Pertenece a la Hacienda de San Sebastián, construida a finales
del siglo XVII en el camino de La Luz por el matrimonio compuesto por Don
Sebastián Montañés y Machado, nacido en Los Silos el 2 de Agosto de 1667 y Doña
Gabriela María Chaves del Castillo, casada en la iglesia de Santiago Apóstol de
Los Realejos el 28 de Octubre de 1692, remontándose el apellido Montañés a mediados
del siglo XVI, donde ocupó altos cargos en la administración civil, milicia y
del clero, reflejada en el libro “LAS FAMILIA CHAVES Y MONTAÑÉS” del amigo
desde la infancia en la Villa de La Orotava ANTONIO LUQUE HERNÁNDEZ: “… la Ermita de San Sebastián, está situada
a la vera del camino de La Orotava al Realejo, por La
Luz, en su hacienda de La Montañeta, el capitán Sebastián Montañés, esposo
de Gabriela Chaves del Castillo, comenzó a construir estas casas. La fábrica
fue luego hermoseada y concluida, en el año 1748, por su hijo el sargento mayor
Francisco Gabriel Montañés del Castillo y Machado, esposo de Teresa de Tolosa.
El cronista José Antonio de Anchieta nos dice: «murió Francisco Montañés el 24
de agosto de 1753, antes estuvo en Indias, construyó las casas de la
Montañeta y La Laguna. Era fornido, moreno y buen negociante».
La casa, en esquina,
es de dos pisos, con fachada de piedra vista. En la planta baja destaca la
hermosa puerta de cantería de la capilla, a la que se accede a través de unas
gradas de piedra; la fachada alargada tiene cuatro amplias puertas cocheras
además del portón almenado sobre el que se halla el escudo con los blasones
del erector. En la segunda planta distribuye un balcón cubierto y a ambos
lados dos ventanas de guillotina. Remata el tradicional alero, sobre el que
sobresale una original espadaña. Atravesando el portón se halla un patio, que
conserva un antiguo aljibe, tiene soportes en dos lados, con altos pies
derechos. La entrada a un segundo patio se sitúa a la derecha y a través de él
a las dependencias agrícolas, las bodegas y el lagar. Al fondo del primer patio
está la escalera principal, de madera, y en dos tramos, que conduce a la amplia
galería cubierta, con baranda de bellos balaustres torneados. En la rasante de
la planta noble, por el desnivel del terreno, hay otro espacio cerrado, con
pasillos que comunican con los jardines y las caballerizas. Sobresalen en toda
la casa sus magníficos trabajos de madera y de entre ellos la ventana de
celosía sobre el patio delantero, los artesonados y las puertas y vanos
decorados con ricas labras en los cojinetes.
La capilla tiene
entrada directa desde el piso superior de la casa, para que desde su tribuna
privada los Montañés gozaran de los oficios religiosos. Su retablo, de
características barrocas, es obra de un cuerpo, con nicho central presidido por
una imagen de Nuestra Señora del Carmen, de vestir, y bajo ella una talla de
San Sebastián, de pequeñas dimensiones; asimismo posee esculturas valiosas,
como un San Pedro y dos Crucificados, uno de ellos de procedencia
centroeuropea. Conserva también una excelente serie de óleos sobre lienzo,
pintura anónima canaria del siglo XVIII, de entre los que sobresalen la
Adoración de los pastores, Santa Bárbara, Santa Catalina, San Agustín
y la Huida a Egipto; además de una notable lámpara de plata. Esta
heredad pertenece a los herederos de Fernando Machado y Fernández Montañés,
vástago primogénito del erector…”
En el libro “LA OROTAVA Y SUS
FIESTAS” del amigo desde la infancia de La Villa de La Orotava; MANUEL
RODRÍGUEZ MESA: “…en el folio 523 del
“L.B. 8º de Ent.” de Lla Concepción de la Villa, puede leerse que el
15 de Octubre de 1761 “se hizo fiesta en la hermita..., se Vendijo i fue el
Veneficio, se cantó misa y prssºn...” y que los cuatro ducados que costó la
ceremonia los pagó “Da theresa tholosa, biuda de Dn francº Montañés”.
Esta hacienda se
terminó de construir en el año 1748 por el hijo del matrimonio citado, el
sargento mayor Francisco Gabriel Montañés del Castillo y Machado esposo de
Teresa de Tolosa.
De la ermita destaca
la hermosa puerta de cantería, y las gradas de acceso de piedra.
La capilla tiene
entrada directa a la parte superior de la mansión.
El retablo es Barroco
de un solo cuerpo, presidido por nuestra señora del Carmen, de vestir. En la
parte baja se encuentra una talla de San Sebastián de pequeñas dimisiones.
Además posee un crucificado procedente de algún país centro europeo.
Así como una serie de
óleos sobre lienzo, pintura anónima canaria del siglo XVIII,
sobresaliendo la Adoración de los pastores, Santa Bárbara, Santa
Catalina, San Agustín, y la Huida a Egipto…”
Los actuales propietarios de origen alemán,
adquirieron la hacienda y capilla en el año 2.000; HEINRICH MEUL Y KATHERINA
MEUL. Realizando una interesante y extraordinaria obra, acondicionándola con
todos sus elementos originales.
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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