El recuerdo de don Antonio conocido por el “PIRULIN” (no sé de dónde le
viene este sobrenombre, probablemente repartía las celebres golosinas conocidas
por pirulines, no lo sé…), era todo una institución deportiva en el estadio
municipal El Peñón del Puerto de la Cruz, utilero, masajista, cuidador de las
casetas, regador, marcador del campo, engrasador de balones y de botas,
fundador y presidente del INFANTIL PEÑÓN.
Recuerdo que don Antonio besó un balón que entró en la portería del UD.
Orotava en el estadio portuense defendida por el recordado guardameta
grancanario Angulo, gol que el hábil jugador Domingo “El Pisa” clavó en la red.
Don Antonio Plasencia “El Pirulín”, un hombre
enamorado y afincado en el histórico estadio municipal del Puerto de la Cruz
“El Peñón”, como el Jorobado de Notre y Dame de Paris o mejor El fantasma de la
ópera de París, novela de Gastón Leroux, inspirada en la también novela Trilby
de George du Maurier.
Que esté en la gloria o en otro desconocido lugar, no conozco otra que sea
un gran y merecido homenaje del mundo del balompiés portuense, no conozco otra,
don Antonio se lo merece esté donde esté.
Desde aquí mando un fuerte abrazo a su hijo Pedro que fue un excelente
portero del CD. Puerto Cruz e Icodense.
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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