VENTORRILLO (II)

En los archivos fotográficos que me cedió mi amigo y convecino de mi calle El Calvario de la Villa de La Orotava; MANUEL FARIÑA HERNÁNDEZ. He encontrado esta fotografía fidedigna del año 1945 referente a los ventorrillos de las fiestas Mayores y Populares de los pueblos.

El ventorrillo era una especie de merendero o establecimiento para vender vinos, con carne de cochino.

Entonces se confeccionaban con unos toldos a base de blancas sabanas sujetas a cañas atadas con hileras que se mantenían sobre la superficie.

Hacían sus presencias en las fiestas mayores de las ciudades y pueblos, en los lugares anexos a las ferias de atracciones. A veces se acondicionaban en calles, callejones y caminos de tierras.

El ambiente higiénico era indecente y desolador, utilizando mobiliarios de malas eficacias ya en las reservas, y limpiando los cubiertos a través de las clásicas bañeras enlatadas que entonces se utilizaban para el lavado de manos. No tenían agua corriente, tenían que transpórtala desde los grifos callejeros y luego ya indecorosas la espaciaban por los suelos.

En fin clásicos ventorrillos, donde se comía carne de cochino y vino, y así se ganaban la vida como se podía muchas familias que se dedicaban al oficio ventorrillero.

El primer ventorrillo que conocí que fue famoso en el tiempo el del convecino Ventura que cariñosamente conocíamos por “El Cagalera”, su ventorrillo era la gran novedad en todas las fiestas de la isla de Tenerife e incluso de la provincia.

Recuerdo de ver este ventorrillo, en la plaza de Franchi Alfaro, cuando colocaban ahí las atracciones festivas. El ventorrillo de Ventura lo colocaban bajando la escalera de la parte sur de la plaza a la derecha. Me llamaba la atención de ver moscas de colores encima de la carne de cochino y trajinando el ventorrillo.

Le preguntaba a mi madre por ese tipo de animal díptero de la familia MUSCIDAE, con colores en las alas, no me contestaba pero su cara era de tristeza y de decirme que no transcurriera el lugar.

La panorámica que expongo corresponde al año 1945, está tomada delante de los jardines de la desaparecida CASA CURRAS (siglo XVIII) en la calle El Calvario de la Villa de La Orotava, actualmente Auditorio Teobaldo Power, anterior Cine Orotava.

Observamos perfectamente a la derecha el camino que enlazaba la calle El Calvario (de piedras molineras)  con la zona de la Torrita o Gurugú (El Recodo), así como la portada plateresca de la trasera del templo de San Agustín, donde en la actualidad se celebran exposiciones religiosas y artísticas.

Dos ventorrilleras con alpargatas y el vestir con el típico delantal de campesinas de la época, preparando las comidas, mientras un pobre muchacho previsto de alpargatas y un sencillo atuendo, observa desde fuera la faena del histórico ventorrillo.

 

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL