Aniversario de su fallecimiento. Nace en la Villa de La Orotava el 16 de
Julio de 1975. Estudia en el Colegio de San Isidro, licenciándose en periodismo
por la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra en 1997,
comenzando su singladura profesional al otro lado del Atlántico en el diario de
ámbito nacional El Expreso de Guayaquil,
en Ecuador.
De vuelta a Canarias en 1999, trabajó unos meses en el gabinete de prensa de la Consejería de empleo y Asuntos Sociales
del Gobierno de Canarias, antes de recalar
en Diario de Avisos, en la sección de Local , de la que terminaría
siendo Jefe.
En 2001 se incorpora como redactor, y posteriormente como editor, al
Programa Buenos Días Canarias, de Televisión Canaria.
De forma paralela asumió la función de redactor del diario digital
Atlanticocanaria.com (2001 – 2002),
simultaneándola con la de redactor del periódico gratuito TF Press (2002 –
2003).
Em 2003 se incorpora como Delegado en la Provincia de Las Palmas a la agencia de noticias ACN Press. Fue
entonces cuando la Televisión Canaria volvió a llamar a su puerta reclamándolo
como editor de informativos función que comenzó
a desempeñar en 2004, hasta que en 2006 fue ascendido al cargo de
subdirector de Informativo, trabajo que desarrolló con entrega desmedida hasta
el día de su muerte, acaecida inesperadamente en un lamentable y triste accidente
de circulación en la autopista del Norte de Tenerife, en su municipio de La
Villa de La Orotava el día 20 de Mayo del 2007, con solo 32 años de edad,
cuando aún comenzaba su carrera en el mundo periodístico.
En el adiós de su vida se convirtió en un periodista de la mitología,
dejando escrito un trabajo bibliográfico titulado “ISLAS SALVAJES”.
UN libro sin duda cargado de humanidad y vitalidad que destila la esencia
pura de un periodista de raza; un periodista veraz, que invitaba a la reflexión
desde su tribuna semanal sin dar la espalda a la critica sutil y elocuente,
adornando sus reflexiones con un lenguaje cercano y lúcido como muy pocas veces
se ha descubierto en otros autores.
Le hablaron del Archipiélago de las Salvajes,
unas pequeñas islas oceánicas de titularidad portuguesa que se encuentran entre
Madeira y Canarias. Nunca había habla r de ellas. A visitarla, enseguida
propuso “Islas Salvaje” para su artículo, de visitar esos peñascos.
Escribía lo que se le ocurriese y lo hacía de maravilla. Sabía sacar punta
a cualquier noticias, o incluso a temas personales, y hacerlos comunes; además,
su estilo conseguía cierta complicidad en el lector. Y eso solamente.
Él nunca le dio más importancias a sus artículos, y ni se le pasó por la
cabeza retomarlos ni, mucho menos, publicarlos. Leoncio González un amigo suyo,
ha vuelto a destapar aquellos textos, ordenando sus columnas y, mientras
trabajaba en ellos, se sintió más cerca de su amigo, irremisiblemente, y no
estaba. Espera que los lectores, a quienes va dedicado “ISLA SALVAJE”, sienten
esa cercanía tanto como la ha experimentado.
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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