Nació en La Orotava el treinta y uno de marzo de 1914 y murió en
la misma el diez de enero de 1990, a los 76 años de edad. Hijo de una
familia trabajadora y humilde de la Villa de Arriba, no fue solamente
un grandísimo jugador de fútbol y un extraordinario entrenador, fue sobre todo
una buena y maravillosa persona. Siempre fue un hombre trabajador acérrimo
aficionado al CF. Barcelona y a la vez empresario de una tienda de comestibles,
donde muchísimas veces dejaba de cobrar facturas a personas y familias
humildes, que no tenían dinero para comprar una simple bolsa de leche y que
gracias a él podían alimentar a sus hijos. Fue una de esas personas que por
encima de todo, lo importante para él era hacer el bien a los demás, aunque
fuera a costa de su propio bolsillo.
Como futbolista empezó a jugar al fútbol en el Infantil que llevaba el
nombre de Marino, para luego pasar al CD. Europa en 1930 cuya presidencia la
ostentaba el inolvidable don Cándido Acosta ex alcalde de la villa, tesorero
don Antonio Delgado González, en ese equipo jugaba mi tío Ricardo Álvarez Díaz
(Zamorita) de portero, Cleofá, Juanito Dorta, Manolo González (Rolón),
Heriberto Linares, Pedro Cruz, Carballo, Boliche. De este equipo proveyó el
paso al CF. Orotava. Tendría no más de 16 años cuando visitó por primera vez la
camiseta del CF. Orotava en el entonces recién inaugurado Campo de fútbol el
Quiquirá.
En su familia no querían que jugara al fútbol, pero fue su hermano Amadeo
quien siempre inventaba algo para que Chano saliera de su casa y fuera a
entrenar. Así fue como este valiente jugador comenzó a hacerse, llegando a ser
un elemento insustituible en las filas del Orotava, cuya directiva advierte en
él sus cualidades y cuya voluntad de jugar al fútbol ningún compañero pudo
superar. Siempre estaba dispuesto a salir al campo sin alegar el más leve
pretexto, fuera cual fuera la posición que ocupara, aunque su entusiasmo
siempre se inclinó por ocupar la posición de medio izquierda, puesto que creía
que era donde mejor rendimiento daba al equipo.
Sus dotes como goleador fueron impresionantes, en el año 1934 como alma del
ataque orotavense le endosa tres tantos al Cataluña (de Santa Cruz). En el año
1941 y después de militar en el equipo del San Pablo de la Villa, pasó a
formar parte del CD. Iberia de Santa Cruz. La prensa de aquel entonces decía de
Chano que era un muchacho de enorme voluntad, enérgico y decidido en sus
intervenciones. En el campeonato derrochaba mucho ardor y entusiasmo deportivo
con una total entrega de sus facultades sin regateos ni desmayos, aunque su
juego no era estilista ni brillante. Pero sus actuaciones llevan siempre el
marchamo de la eficacia, renunciando al lucimiento propio para el mejor
rendimiento del equipo. Su línea de conducta viene satisfaciendo plenamente a
los directivos e incondicionales del histórico barrio capitalino El Torcal, que
le miran como uno de los continuadores de aquel fútbol iberísta de otras épocas
de auténtica furia y codicia. Después de su etapa en el chicharrero CD. Iberia,
retorna al UD. Orotava recibiendo la denominación de copos de nieves por el
periodista don Domingo Rodríguez fundador de la Jornada Deportiva
hermano de don Leoncio Rodríguez fundador de la Prensa hasta su retirada
como futbolista.
Como amante del fútbol se convierte en entrenador. Faceta importantísima en
su vida deportiva, aunque siendo un excelente jugador, también fue un
extraordinario entrenador, de equipos; UD. Orotava, Infantil y juvenil Iberia
de la Orotava (cofundador). Proclamándose campeón con el Juvenil Iberia de
Tenerife en abril de 1961, eliminando al juvenil Real Unión con sus pupilos;
Ignacio, Felipe (El Chino), Silverio, Chuchito, Villar, Antonillo, Antonio
Sánchez, Nolito Sánchez(Mestalla, Valencia, Betis, Oteniente y Tenerife),
Francisco Sánchez, Angelito, Antoñito, Juan Antonio, Domingo Abreu, Melchor,
Pancho, Vidal etc.…
Don Chano tenía por costumbre viajar en barco a Cádiz todos los veranos con
un grupo de amigos de la villa a presenciar el trofeo de Carranza, y dejó de ir
al fútbol definitivamente, según nos contó una vez, por presenciar un partido
de fútbol del CD. Tenerife en el estadio de Heliodoro Rodríguez López, donde
los jugadores se paseaban por el terreno de juego como lo hacían por sus casas.
En el Baloncesto orotavense también hizo sus pinitos, en el CB. Huracán,
primero en la cancha del campo tenis de la Torrita y después en la
plaza de Franchi Alfaro de tierras entonces, donde tenía a su principal rival
CB. Independiente del recordado Pepe Dorta.
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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