sábado, 4 de noviembre de 2017

DON MAXIMINO ÁLVAREZ ARBELO EN EL RECUERDO



Aniversario de su fallecimiento. Nació en la Villa de La Orotava el día 30 de junio del año 1918, vivió toda su vida en la calle El Calvario, primero en su parte baja a la derecha y después en la alta a la izquierda hasta que contrajo matrimonio con la santacrucera doña Amparo Padrón Campo el día 17 de Diciembre de 1953, entonces viuda de don Tomás Méndez Dorta, se fue a vivir a la calle de San Agustín hasta su muerte acaecida el día 5 de noviembre del 2008 a los 90 años de edad, en la Mansión que fue la residencia del Marque de la Quinta Roja don Diego Ponte del Castillo.
Fue miembro de la comisión de fiesta de la Villa de La Orotava, donde destacó en la organización de aquellas verbenas populares en la Plaza del Ayuntamiento, en la que se elegía la Reina de Las Fiestas Mayores de la Villa por votación popular. Socio de Honor de la desaparecida Murga Los Chiringuitos, con  la que colaboró muchos años. Estudió en el Colegio de San Isidro de La Villa de La Orotava con Los Hermanos de Las Escuelas Cristianas de la Salle, y magisterio en la Escuela Normal de La Laguna.
Trabajó en la planta eléctrica y en la casa Sindical de  la Orotava, fundó conjuntamente con su hermano Fernando el recordado Colegio de San Fernando en la Calle de San Francisco, donde daba sus clases por las noches a los trabajadores de la Villa y de pueblos vecinos.
Marchó al frente peninsular en el año 1937, a la vuelta vino con problemas de salud, perdiendo un pulmón. Fue hermano mayor de la Hermandad del Cristo de la Humildad y Paciencia del Templo de San Agustín, del antiguo convento agustino de Gracia. Colaborando desinteresadamente y altruistamente  con la decoración y puesta en marcha de dicha imagen que se posesiona el miércoles Santo en la Villa de La Orotava.
Del matrimonio tuvo cuatros hijos;  grandes amigos míos; Maximino, Orlando, Juan de Dios y Amparo. Lo recuerdo ver vestido de mascara en los carnavales prohibidos, con su pareja don Norberto Morales, ambos fueron al palacio episcopal de la Laguna, a pedirle al santo obispo de Tenerife don Domingo Pérez Cáceres que  permitiera sacar los carnavales a las calles de los pueblos tinerfeños. También visitaban al gobernador Ballestero para pedirle lo mismo. Por  lo que el pueblo de Tenerife, está en deuda con ellos, ya que fueron los que dieron la cara a las autoridades de turno.
Don Maximino Álvarez Arbelo fue concejal del excelentísimo ayuntamiento de la Villa de La Orotava siendo alcalde don Juan Cúllen y Lugo, y regentó los jardines del marquesado de la Quinta Roja, entonces propiedad de su señora esposa doña Amparo Padrón Campo. Recuerdo verlo, pegando las letras de las cintas de las coronas lúgubres que se realizaban en el citado jardín, en unos de los salones del patio de su casa en la calle de San Agustín.
Sus padres fueron; Don Maximino Álvarez (trabajó en el observatorio meteorológico de Izaña y tenía un automóvil en la parada) y Doña Soledad Arbelo, un matrimonio que traté desde mi infancia en la calle El Calvario de la Villa, así como a sus hermanos; Josefina, Leida y Fernando (que fue mi profesor de ingreso, primero y segundo de bachillerato en su colegio en la Calle de San Francisco), todos fallecidos.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

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