Tras el viaje anual a la vieja Europa, que realicé en el mes de octubre del
2014, concretamente a la histórica “Polonia”, ya como jubileta y acompañado de
mi mujer Antonia María González de Chaves y Díaz. Como tuvimos que hacer escala
en Madrid, a la ida y a la vuelta. Encontrándome en el domicilio de mi querida
prima María Esperanza Abréu Rodríguez (Peyaya), a la vuelta del largo viaje por
tierras polaca. Me permitió echarle una hojeada en su ordenador a mi cuenta del
Facebook, para reducir visitas y comunicaciones de mis amigos, me encuentro con
una grata sorpresa de que un tal José Luis Benedicto Sánchez, me pedía su
amistad. En principio no sabía quién era esa persona, pero al final se me
identifica, que era mi compañero de pupitre en el Bachiller Superior como
alumno interno en el colegio de San Isidro de La Villa de La Orotava y que
conocíamos por “Benedicto”.
La sorpresa, me emocionó que me puso los pelos en punta, puesto que
llevamos tiempo localizándolos y no habíamos dado aun con este compañero que lo
fue en los curso de bachillerato en el mencionado colegio correspondiente: 1966
– 1967, 1967 – 1968. Y encima me había localizado a través de mi blog personal
y Altruista “Efemérides”. En ese momento me día cuenta que vale la pena lo que
escribo a través de esta moderna redes de informáticas.
En ese mes de octubre del 2014, son 46 años que no nos veíamos, tras
abandonar el colegio orotavense, con el título del bachiller superior,
extraordinariamente conquistado por una generación que nos convirtió en hombres
de provecho. Y que en el año 2018, celebraremos juntos las Bodas de Oro.
José Luis Benedicto Sánchez “Benedicto”, era un extraordinario muchacho que
se incorporó a nuestra promoción meramente salesianísta, en el bachiller
superior, como alumno interno, sus padres entonces vivían en la África
española, su progenitor era militar.
Efectivamente, un muchacho extraordinario, normal, con ojos azules y una
personalidad sensata, que pronto supo incorporarse al trabajo de nuestro
recordado grupo. Vestía muy bien a veces como un muchacho galán. Que
admirábamos desde todos los estamentos de nuestros estudios de aquella época
juvenil orotavense.
A titulo anecdótico, estando en quinto curso en clase de Ciencias con
nuestro querido profesor – tutor don Luis de Torres y Fernández (actualmente
viviendo en Pozoblanco – Córdoba con su señora Matilde y sus bellas hijas). El
amigo “Benedicto” se encontraba en el pupitre exactamente delante del mío. En
unos instantes me quedo pensando, mientras don Luis explicaba la teoría de una
parte de las Ciencias Naturales, no se me ocurre otra cosa que pasarle mi
bolígrafo por la parte trasera de su cuello. Don Luis, a ver el reclamo de
“Benedicto”, lanza en voz absoluta, “asesino”, se refería a la faena que había
realizado. En fin solo quedó en una simple advertencia por la que le pedí
disculpa al amigo compañero “Benedicto”.
En este mismo verano
(2014), en un restaurante de la Villa, localicé al compañero Diego Pérez de
Ascanio, y en octubre (2014), por fin a
José Luis Benedicto Sánchez “Benedicto”, todavía faltan; Arturito y Francisco,
aunque aún Nicomedes Martín Sierra (de los Cristianos), no se ha incorporado,
espero que antes del 2018, estén todos con nosotros para celebrar juntos Las
Bodas de Oro. Ya que; José
Manuel Hernández Pacheco, Domingo
González Morales, Claudio Martin Wildpret, Agustín Martin González (Tino),
Hipólito Rodríguez, el portuense “Pepillo”, y por ultimo desde el mes de
octubre del 2015 Juan Jesús de Francisco “Ringo” ya no están con nosotros,
quizá estén en un lugar, disfrutando de la paz, la esperanza y la misericordia.
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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