LAS TRASPARENCIAS DE PEPE

Esta fotografía de las primeras que aparecen en color y en formato en diapositivas, es propiedad de mi amigo desde la infancia de la Calle El Calvario de La Villa de La Orotava; MANUEL FARIÑA HERNÁNDEZ.

Todavía no se ha conseguido superar la obra de arte efímera del recordado e inolvidable PEPE GONZÁLEZ ALONSO en el magno tapiz de la Plaza del Ayuntamiento de la Orotava. Probablemente cada artista tenga sus dotes, lo que no sé precisamente si el trabajo de hace cincuenta años era del pensamiento del artista que trabajaba las tierras multicolores de los azulejos del Teide, o era de un conjunto de artistas. El arquitecto orotavense don Tomás Machado Méndez y Fernández de Lugo hizo las perspectivas del ALFOMBRÍSMO en la plaza del Ayuntamiento de La Orotava, don Pedro Hernández Méndez realizaba el boceto con lápiz, carbón y lo culminaba con el color de acuarelas, pasándoselo siempre por el despacho de don Tomás Machado en la capital tinerfeña, hasta ponerlo a punto y dáselo a los artistas que se sentaban en los banquillos y confeccionaban sin toldos, a la intemperie e inclemencia del día, el arte plasmado en el boceto de don Pedro Hernández Méndez, tan artesanal que entonces no se conocían las técnicas de las nuevas tecnologías informáticas.

En esos banquitos de la plaza había un hombre, un artista, un catedrático PEPE GONZÁLEZ ALONSO, que plasmaba el arte sin el boceto a simple vista, y miren lo que realizaba, todo un cuadro con DIFÍCILES TRANSPARENCIAS, de la luz, de los velos de las féminas, de las sombras, realizando una panorámica surrealista a un arte jamás visto hasta la fecha en esa plaza que diseñó el arquitecto don Mariano Estanga y financió de su propio saquillo aquel ilustre alcalde que se llamó Don Tomás Pérez.

En esta se demuestra la imposición del desaparecido cura párroco y arcipreste don Leandro Medina Pérez sobre la plasmación del Concilio Vaticano II, de aquel Papa abierto a la sociedad moderna que lo fue Juan XXIII, convirtiendo las celebraciones religiosas al pies del ciudadano, lo que realiza que se lean las misas en los respetivos idiomas de cada país y de cara al público como lo vemos en este maravilloso y recordado tapiz, extraído de una diapositiva de mi convecino y amigo Manuel Fariña Hernández.

Parece que el color azul que vemos bordeando este magnífico tapiz, no corresponde a ese color, puesto que a tratarse de una diapositiva, en el paso del tiempo va perdiendo el color primitivo. Puesto que hasta la fecha se desconoce el color azul de las tierras del Teide, y si es verdad y autentico, entonces estaríamos ante un gran descubrimiento de un inédito color azul en el monumental tapiz de la plaza de Ayuntamiento….

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU

PROFESOR MERCANTIL