Artículo que realicé el día de su adiós y publiqué en el
matutino EL DÍA de Santa Cruz de
Tenerife, en homenaje a sus hijos Luis Alfonso y Domingo González Hernández
grandes amigos y compañeros de pupitre en el Colegio de San Isidro uno y de
docencia en el IES La Orotava Manuel González Pérez el otro.
Un día triste de verdad, triste por ser jovial, triste con
lluvia celestial, porque se ha marchado para la eternidad otro legendario de
aquellos famosos orotavenses que en aquel histórico mini cuadrilátero
rectangular campo de fútbol del Quiquirá se le bautizó con el apelativo de
“Copos de Nieve”, o de aquel gran conjunto realejero del balompiés con el
nombre de su hijo ilustre “Viera”. Triste de verdad porque se va un padre de un
querido compañero de la docencia. Tu sabes Alfonso que tus hijos Alfonsito y
Dominguito te tenían preparado en tu casa villera todo lo necesario para que
viviera con holgura muchos años, tú lo sabes por qué lo presenciaste en el poco
tiempo que tuviste en ese hogar, de verdad te lo tenían preparado para estar
junto a tu querida señora y dama María Dominga, para que siguiese disfrutando con
tus amigos Arturo y Juanito. Pero te fuiste demasiado rápido, quizá en el
paraíso eterno goce de esa obra tan maravillosa que tus hijos querían de
certeza ofrecerte, porque te querían mucho, querían continuar contigo en la
Villa, querían que siguiera siendo feliz con ellos, pero desgraciadamente el
cometido no quiso que fuese aquí sino allá, yo no sé cómo es ese allá, creo que
es un Mundo apacible, con clemencia donde están muchos de tus compañeros de
aquel glorioso “Viera CF.” o mejor dicho de aquellos baluartes “Copos de
Nieve”.
Alfonso yo te quería como un padre, por todo lo que hiciste por
mí, cuando perdí a mi padre Juan con 15 años, siempre te preocupaba por mi
estudios salesiano, recuerdo tus relaciones con tu amigo el Profesor icodense
Don Brandon, siempre le preguntaba por mis pasos, siempre me controlaba a
través de él, y siempre me daba consejos para perseguir las pautas
estudiantiles. Esto fue una etapa trascendental de mi vida como lo fue años
después cuando me hablaba de aquel quimérico equipo fútbol orotavense de
apellido “Copos de Nieve”, me comentaba tu gran disensión en el estadio
portuense “El Peñón” frente al Real Unión de Tenerife con un portero - no
recuerdo su nombre - que lo paraba todo,
no pudieron cantar el campeonato. Esto es una descripción muy bonita como
también lo fue los fichajes que realizaste en el desaparecido e inolvidable
Norte C.F. y en el UD. Orotava con los recordados jugadores de tu ciudad natal
y querida “Icod de los Vinos”, jugadores de la talla de Tosco y Luis. Tu vida
fue muy diligente, al otro lado de tu casa tenía la capilla del arquitecto
Estanga con tu querida “Piedad” del escultor orotavense Estévez del Sacramento.
Alfonso, tu subía alegre por la calle El Calvario antiguo Camino Real
repartiendo sonrisas y corazones, arriba te reunía con tus amigos; Buenaventura
Machado Melían, Isidro Fuentes Melían y Jesús Hernández Acosta, y más arriba en
el Liceo Taoro tenía tu típica tertulia con Paco Casanova (Neno), Daniel
Fernández, Antonio y Santiago Lechado, Luis de León Domínguez, Paco Morales,
Agustín González y otros... Y más al
Norte de Tenerife estaba tu autentica ciudad, una ciudad cargada de historia
con su famoso Drago Milenario y su majestuosa iglesia parroquial de San Marco,
en esa ciudad estaban tus amigos de infancia y adolescencia, tanto ellos como
los de la Orotava, te están agradecidos, pero mucho mas tus hijos Alfonsito y
Dominguito, ¡Que hijos tan buenos....! que tanto hicieron por ti. Alfonso tiene
que estar gozoso de ellos, quizá algún día te reencuentre con ellos en ese
lugar tan fascinante. Yo estoy apenado de verdad porque nos has dejado para
siempre, por eso he escrito estas poquísimas líneas para que esté sosegado,
para que descanse, para que sea feliz, para que sepa que no te olvidaremos, siempre
tendrá a tu esposa María Dominga a tu lado
- seguiremos luchando por ti -, un abrazo y hasta siempre.
BRUNO JUAN ALVAREZ ABREU
PROFESOR MERCANTIL
No hay comentarios:
Publicar un comentario