RUBÉN

 

Otra triste noticia que me remite mi amigo desde la infancia Agrícola González Álvarez “Ica”, Licenciado en Biología y Farmacia por La Universidad de la Laguna, de profesión analista.

El fallecimiento de su primo y también amigo desde mi infancia Rubén Juan Luis Hernández, nacido en la Villa de La Orotava en el año 1944 y fallecido en la misma Villa el 05 de Febrero del 2024.

Era el tercero de cuatro hermanos (José Antonio, Miguel, Rubén y Candelaria), del matrimonio orotavense Antonio Luis de Vera (funcionario-director de la Caja General de Ahorros Monte Piedad-Cajacanaria de La Villa de La Orotava) y María Luisa Hernández Falcón (ama de casa).

Estudió Bachillerato Elemental en el colegio de San Isidro, y Perito Mercantil en La Escuela de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, además de clases particulares en preparación para oposiciones a la banca, bajo mi docencia en la azotea de mi casa, que mis alumnos bautizaron por la cátedra del Gallinero.

Rubén un muchacho de a pie muy cariñoso, de un comportamiento ejemplar con sus amigos, tenía un manejo sobresaliente e ilustrado de la fotografía en el blanco y negro, la que ejerció desde muy joven particularmente en su domicilio de la calle Calvario, en el que poseía un pequeño estudio artesanal para relevo y demás.

Además de sus aficiones por la fotografía ilustrada, tenía unos privilegios por los aparatos para poner música (tocadiscos-magnetofones de la época), por lo que era requerido por los amigos de la pandilla para poner música en las fiestas que entonces los jóvenes estudiantiles celebraban en domicilios particulares.

En su faceta laboral, fue funcionario hasta su jubilación de una agencia de seguros.

Me contaba, que cuando estudiaba en el Colegio de San Isidro, era perseguido de muy mala toma por los clérigos y sacerdotes de turno, se quejaba, que cuando venían nuevos destinados a la Villa, le facilitaban una lista de alumnos que tenían que tener en consideración y siempre aparecía él, por lo que lo pasó mal en el Colegio.

A titulo anecdótico, los listos compañeros del centro escolar ubicado frente a la plaza de Franchi Alfaro, como se salía a las 20 horas, después de una hora de estudios. Se dio el caso que en el Cine Atlante entrenaban una súper-producción cinematográfica, y los compañeros listos, lo requirieron, para que fundiera los plomos del cuadro de la luz y los curas suspendieran el estudio y los mandaran a casa, y así aprovechar e irse al cine.

Rubén la verdad que fuiste un buen amigo, siempre hablábamos de todo, y aprendíamos de lo que tertuliábamos, la verdad que si,

Fuiste un enamorado de los animales, de los perros de tus perros, los que halagabas como seres humanos. Siempre los sacabas de paseo por la Villa,  por tu Villa, hasta que ya te apartaste, pero tus hijos siguieron con ese emblemático hacer de trato exquisito a los animales, a los perros, a los canes.

Sigue con tus aficiones, con tus hobby, ahora en ese paraíso eterno, descansa merecidamente, puesto que ahí sobresale la paz y la misericordia.

Un abrazo amigo.

Hasta siempre.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL