondiente al treinta de abril de 1955, en la página  informativa local ágora la celebración del día del párroco y de la parroquia de La Concepción, en un festival que se celebró en el mudéjar coliseo "Teatro Cine Atlante" de La Orotava, reapareciendo en la misma velada la Agrupación Infantil del inmemorial maestro Don Gustavo Dorta Hernández. Don Gustavo era un hombre apasionado por el folklore, la música popular y el deporte. Retirado como futbolista, práctica que ejerció durante tres décadas, considerada prodigiosa en La Orotava por los amantes del balompié. Destacaba por su talento con el balón, que dominaba a la perfección. Cuando colgó sus gloriosas botas, dedicó íntegramente su vigor a la música, y al trabajo con los chaveas de la Villa. Así empezó afanar al principio de los cincuenta con los adolescentes en la Orotava, creando un cuadro infantil artístico que cosechó innumerable éxitos a lo largo y ancho de la geografía insular. Volviendo a la crónica del desaparecido semanario observamos que la infantil rondalla se presenta con un grupo de niños, que forman una coral musical denominado "Coro de monaguillos" integrado por; Pedro Hernández, Alberto Hernández, Ángel García, José García, Vicente Leis, Francisco Javier Sánchez, Segismundo Rodríguez, Felipe González, Ramón Hernández Fariña, y Agustín Llarena. Interviniendo en un simpático repertorio musical en el intermedio del festival, retornando a la finalización del mismo  con unos números de Música y Canto. El "Canarias" del siete de Mayo de 1955: Ante numerosa concurrencia se celebró en el teatro Cine Atlante de esta Villa, un acto de exaltación al Párroco y a la parroquia de La Concepción. Viese rodeado de un ambiente de profundo sentido cristiano, patentizado en el aspecto que presentaba el salón de espectáculos de nuestro coliseo, completamente lleno de público, hasta el extremo de haber numerosas personas en pie situadas en los pasillos. Ocupaban lugar preferente los párrocos de la población, sacerdotes y Hermanas de congregaciones religiosas, autoridades locales y directivas de Acción Católica. El escenario lucía una artística decoración con motivos florales y en su fondo se destacaba una pintura del templo de Nuestra Señora de la Concepción, joya de estilo barroco declarada monumento Nacional. En la velada intervinieron, Don Jesús Hernández Acosta en representación de los entonces jóvenes de la Acción Católica, seguido de la Señora Viz-condesa de Buen Paso vocal de religión de mujeres de Acción Católica. Actuando en el intermedio el "Coro de Monaguillos", resumiendo el acto el entonces director del Colegio de Enseñanza superior reconocido "Santo Tomás de Aquino" Don José Estévez Méndez pronunciando una fastuosa alocución interrumpido en varias de sus partes por las ovaciones de los espectadores. Fue todo él, una lección significativa de lo que para los cristianos es la parroquia y el párroco. Inmediatamente en una gran salva de ovaciones premio a esta  gran disertación del erudito ex-director del Colegio Santo Tomás de Aquino, interpretó números de música y canto la Agrupación Infantil que dirigía Don Gustavo Dorta Hernández, siendo objeto de prolongados aplausos. Finalmente pasó al escenario el entonces párroco de la Concepción, Don Juan Reyes Pérez de inolvidables recuerdos para los villeros, y recibir un pergamino, con sentida dedicatoria sobre un dibujo alegórico del recordado retratista y alfombrista Don Pedro Hernández Méndez, ofrecido por los niños de la Acción Católica de La Orotava. Nuevamente el semanario "Canarias", en la edición del 13 de Agosto de 1.955: A mediados del próximo septiembre se celebrará, en el Teatro Atlante de esta Villa, un evocador espectáculo, a cargo del "Cuadro Infantil de Arte", que dirige Don Gustavo Dorta Hernández. Se representará la conocida caricatura lírica local "Cosas del Pueblo", letra de Don Felipe Casanova Machado, música del inolvidable maestro Calamita y Manteca, representación que casi revestirá carácter de estreno, toda vez que el Sr. Casanova ha introducido numerosas reformas en la obra y aún añadido algunas escenas. La acción se enmarcará en un nuevo decorado a tono con la estatura de los "actores" y se hará gala de un brillante vestuario. Los ensayos prosiguen activamente, y también se nos asegura que los pequeños artistas de uno y otro sexo, todos de diez años o menos de edad -el gran Pedrito, que incorpora al marrullero "Fructífero", solo cuenta ocho-. En la edición del veinte de Agosto de 1.955 expone: Esta simpática agrupación, continúa con gran entusiasmo los ensayos de la caricatura lírica local "Cosas del Pueblo" libro (bastante reformado). El reestreno de dicha obra se efectuará en el "Teatro Atlante", de esta Villa, mediado el próximo mes de Septiembre, en una función que promete ser un verdadero acontecimiento. Ya se trabaja en el nuevo decorado, y están dispuestos los muebles y demás objetos que se han de utilizar en la representación, todo con arreglo a la estatura de los "pequeños grandes actores". Concretamos a consignar que el famoso Pedrito Hernández, en el extenso -y ahora mas- papel de "Fructífero", y el graciosísimo Albertito Hernández, en los -tan dispares- de "Robustiano", el ventero, y "Miguel Perdomo", el estrambótico poeta, desempeñan su cometido con mucho salero, especialmente en la jocosa escena de "El Mirlo", que sacan a la perfección. El veinte y cuatro de septiembre del mismo año el semanario publicaba sobre el cuadro infantil: Esta simpática agrupación que, dirige su creador, nuestro estimado amigo, don Gustavo, continua incansablemente y dentro del mayor enardecimiento los ensayos de la caricatura lírica local "Cosas del Pueblo", original de Don Felipe Casanova Machado. Persona entendida que ha asistido a dichos ensayos, encomian calurosamente la labor de los pequeños actores, quienes parece increíble que hayan podido superar las serias dificultades que, por su acentuado matiz caricaturesco, ofrece el libreto; y, en efecto, parece mentira que una obra lírica, relativamente extensa pueda ser dominada por este conjunto infantil, cuyos integrantes son todos menores de doce años de edad, y los hay hasta de ocho y siete. En días pasados ingresaron en el "Cuadro”, seis niños más, a fin de completar "Los Estudiantes", que ahora acompañarán a "Las Caladoras" en la interpretación -deliciosa interpretación- del bonito vals tan popularizado, y se ha reincorporado a aquel su antiguo componente, el graciosísimo Vicentito Leis, recién venido de la Península, quien se ha hecho cargo del importante papel de "Ildefonso", el enredador concejal, y, a no dudarlo, conocidas las dotes artísticas que distingue a Vicentito, lo desempeñara con entero lucimiento. El decorado -un espléndido motivo de Valle de La Orotava- es trabajo del joven artista Don Agustín Ruiz Domínguez, y la orquesta será dirigida por el notable compositor, Sr. Ortí, que en la actualidad reside en el vecino Puerto de la Cruz, y que es quien ha instrumentado los preciosos números que se cantarán en el sugestivo fin de fiesta, los cuales están ya perfectamente ensayado. El reestreno de "Cosas del Pueblo" se efectuará, en nuestro "Teatro Atlante" a último de octubre actual, y, a decir verdad, la conocida obra pudiera llevarse a la escena desde hoy, pero los Sres. Casanova y Dorta ha preferido esperar un poco más, para  que la representación -en la que intervendrán sesenta niños y niñas, rondalla típica infantil y cuerpo de baile- resulte con la perfección deseada, dentro de los naturales números. El inminente acontecimiento teatral ha producido gran expectación en esta villa, y ya se han recibido proposiciones de las más importantes localidades de Tenerife para llevar a ellas el singular y brillante espectáculo, proposiciones que son materia de detenido estudio. El semanario correspondiente al doce de Noviembre de 1.955 decía: En breve, y con el fin de allegar fondos para obsequiar con juguetes a los niños pobres en la próxima festividad de Reyes, se celebrará en el Teatro Atlante de esta Villa, el reestreno de la caricatura lírica local, en dos semiactos y en prosa: COSAS DEL PUEBLO. Reparto: Ramona, Fefa Díaz; María, Carmen Rosa Trujillo; Cantadora, Carmita Trujillo; Fructífero, Pedrito Hernández; Mister Pique, Paquito Morales; El Alcalde, Agustín Llarena; El General, Francisco Sánchez; El Juez, Juan Felipe Hernández; Robustiano, y Miguel Perdomo, Alberto Hernández; Idelfonso, Vicentito Leis; El Cojo, Paquito Rodríguez; El Inspector, Isabelino Martín; Un Chico, Antonio Polo; Un Campesino, Efrén Sacramento; Un Borracho, José Antonio; Los Acuáticos, Joselito Castro, Inocencio León, y F. Rodríguez; Los Guardias, Miguel Muñoz, Augusto Hernández, Paco Herreros y Tomás Muñoz; Pescadoras y Caladoras, Coro Femenino; Venteros y Estudiantes, Coro Masculino; Hombres y Mujeres del Pueblo, Coro General; Rondalla típica infantil. Decoración de Agustín Ruiz Domínguez. Director de orquesta, maestro Ortí. Los directores han decidido que determinados papeles sean estudiados simultáneamente por distintos niños, con el fin de tener resuelta de antemano cualquier forzosa sustitución, y también para ofrecer a todos las mismas posibilidades de lucimiento personal. La obra se representará sin concha, motivo por el cual los ensayos se efectúan detenida y cuidadosamente. Ya en el "Canarias" correspondiente al 19 de noviembre de 1.955, se anunciaba definitivamente la señalización del debut del cuadro infantil de arte para el 14 del mes de Diciembre del mismo año, miércoles, para el reestreno, en el Teatro Atlante de esta Villa de la caricatura lírica local "Cosas del pueblo", a cargo del Cuadro Infantil de Arte, que dirige el incondicional Don Gustavo Dorta Hernández. La decoración es obra del joven artista Don Agustín Ruiz Domínguez; actuará de maestro concertador y pianista, Don Enrique Ortí y dirigirá la orquesta Don Francisco Dorta Hernández. En el semanario "Canarias" del treinta y uno de diciembre de 1.955, se expresaba, el éxito deslumbrador del ""Cuadro Infantil de Arte, en el que protagonizaron un fin de fiestas los entonces niños; Carmita Trujillo y Pedrito Hernández, que el público premió con colosal ovaciones. La función constituyó un auténtico y rotundo triunfo, artístico y de público, habiéndose quedado sin poder conseguir localidades varios centenares de personas, tanto de esta villa como de las poblaciones cercanas. Se estrenó una preciosa decoración -vista parcial de La Orotava con el Teide al fondo- del entonces referido joven artista Don Agustín Ruiz Domínguez, unánimemente elogiada, y dirigió la orquesta, con su pericia característica, el maestro Don Enrique Ortí. Verdadero asombro produjo la labor de los entonces pequeños artífices, unos cincuenta, a algunos de los cuales, sin la mínima exageración y pese a su reducida estatura, calificaron de "artistas". La obra se presentó sin apuntador, lo que caracterizó más el mérito de los chiquillos. La crónica decía, que el "gran Pedrito", de ocho años de edad, bordó el extenso papel de Fructífero, el taimado tabernero protagonista de la caricatura, desenvolviéndose sin un solo fallo, y "viviendo" realmente el personaje. La famosa escena de "El Mirlo", con el graciosísimo Albertito Hernández. Levantó una atronadora ovación, que ambos salieron a agradecer después del mutis. El público reclamó la presencia de Paquito, el Cojo Trovador, y la del original Chito León, que con su comicidad insuperable, hizo las delicias del auditorio. Y, por el estilo, todos los demás. Fefa Díaz y Carmen Rosa Trujillo, en los papeles de Ramona y María, respectivamente, y Carmita Trujillo, cantando la Isa. Isabelino Martín, Augusto Hernández, Alcalde, General y Juez, por su orden. Paquito Morales, en el falso Mr. Pique, Antonio Hernández de Inspector; Antonio Polo (Ñete), en el Chico, y Juan Antonio Mora, chistosísimo Guardia. Las Pescadoras muy desenfadadas; Las Caladoras y los Estudiantes, primorosamente vestidos; Los venteros, Los "Acuáticos" y la Rondalla típica infantil, cumplieron muy bien su cometido y lucieron una perfecta caracterización. Para satisfacción de los interesados el "Canarias", publicó algunos nombres, rogando que le dispensen las involuntarias omisiones, porque desconocían los de los restantes intérpretes. Mariana y Fuensanta Hernández, Juanita Coronado, Candelaria Díaz, María Mercedes Pérez, Magdalena Rodríguez, Carmen Lola Galloway, Lala, Mercedes y Celita Domínguez. Chacho Zarate, Paquito Miranda, Agustín Llarena, Tomás y Miguel Muñoz, Joseito Castro, Domingo Domínguez, Ramón H. Fariña, Pepito García, Domingo Hernández, José Manuel Hernández, José García Edodey y Tito Galloway. La prensa local felicitaba calurosamente al director del "Cuadro", Don Gustavo Dorta Hernández; el autor del libro, Don Felipe Casanova Machado; al pintor escenógrafo, Sr. Ruiz Domínguez; al maestro, Don Enrique Ortí, a todos los entonces niños y niñas integrantes de aquél, y a cuantas personas contribuyeron con su cooperación al mayor lucimiento del espectáculo, cuya celebración parecía ilusoria y al fin ha sido realidad. Extraordinaria realidad. En el "Canarias" del siete de Enero de 1.956, un colaborador critico local que firmaba con el seudónimo de "Araútapala", escribía sobre el mencionado "Cuadro". Dando por título -lo que precisan los artistas principiantes y remedios para corregir errores sin recurrir a maestros profesionales-. El mencionado escritor seudónimo, decía en el semanario: En las tres veces que el cuadro de Arte de esta Villa ha actuado en las salas de algunas sociedades, se ha observado un sinfín de cosas que el público, eso creemos, no pasan desapercibidas y en cambio a los organizadores de dichos espectáculos parece que no paran a mirar si está bien o mal lo que hacen estos artistas sobre las tablas. Eluden toda responsabilidad con la consabida frase: "Son principiantes, apenas si han ensayado y por lo tanto no se le puede exigir más". No, no es esa la forma de orientación. Deben darse cuenta que si el publico a lo primero es benevolente, en otras representaciones tiene que exigir más, pues ya la frase anterior estará, como se dice vulgarmente, gastada. El espectáculo siempre debe ir a más y por lo tanto es necesario, desde el principio hasta el fin, corregir y corregir. Dar poco a poco y con el tiempo, más colorido, formar parejas ya sea de baile, cómicas o líricas y no acudir con la misma rutina de siempre. Este Cuadro de Fiesta en el Aire, feliz iniciativa de unos cuantos aficionados, se ha ido apagando y parece que está en tras de desaparecer como tantos otros anteriores. Dios quiera nos equivoquemos. Solamente con colaboración puede sacarse adelante para poder pasear nuestro arte por todos los pueblos de la isla. Colaboración entre las sociedades, comercios, en fin todo: en general. Las sociedades, cines, y demás con sus salones y los comercios con obsequios y patrocinación de los espectáculos. Esperemos los resultados. Y ahora, si me es dado el hacerlo, daré un consejo unos consejos a los artistas y cantantes. Unas explicaciones sencillas para que sea más aplaudida su actuación. Al salir al escenario no se deben quedar rígidos ante el micro, antes bien, deben saludar con sencillez al público y más si este aplaude. Luego al comenzar la orquesta la introducción, no deben cogerse, no pegarse con nerviosismo al micro, sino ser indiferente a él. Esta es una de las cuestiones que más ha de tener en cuenta. No se debe ser esclavo del micrófono, hay que andar con soltura, cantar, cuando convenga, apartado de él. En las introducciones y en los solos de orquestas, las señoritas, si lo que cantan son piezas modernas, deben dar pases de baile, pero sin exagerar mucho, Mientras cantan deben accionar, también sin excederse, según el ritmo clase o estilo de la canción. En los sostenidos deben darle vibración a la vez y no dejar que se extinga sin gracia. Los caballeros deberán también accionar pero sin tanta teatralidad como las señoritas. En los solos de orquesta o introducciones deberán dar unos pasos no de baile, más bien como si estuvieran abstraídos, como pensando en la canción. Su expresión puede ser triste o alegre según se los pida la canción. Creemos que con esto ya pueden desenvolverse en las tablas. Don Gustavo Dorta Hernández, a pesar de las críticas de los más enterados, mereció, y aun merece los mejores elogios de un pueblo que siempre ha sido homónimo como dice el título del libreto popular "Las Cosas del Pueblo". Don Gustavo y sus colaboradores trabajaron en beneficio de aquella infancia y juventud, aunque le salieran mal las cosas, siempre enseñó el folklore con entusiasmo a muchas gentes de la Villa. "Arautápala", lo mejor que pudo apostar, era su colaboración directa tal como lo expone en la prensa, pues el cuadro estaba compuesto de niños de una edad media de ocho añitos, claro está que lo expresado en el semanario del catorce de Enero de 1.956, es una lección que merecía ensayarla directamente con los protagonistas: Una de las principales características de los tríos vocales es la afinidad de voces. Debe buscarse una compenetración tal, que parezca un solo sonido pero tres modulaciones distintas. Para ello deben buscarse tres voces diferentes, pues si son iguales, al cantar pueden caer en dos faltas: 1º tendrán que esforzarse dos de ellos para hacer voces que no son las suyas, con el siguiente desbarajuste, pues una vez o dos puede salir bien, pero no siempre, porque a una garganta no se le puede forzar; y 2º de que al ser "trío" sería "mono"(sea perdonada esta expresión humorística). De manera que siempre hay que tener en cuenta: las tres voces deben oírse por igual, siempre afines, pero sin caer nunca en una sola voz. Los tríos, más que los vocalistas y cantantes, deben darle mucho sentimiento a la canción, cuando esta no es alegre y si lo es, darle mucha alegría, pero sin caer nunca en la comicidad, animándola con los instrumentos que toquen, pero sin dejar nunca que estos apaguen las voces. Las parejas cómicas pueden formarse, no solo con una señorita y un caballero, sino también entre dos del mismo sexo. Las mismas pueden representar sainetes cómicos, chistes, no solo contados sino también representados. Deben ser cómicos, pero nunca caer en la payasada obscena. El vestuario es casi siempre imprescindible para los dúos mixtos, pero no así siempre para los del mismo sexo, que darían una nota más de elegancia actuando con un frac sencillo, pero no por esto deberán dejar de dar comicidad a sus actuaciones. Nunca se debe dar señales de risa, ante bien, dar naturalidad a lo que representan, como si para ellos fuese real. Nunca se debe caer en la exageración. Todo artista debe tener presentes estos: La imitación trae consigo la degradación en el terreno en que actúa. Cada cual debe crearse su estilo propio, no dejando que este sea pisado por otro. Cualquier duda que se tenga sobre esto, puede ser consultada a este semanario que siempre tendrá buena acogida. Basta solo dirigirla a mi nombre. "Arautápala", deseaba enseñar y contribuir, pero debió de hacerlo inmediato, -no postrimero-, porque los artistas eran niños ilustres de la Villa de la década de los cincuenta, y los organizadores deseaban acontecer al pueblo espectáculos  culturales, pues en aquella época, la televisión, y los vídeos eran los grandes desertores. 
La caricatura lírica local "Cosas del Pueblo", en dos semiactos, se estrenó en el Teatro de La Orotava el 15 de marzo de 1919, reformándose el libreto en julio de 1954. Este sainete orotavense tuvo muchísimo éxitos en la ciudad de Icod de Los Vinos, siempre que hacía su presencia en la ciudad del Drago era acogida con vehemencia por su vecindad. La última vez que se presentó fue en Granadilla año 1982. Propuesta y organizada por un hijo de La Orotava Don Antonio Ordóñez Álvarez (Perito Agrícola), por entonces residente en la citada ciudad sureña, en la que ocupaba la presidencia de su laureado Casino.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

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