Fotografía de las Cañadas del Teide tipo tarjeta postal, de impresionante
nevada, probablemente tenga esa fecha del año 1947, cuando se produjo el
lamentable accidente.
Tengo en mi poder, recortes del diario matutino tinerfeño El Día del 11 de
Febrero del año 1947, en su página principal (portada). Nos narra aquel recordado
accidente producido en Las Cañadas de Teide, en el mes de Febrero del año 1947.
Concretamente en el Tabonal Negro, a poco de pasar el antiguo puesto de la
Guardia Civil dirección sur, por la entonces C-821 hoy TF-21, donde un camión
conducido por el portuense Miguel Díaz Villar, cayó por un precipicio de 60
metros de profundidad. Hubo escenas de dolor, muertes y agonía, donde
destacaron voluntarios, la benemérita Guardia Civil del puesto de las Cañadas y
los muchachos del Frente de Juventudes: “… Al mediodía del domingo
ocurrió en Las Cañadas un desgraciado accidente del que ha resultado
cinco muertos y cuarenta heridos, de esto cuatro de gravedad. Con el fin de
pasar el día en la cumbre un nutridísimo grupo de vecinos del Puerto de la Cruz
ocupó en las primeras horas de la mañana un camión que conducía Miguel Díaz
Villar. Entre los excursionistas figuraban hombres, mujeres y niños de diversas
edades. El vehículo siguió la carretera de Orotava a Vilaflor ascendiendo con
toda normalidad hasta el refugio del Portillo. Más adelante a pena pasado el
poster indicador del kilometro 41 de dicha carretera, el
camión se fue por el costado izquierdo de la vía,
desplazándose por una barranquera, yendo a quedar a unos sesenta metros. Los
primero en darse cuenta del accidente fueron los guardias
civiles del puesto del Postillo, y un grupo de excursionistas que se
había detenido junto a este. Estos vieron pasar el camión y siguieron atento a
su marcha, más como observaran que después de haberse ocultado en una curva no
volviera a reaparecer sobre la cinta de la carretera temieron que hubiera
ocurrido el accidente de que damos cuenta. Seguidamente se pusieron en marcha y
vieron sorprendidos cómo se habían confirmado sus temores. El camión aparecía
en el fondo del barranco, completamente destrozado, y existía una enorme
confusión entre los heridos, oyéndose conmovedores gritos de dolor.
El Espectáculo era verdaderamente impresionante. Casi la totalidad de los
viajeros sufría heridas y otros yacían sin conocimiento,
apreciándose desde el primer momento que algunos eran cadáveres. Con auxilio de
otros excursionistas que al pasar por el lugar se iban dando cuenta del
desgraciado suceso se comenzó seguidamente a retirar los cuerpos de los que
permanecían aprisionados por el vehículo, desarrollándose las más
impresionantes escenas. Así mismo se prestó asistencia a los heridos, en cuya
humanitaria tarea intervinieron también aquellos de los accidentados que
sufrían lesiones leves. Fue preciso improvisar camillas y utilizar cuerdas para
lograr la evacuación de los accidentados, dado el declive del terreno. Como
consecuencia del choque murieron inmediatamente Eligio Ojeda García de 19 años
y José María Luis Abréu de 24. Instantes después y antes de que
pudiera ser trasladado a la carretera, falleció el niño
de doce años Gregorio Correa Ceballos. Se organizó seguidamente la conducción
de los más graves al Hospital de La Orotava en cuya operaciones intervino
también un grupo de guías montañeros del Frente de Juventudes de esta capital
que había hecho excursión que desde los primeros momentos auxilió en la
prestación de auxilios a los heridos Apenas llegado al benéfico
establecimiento, fallecieron Manuel Hernández y Hernández de 25 años, y Elicio
Díaz González de 68, este ultimo padre del conductor del camión Miguel García
que también ingresó muy grave en el Hospital. Asimismo quedó hospitalizado
Félix Padrón García también de pronóstico muy grave. Además fueron
hospitalizados Pedro González Estévez de 20 años, Adolfo Jordán Baeza, de 24. José
González Pérez de 18. Juan Carrillo Hernández y Pedro González Estévez, todos
ellos menos grave. Fueron asistidos y pasaron a sus respectivos domicilios en
el Puerto de la Cruz. Rosario Padrón García de 15 años, Ofelia Rival Hernández,
de 26. Antonia Daria Ferrer de 33. Margarita Jordán Baeza de 21. Nieves Ortiz
Carrillo, María Abréu Olivero, María Victoria Acosta Molina de 17 años, Marina
Llanos Abréu, de 21. Marina Pérez Acosta de 20. Y Gertrudis Cabrera Daria de
37. Antonio Ojeda García de 22. Ángel Gómez Gutiérrez de 26. Rogelio Hernández
y Hernández, José Peña González de 19. Antonio García Pérez de 22. Gundemaro
González Barbuzano de 32. Domingo Perera Acosta de 15. Eustaquio Escinoso Luque
de de 15. José González Estévez de 15. Domingo Acosta Molina de 16. Santiago
Machín García de 40. Antonio Jordán Baeza de 20. José Barreto Padrón de 20.
Ruperto González Estévez de 18. Salvador González Daría de 17. Y Santiago Yanes
Amador de 51. Aparecer el camión avanzaba por la carretera a regular
velocidad y si tomar una curva hacía la derecha, posiblemente a consecuencia
del peso, dado el número de personas que conducía hizo, impulso
hacía el lado contrario, volcando al borde de la carretera y produciéndose así
el despeñamiento. El sepelio de las cinco víctimas del accidente de
circulación ocurrido el domingo en Las Cañadas. Constituyó una
extraordinaria manifestación de duelo que presidieron las primeras autoridades
y a la que se sumó la población casi integra de la Orotava y del Puerto de la
Cruz. El triste acto tuvo lugar a la cinco y media de la tarde de ayer,
formándose la comitiva fúnebre en el cementerio de La Orotava, en cuyo depósito
se había efectuado la autopsia de las victimas que terminó a dicha hora. Abría
la marcha el clero parroquial siguiendo a continuación los cinco féretros
llevados a hombros durante todo el largo trayecto hasta la salida de La
Orotava, en la Plaza del Calvario…”
El amigo del Puerto de la Cruz; JUAN PACHECO, remitió entonces estas notas: “…De ese desgraciado
accidente vive aun, y que sea por muchos años, la madre de nuestro amigo
Salvador García Llanos ex alcalde del Puerto de la Cruz, un abrazo para ella….”
El
amigo del Puerto de la Cruz, Catedrático de la Universidad de La Laguna; ANTONIO
GALINDO BRITO, en conversación con el también amigo del Puerto de la Cruz ANTONIO
PÉREZ CARBALLO, remitieron entonces estas notas: “…Muy
cerca de mi casa vivían dos de los accidentados, los hermanos Rosario y Félix
García Padrón. Yo recuerdo ir con mis padres a su casa a verles con sólo cinco
años de edad. Afortunadamente ambos sobrevivieron sin grandes problemas de
salud. Recuerdo el sepelio porque
yo jamás había visto un entierro con tantos cadáveres y una enorme tristeza en
el ambiente, pues la gente lloraba emocionada al paso de los féretros. Fue un
desgraciado accidente que marcó la vida de mi pueblo durante muchos años.
Yo sólo tenía cinco años pero se me quedó
muy grabado porque dos de los accidentados eran vecinos y me parece ver a Fifo
(Félix) con la cabeza completamente vendada. De hecho le quedó la frente
hundida. El trabajó durante muchos años en el Instituto Laboral del Puerto de
la Cruz y era hermano de José Manuel el veterinario.
Los hermanos que comentaba antes Rosario y
Félix, eran hijo de Manuel Padrón que tuvo una herrería en la calle Cólogan y me
parece recordar que andando el tiempo el local se utilizó para un bar cuyo
nombre fue La Herrería. Félix Padrón como tu bien dices, fue mecánico y tuvo el
taller en la calle Pérez Zamora. Sus hijos emigraron a Venezuela y no he sabido
más de ellos.
En aquella época se daban esas clases de
mecánica en 2ª enseñanza y me parece recordar que el
profesor de dibujo era Pablo Hernández casado con una hija de D. Pedro Montes
de Oca. Pablo Hernández trabajaba en correos y participó mucho en la
elaboración de carrozas del
carnaval portuense. Una de ellas que era una especie de carroza de Cenicienta
con un paje de pie en la parte trasera fue muy celebrada. Me parece que
corresponde a 1927 y luego fue utilizada cuando Primo de Rivera visitó el
Puerto de la Cruz en 1928…”
El
amigo del Puerto de la Cruz; ANTONIO ORTIZ HERNÁNDEZ remitió entonces estas
notas: “…El conductor del camión era el padre de los hermanos Díaz Tena
familia de Eliseo de Las Dehesas, cuando se cumplieron 50 años o sea en 1997
Salvador García Llanos con documentos de Cristóbal Díaz Tena hizo un reportaje
que fue publicado en Diarios de Avisos…”
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
Hola,conocí este suceso por una señora de 86 años que me lo comentó el otro día y buscando en la red he visto su artículo. Esta tarde,que la vuelvo a ver,se lo leeré porque seguro que le hará ilusión.
ResponderEliminarGRACIAS,saludos