43 AÑOS DESPUES…….

En estos días caluroso, pasándose el límite de lo imposible por no respetar el medio natural, realicé un viaje familiar con mi señora Antonia María González de Chaves y Díaz mis hijos y nietos, por una parte de Andalucía, concretamente; Sevilla, Cádiz y Huelva.

En esta ultima visité la ciudad de Minas de Riotinto, que los ingleses explotaron sus minas de hierro durante decadas, en donde tuve mi primer destino como docente funcionario después de aprobar las oposiciones por libre en Madrid.

De eso hace 43 años, que me incorporé en la cátedra de TECNOLOGÍA ADMINISTRATIVA en el entonces Instituto de Formación Profesional Minas de Riotinto, actualmente IES Cuenca Minera.

Ahí me desplacé entonces con mi señora y mi hijo mayor que tenía dos años. Nos hospedamos primero en una fonda en Nerva hasta encontrar una vivienda en una Aldea conocida por Las Delgadas y después en el segundo trimestre del curso escolar una casa en Nerva.

Toda una comunidad minera, donde su personal trabajaba en las minas y se especializaban profesionalmente para ello.

Estando ahí me encontré con el golpe de Estado del 23F, del señor Tejero.

Después de terminar mis cursos como docente, a través de un traslado oficial regresé a mi Villa de La Orotava, al Barrio de San Antonio, donde realicé mi docencia hasta la jubilación.

Esta vez visité el viejo centro docente que ante había sido regentado por los jesuitas, hasta que pasó en propiedad al Ministerio de Educación.

Me informaron que el entonces director y compañero que conocí por Luis había fallecido, así como el que ocupaba entonces la jefatura de estudio Manolo Narmona.

El centro a lo largo de los años ha sido modificado, desaparecieron las aulas de la parte baja y se fabricaron nuevos pabellones en la parte de arriba.

La ciudad de Riotinto también la encontré cambiada, con un magnifico museo dedicado a las minas.

Siendo la empresa explotadora una sociedad anónima laboral desde los años noventa del siglo XX, siguiendo su proceso de explotación del mineral actualmente a un ritmo más moderado.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL