Se ha escrito dos tomos sobre la historia del colegio San Isidro de La
Villa de La Orotava, el primero dedicado a los Hermanos de las Escuelas
Cristianas desde 1909 hasta su marcha definitiva de la Villa 1941, trabajo del
amigo JUAN CÚLLEN SALAZAR. El segundo tomo es la vida de los Salesianos en la
Villa desde 1948 hasta la actualidad trabajo del salesiano GUILLERMO NAVARRO.
En el año 2009 se cumplieron 100 años un siglo del ilustre colegio de San
Isidro, pero queda en blanco una etapa que comprende desde el año 1941 al 1948.
Se sabe por fuentes orales que se utilizó el centro para dar clases de
cultural general y preparación del examen de ingreso para los estudios de
bachiller.
NAZARIO HERNÁNDEZ GARCÍA (CHILE), nos cuenta que fue utilizado por las
tardes por el colegio de segunda enseñanza del Puerto de la Cruz “Gran Poder de
Dios”, para que los alumnos de bachiller de La Orotava no tuvieran que
desplazarse al Puerto de la Cruz. No sabemos quien promovió estas enseñanzas en
el citado colegio, si fuero directamente por el Patronato, o fueron arrendadas
a un grupo de profesores civiles y evidentemente al centro de enseñanzas medias
del Puerto de la Cruz “Gran Poder de Dios”.
FRANCISCO SALAMANCA DE LA PEÑA, me envió esta fotografía correspondiente a
ese periodo, conocido por el periodo de transición, que corresponde a un
grupo de alumnos que asistían a las clases que se impartían en el Colegio San
Isidro, en esa etapa intermedia entre la marcha de los hermanos de las Escuelas
Cristianas y la llegada de los Salesianos.
La fotografía tiene fecha de mes de Junio de 1944. Por lo que me pide que
haya que estudiar ese periodo. La docencia estaba impartida por los profesores
seglares: don Manuel Chico Cruz, don Pepe, no se recuerdan sus apellidos pero
parece que era casado con una de las hermanas López (hijas de don Adolfo el de
la tienda de calzados de la calle La Carrera); don Santiago García (hermano de
Luis “El del Paso”, muchos años trabajando en la clase media con los salesianos
y al final no le trataron como es debido).
Estos son los nombres que identifica con seguridad de los muchachos de la
fotografía el amigo FRANCISCO SALAMANCA DE LA PEÑA, panorámica tomada en el
patio central del colegio orotavense, observando en su espaldar la antigua
escalera de acceso al patio, que fue retirada y sustituida por otras en las
torres del edificio por los padres salesianos, debido al accidente que se
produjo con el primer alumno interno Baixa Peropadre que bajó rodando por dicha
escalera.
Para facilitar su reconocimiento están enumerados de arriba abajo y de
izquierda a derecha. Para los que no se recuerde sus nombres dejaré un espacio
en interrogante que espero rellenar cuando los identifiquen los amigos de
efemérides.
1)PEPE DORTA (el que fuera Director de la Caja de
Ahorros y primer director del Instituto de Formación Profesional del Barrio de
San Antonio de La Villa de La Orotava, en la actualidad IES La Orotava Manuel
González Pérez). 2) JOSÉ ISIDRO LINARES BERCEDO (hermano de África la mujer de
Antonio Herreros y González de Chaves). 3)¿*? 4) GUZMÁN LLARENA CODESIDO
(oculista). 5) JOSÉ LUIS GONZÁLEZ GUARDIA. 6) CEFERINO (cortado en la foto).
7) ANTONIO SANTOS Mesa (al que llamabamos “el negro”). 8) EDUARDO MACHADO
CODESIDO (Pediatra)
9) JUAN QUINTERO. 10)¿*? 11) ANTONIO PÉREZ
GUZMÁN (de Santa. Úrsula, Médico Odontólogo del Puerto de la Cruz). 12) JUAN
GONZÁLEZ PÉREZ (Director de Banco BILBAO). 13) JOSÉ JAVIER ECHANDI CASAÑAS. 14)
MIGUEL HERNÁNDEZ (“Lito Carrasco”). 15) URCISIO CELORRIO (Químico). 16) Vicente
CAMEJO. 17) VICENTE APARICIO. 18) RAFAEL SUAREZ SEGURA. 19) JUAN ANTONIO
GONZÁLEZ GUARDIA. 20) SACRAMENTO (vecino DE LA CALLE El Calvario marchó a
Venezuela). 21) LORENZO LÓPEZ (el colorado). 22) ANTONIO GONZÁLEZ (hermano de
Nicandro el de la Joyería). 23) FRANCISCO SALAMANCA DE LA PEÑA. 24)¿*? 25)
PABLO HERNÁNDEZ (trabajaba en el Banco HISPANO). 26) DOMINGUITO GONZÁLEZ
(también hermano de Nicandro). 27) FERNANDO JOSÉ DEL HOYO. 28) JOAQUIN FUENTES
GUERRA, (anestesista, hermano de Saturio el de la Farmacia). 29) FRANCISCO JOSÉ
MACHADO CODESIDO. 30) JUAN ANTONIO LLARENA CODESIDO (el que fuera Inspector de
Policía). 31)¿*?. 32) JESUS ORAMAS (el Pintor surrealista). 33)¿*? 34)¿*?
35)¿*?
FRANCISCO SALAMANCA DE LA PEÑA no nos pudo comentar incidencias ni
anécdotas de ese colegio porque no las recordabas. En esa fecha tenía 9 años.
Este grupo, por la fecha, 1944, y en lo que a él se refiere, cree que era
una especie de preparación para el Ingreso del Bachillerato que aprobó con 10
años en Junio de 1945, según lee en su papeleta de INGRESO.
NAZARIO HERNÁNDEZ GARCÍA (CHILE) remitió entonces (19/07/2012) estas notas: “… La marcha
de los Hermanos de las Escuelas Cristianas y la desaparición del Colegio
Farrais, crearon en La Orotava, un grave problema educativo. Los padres y
alumnos que querían continuar los estudios, se encontraron con el obstáculo
insalvable, de la falta de colegios donde recibir sus clases en La Orotava.
Yo no sé de quién fue la feliz idea de compartir las
clases que impartía el Colegio de segunda enseñanza “Gran Poder de Dios”,
“afincado” en el Puerto de la Cruz, que al recibir a toda la masa “en paro” por
falta de instalaciones en La Orotava, tuvo que trasladarse al Puerto de la
Cruz. Se aprovechó las instalaciones del Colegio San Isidro, amplias y cómodas
de manera que aquellos alumnos de La Orotava recibieran las clases en su
pueblo, desmasificando así, las instalaciones del Puerto de la Cruz. Brillante
idea, sin lugar a dudas; el profesorado actuaba por las mañanas en el Puerto de
la Cruz y por las tardes en La Orotava.
Los recuerdos, dado el tiempo transcurrido, son ya un
poco confusos, pero algunos quedan.
La dirección, me refiero concretamente a La Orotava,
la llevaba, el bondadoso don Aniceto, que creo procedía de la Victoria de
Acentejo y era licenciado en Ciencias. Destacaba por la seriedad que
imponía cierto miedo, pero las bondades de su corazón, salvaban todos los escollos.
Buen profesor, por cierto.
Destacaba sobremanera, el casi anciano, Don Cándido
Rodríguez, que impartía latín y griego, lo que se conocía por “lenguas
muertas”, que constataban con la vitalidad, no normal, de Don Cándido, que
atribuía ese, “estar en forma”, a no utilizar la guagua en su caminar a las
clases, sino a la fuerza de sus piernas y la vitalidad de su corazón. Se
contaba de él, que fue a alquilar una pequeña casa en medio del campo, allí por
el Durazno y abrió una amplia ventana, bajo la cual “Vivian unos pocos
cerdos y alguna que otra vaca, que emanaban ciertos efluvios no muy
agradables. Ante la tristeza de los dueños, por si aquella circunstancia
pudiera destruir el trato, Don Cándido abrió sus pulmones y haciendo alarde de
su buena salud exclamó “Que agradable olor a vacas”. Vivió allí hasta que sus
fuerzas ya le fallaron.
Otra profesora que causó en mi profunda admiración fue
Doña María Teresa García Barrenechea, que nos adiestraba en Geografía y nos
enseñaba a conocer, principalmente, los ríos, montañas y limites de las
ciudades españolas. Yo asimilaba esa asignatura con cierta facilidad porque
siempre me gustaron las letras, pero sobre todo porque esa mujer tenia un don
especial para hacer que nos gustase la asignatura.
Figuraban también como profesores a tener en cuenta,
Don Benito Ríos, más adelante Rector de la Universidad de La Laguna, Don Luís
Espinosa, con sus Ciencias Naturales y el villero Don Juan Quintero en
física, que en una clase nos explicó que era más fácil que se produjera un
accidente de coches, que un accidente de aviones. Pero el de más gratos y
profundos recuerdos fue el inolvidable Padre Flores, con la presencia que
emanaba y dejaba imaginar su profunda sabiduría. Recuerdo que ofreció un
ciclo de conferencias en la antigua sede del Liceo de Taoro, que se hizo
inolvidable.
Doña Minita Carmona nos introducía en los vericuetos,
en aquellos tiempos algo complicados, del inglés y alemán.
Pero no podemos olvidar los problemas que tenían que
salvar los alumnos de fuera de La Orotava, por la escasez de recursos para
viajar y a este respecto tengo que recordar, cariñosamente, al bueno de
Panchito, que en su afán de aprendizaje y no querer llegar nunca tarde a clase,
se presentaba en las afueras del Colegio, subido a un dócil asno de su
propiedad, que lo “conducía” desde la Cruz Santa y lo “aparcaba”
atado a los hierros de la verja que cerraba la entrada al Colegio. Todo un
ejemplo de voluntad por aprender.
En fin, recuerdos y anécdotas de una época feliz y
difícil que tengo la seguridad de que acrecentaron nuestra formación,
enseñándonos a sortear los problemas que se nos presentan en la vida…”
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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