UN AMIGO DE LA VIDA

En la madrugada de este Jueves Santo recibo una ingrata noticia, triste noticia,  y demasiada fría. La ida a la eternidad de mí querido amigo de la vida.

MIGUEL JUAN HERNÁNDEZ HERREROS  “BABÁN”  un amigo de corazón y de la fraternidad nos ha dicho adió definitivamente.

Nació en la Villa de La Orotava en el año 1951, y falleció en la misma el 8 de Abril del 2020 por la noche.

Compañero de pupitre en los Colegios “La Milagrosa” y “San Isidro” de la Villa de La Orotava, hicimos la primera comunión juntos en el templo de Santo Domingo de Guzmán del ex convento dominico de San Benito.

Amigo Babán, la verdad que mis manos se me mueven, y se me paran, lo que me cuesta escribiste para decirte adiós. Un adiós que me coge por sorpresa amigo. Me dejas inanimado, pensando en lo que fue nuestras vidas, en muchas ocasiones llena de anécdotas y de la esplendida infancia y juventud.

La verdad que no tengo palabras, tengo tantas cosa dentro de mí que no me caben en el teclado para recodártela. Cosas humanas, fraternas, de profunda amistad, de la alegría de la vida.

Madre mía, descansa amigo Babán, ahora está en el eterno paraíso, si ve al amigo  Acho, cuéntale lo mal que lo estamos pasando aquí en el terruño.

Te fuiste un  Jueves Santo en cuarentena, es digno de recordar tu infancia acompañando al Santísimo Cristo de la Columna del sevillano Pedro Roldan, costumbre que se cambió en la juventud, por el ir a ver las niñas.

Babán, estoy seguro que está vez el Cristo te acompañará, seguro amigo de alma, seguro.

Descansa en la eternidad se te merece de todo corazón, un lugar de paz y misericordia. No olvide reencontrarte con tus queridos padres: Rafael y Lala.

Un abrazo y hasta siempre amigo.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL