El
amigo de la Villa de La Orotava ÁNGEL GARCIA GONZÁLEZ, remitió entonces (15/06/2022),
estas notas que tituló “INMEMORIAN ÁNGEL DÍAZ LORENZO (1939 – 2022)”: “…La primera imagen que tuve de
mi tocayo fue inevitablemente angelical: un morenito de pocos años tirando de
un burrito que venía desde la finca de la Charca transportando leche recién ordeñada
y una cesta de verduras hasta la casa de los caballeros en la Calle León y que después
subía por la empinada calle hasta la panadería de Pancho el de Jovita, donde
volvía a cargar “la comida del cochino” para regresar por la entonces llamada
carretera nueva hasta el cuartel de la Guardia Civil y por una serventía de la
trasera del barrio Los Cuartos, enfilar el Camino de la Cañada y la carretera
de Santa Cruz que le llevaba otra vez a la finca.
El segundo trabajo del día era venir a la
escuela de Don Elicio en los bajos del Ayuntamiento, en la que eran más
importantes que los libros, las reñidas partidas de pelota en los recreos en la
Carretera del Piche, que era como se conocía la Calle Linares Rivas, y que
congregaban a numerosos curiosos que se paraban a contemplar a aquel pequeño
“fenómeno” que se había escapado del Mundial de Brasil por las rendijas de la
cercana radio de D. Félix Reyes.
Hasta que un domingo por la mañana lo vi en
el recién estrenado Campo Los Cuartos ganando el campeonato infantil de fútbol,
jugando nada menos que de central en las filas del Águila Tinerfeña de la calle
del Agua y derrotando al Infantil Orotava de Don Chile, que no sabía cómo
frenar aquel angelito, más bien diablito, que se recorría todo el campo,
tirando las faltas, los corners y driblando y pasando como si fuera un
profesional. Pero es que su trabajo La había costado pues aprovechaba todos los
ratos libres para estar en el Quiquirá dándole al balón de mil formas y
dominándolo como a nadie he visto en mi vida.
Intenté seguirlo y me apunté al año
siguiente en el Águila Tinerfeña, pero ya Angelito se había pasado al Juvenil
Los Cuartos sin tener los quince años, pues esa categoría era otra cosa y siguió
subiendo hasta llegar al Juvenil Orotava, que entrenaba Don Chano alternando
nada menos que con la U.D.Orotava de primera categoría. Tanto le gustaba al
entrenador, que en la novena jornada, aprovechando una lesión de Fariña, lo
hizo debutar con 16 años en partido oficial frente al C.D. Buenavista, de la
capital, al que vencieron dos a cero con este equipazo que al final de la 1ª
vuelta ostentaba el 2º puesto: Daniel (Fernando), Domingo Rivero, Luis Saavedra,
Tomasín, Quillo, Perico; Lalo, Monagos, Luis Herrera (1), Sánchez (1) y
Angelito.
Y ya no dejó de jugar. Cuando no era de
interior era de medio ó de lo que fuera. Así es que participó en toda la
segunda vuelta, en la Copa Heliodoro y en la Copa Federación. A la siguiente
temporada 1956 – 57, accedió a la presidencia Buenaventura Machado que trajo de
entrenador a Juan Herrera, el mítico forjador del C.D. Price, considerado el
mayor conocedor de la WM en Tenerife. Angelito comenzó los entrenamientos en el
Juvenil pero pronto le echó el ojo Herrera a la forma de tocar la pelota a
aquel jovencito y le dijo a su ayudante: “Tráigame aquel negrito “y lo subió al
primer equipo, donde jugó todos los partidos consiguiendo un reñido 4º puesto,
perdiendo la participación en la Liga Regional por diferencia de goles a favor del
San Andrés, motivando una desafortunada polémica del presidente con la
Federación.
En la temporada siguiente se cometió el
mayor disparate deportivo que he visto en la Villa. El nuevo entrenador Vicente
Hernández hace descartes en el primer amistoso con un segunda regional de la
capital y Angelito queda en libertad, después de haber sido titular dos temporadas
seguidas y con dos entrenadores distintos. Un cuarto de hora tardó Sedomir en llevárselo
para la U.D. Realejos. Allí jugó dos temporadas y fue a la Selección Juvenil
junto con Paco, veloz extremo de Buenavista del Norte. Se codearon con Ñito,
con Evaristo y con Santos, que eran de otra galaxia y pronto el C.D. Tenerife,
que había apostado por Ignacio Urbieta reputado entrenador de cantera, los
fichó a los cinco, pero con la diferencia que los norteños eran en calidad de
“jugador compensado”, una artimaña anti-paquetes: cuando el entrenador lo hacía
debutar, el día antes le hacían la ficha de profesional; mientras era amateur
con un sueldo mensual “en compensación” por el tiempo perdido. Paco tuvo la
suerte de debutar al principio de la Liga por lesión del extremo Domínguez,
pero Angelito tenía mucha competencia para el puesto de interior. A finales de
noviembre, en un partido benéfico, disputado un miércoles en Los Cuartos contra
el Orotava, Urbieta le avisó a Angelito que tuviera cuidado porque iba a
debutar el domingo. Y esa tarde, en un balón disputado por alto con Leonardo,
se rompió el menisco y tardó 9 meses en volver a jugar, gracias a la
recuperación que realizó por su cuenta en Playa Bollullo.
Y volvió al Orotava donde fue campeón en
1961, título que repetiría en 1962 y 1963 en las filas del Real Unión de
Tenerife. Esto le dio alas para intentar la “aventura peninsular “pues, en
Barcelona estaban en 2ª división tres villeros: Joseíto y Alfonso Rivero en el
Europa y Ramón Fariña en el Badalona. A su paraguas llegaron Felipe González y
Ángel Díaz, que ficharon en Tercera División, Calella y U.E. Sants respectivamente,
pero ganaban tan poco, que a los tres meses se volvieron a la Villa. Y aquí fue
donde Angelito resolvió su futuro, pues el presidente Cecilio Árbelo le ofreció
unas ventajosas condiciones que le permitieron adquirir un pequeño camión con
su correspondiente parada en la Avda. Sor Soledad, muy cerca del Estadio Los
Cuartos. Y con el fruto de su trabajo compró un solar en la Candelaria del
Lomo, edificó una casa de alto y bajo, contrajo matrimonio y tuvo dos hijas,
todo compaginado con la práctica del fútbol , donde hubo de todo incluido un
descenso a segunda regional , posterior ascenso , campeón de Copa, inauguración
de césped , fundación del Trofeo Teide y como broche final campeón de liga en
la temporada 1971 -72 , que compartió con los siguientes compañeros debidamente
entrenados por Antonio Hernández Sánchez : Juanito , Moli , Villar, Santos ,
Evaristo . Fco. Sánchez, Manolo e Isidro. Goyo, Siverio, Chanito, Galindo,
Chano, Nani, Juan Jesús, Domingo y Chuchito.
En total 16 temporadas desde 1956 hasta
1972. Y otras tantas en Veteranos, donde volvimos a jugar juntos y donde creí
perderte por primera vez cuando viajamos a Viena y te desplomaste en lo alto de
un restaurante giratorio a no sé cuántos metros de altura y te rescatamos entre
Juan Seve y servidor y te llevamos al hotel y te velamos toda la noche, a la luz
de una botella de doce años. Pero ahora ha sido peor y sin remedio, y encima
hemos tardado un mes en enterarnos, por culpa de los adelantos modernos. Pero
no te preocupes, que más tarde ó más temprano, ya te encontraremos para que nos
guíes y sin carnet.
ANGEL GARCIA GONZALEZ (La Orotava, entre
mayo y junio de 2022)…”
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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