Me
viene a la memoria este hombre que aprecié en la vida, de profesión confitero,
amante del deporte de la canasta, Deogracias Álamo.
Con
solo 16 años de edad, al mediado de los cuarenta del siglo XX, formó parte del
primer equipo de baloncesto oficial que se creó en la Villa de La Orotava, CB
Orotava. Debutó con el mencionado conjunto en la máxima categoría provincial de
entonces, la primera regional. Que jugaba sus partidos oficiales en la
recordada cancha “Campo de Tenis”, de la Torrita. Posteriormente fichó por el
conjunto villero CB. Independiente, que jugaba en la cancha central de la plaza
de Franchi Alfaro, de pista de tierra, quedando campeón de segunda categoría
grupo norte y subir a la primera, donde en una liguilla por reducir por parte
de la federación tinerfeña, el grupo de
equipos existentes en la primera regional quedó eliminado. Lo que le impidió
jugar de nuevo en la primera Regional. Marcha a Venezuela, al regreso, ficha
por el CB. Águila del Valle de la primera categoría, ya en la cancha de Franchi
Alfaro de pista de cemento, año 1961, donde tras tres temporadas se retira
definitivamente del Baloncesto.
Deogracias
(Deo), era un jugador fuerte, con juego en defensa y en ataque firme de aquella
época, poseía unos pulmones que podía estar 24 horas sin parar.
Sirva
estas letras como homenaje a su persona, por la amistad que tuve con él durante
la vida. Además, nunca se perdió los partidos de Baloncesto, del CB San Isidro,
donde jugaban sus hijos y nietos, muchas recomendaciones recibieron de su
inteligencia y veteranía en el deporte de la canasta.
BRUNO
JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR
MERCANTIL
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