miércoles, 20 de diciembre de 2017

VICENTE “APARICIO”



Aniversario de su fallecimiento. Vicente García Toste que cariñosamente conocíamos por “Vicente Aparicio”, ya está con su señora Remedio García Darías disfrutando de la paz en el paraíso eterno.
Nació en la Villa de la Orotava en el año 1931, y falleció en su Villa el 20 de diciembre del 2016, a los 85 años de edad, un día friolero preámbulo al comienzo del invierno.
En la vida fue futbolista y camionero, empezó a trabajar de chofer de los herederos de los “Codesido”, en la calle Verde (Actual Nicandro González Borges).
Casó con la cruzantera (Cruz Santa - Los Realejos); Remedio García Darías, con la que tuvo dos hijos; Vicentito e Isidro García y García. Así como tres nietos extraordinarios; Dailos, Naira (alumna predilecta de mi hijo Enrique Álvarez y González de Chaves “Quique” en el oboe) y Lucía.
Empezó a jugar al fútbol (en el  entonces estadio Municipal “El Quiquirá”) en un equipo no adherido de La zona de la Charca de los “Ascanio” CF. Estrella, pasando posterior al UD. Orotava, donde ocupaba la demarcación de carrilero por la derecha, que al final alternó la posición de extremo derecho con “Quillo” que a su vez pasó del ala derecha  a carrilero del mismo bando. A la vuelta de servicio militar, colgó muy joven las botas, desconozco el motivo.
Vicente “Aparicio”, siempre fue un hombre bueno, amable, servicial, comunicador. Un personaje que luchó por sus hijos y por sus nietos, un marido ejemplar y un camionero de los de antes.
Disfrutó del mejor futbol que le ofreció su hijo Isidro, procedente de las bases del UD. Orotava, de donde pasó a formar parte de aquella inolvidable plantilla del CD. Tenerife, que conquistó por segunda vez en la historia del balompié español, el subir a la primera división nacional de futbol. Militando en el mismo conjunto blanco y azul varias temporadas en la primera división, en donde jugó la copa de Europa. Terminando su vida futbolera en el CD. Mensajero de la Palma, obteniendo el título de entrenador, por lo que se dedicó a este oficio, y así no perder nunca sus contactos con el balompiés.
Su hermano Vicente también practicó el deporte, pero el del cesto (baloncesto), en el que se formó en las bases del CB. Salesianos (actual CB. San Isidro), pasando luego por el CB. Academia Politécnica y CB. Unión Valle de La Orotava (que jugaba sus partidos oficiales en el Colegio Público de Ramón y Cajal).
Vicente “Aparicio”, con su esfuerzo y su trabajo, siempre en el camión, compró y fabricó su propio hogar, en la medular de la histórica calle Verde (Nicandro González Borges) de la Villa de La Orotava.
A su retirada laboral montó con su hijo Isidro en su salón – garaje una librería - papelería, que a desaparecer convirtió la sala en un museo de fotografías y objetos típicos de antaño.
Siempre que me pasaba por su casa me quedaba ratos en tertulias, que amenizábamos sobre el fútbol y demás.
Amigo Vicente “Aparicio”, espero que en este destino eterno, viva en la paz divina con tu querida señora; Remedio García Darías, allí están muchos de tus amigos, compañeros del UD. Orotava, tus padres y familiares.
Aquí dejas a dos grandes hijos que te querían, que te amaban de verdad. Sigue disfrutando de lo tuyo Vicente, la esperanza y la misericordia son evidentes.
Un abrazo y hasta siempre.
El Amigo de la Villa de LA Orotava desde la infancia; ÁNGEL GARCÍA GONZÁLEZ, remitió entonces estas notas: “…Ayer (20/12/16) nos dejó una de las viejas glorias homenajeadas por el Ayuntamiento de La Orotava el 11-octubre-2007 con motivo del 85º aniversario del club. Vicente García Toste, 85 años, paseó en el fútbol el apellido de Aparicio, legendario jugador del At. Madrid de los años 40.
Tras pasar por el Atlético Orotava, Piedad y  Estrella, fué seleccionado para el UD Orotava donde estuvo cuatro temporadas como delantero. Su mayor hazaña fue meterle cuatro goles a UD Realejos en el campeonato 1950-51 en el campo Quiquirá.
Su último partido fué en Los Cuartos el 2 de mayo de 1954, frente al Unión Santa Cruz que ganó 1-3. Los copos de nieve se alinearon con Magencio, Brígida, Chicho, Domingo, Quillo, Dieppa, Rivero, Massanet, Monago, Aparicio y Fariña. El Santa Cruz era filial del CD Tenerife, en el que venía de interior Juan Padrón, que llegaría lejos en el fútbol.
Precisamente en el CD Tenerife jugaría un hijo de Vicente Aparicio. Nos referimos a Isidro García, que estuvo 6 temporadas en tres categorías diferentes. Ayer (21/12/16) en el entierro estuvo presente una representación del equipo tinerfeño.
Reciba su familia nuestro pésame y el recuerdo de un hombre sencillo y trabajador en su oficio de camionero apreciado por todo el pueblo…”

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

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