Esta recordada panorámica fotográfica, me llega de una forma sublimen que
me pone los pelos de punta. Por lo que veo se trata de la histórica calle El
Calvario del final de la década de los años cincuenta del siglo XX.
Observamos que la circulación de la calle tenía doble sentido (subida y
bajada), pero lo que más me llena de alma es ver y recordar, la industria de
suministros y lavados de automóviles de mi querido padre Juan Álvarez Díaz, me
refiero al salón de la derecha, aun colocadas las rampas de madera para la
entrada y salida de automóviles, actualmente mi vivienda está fabricada encima.
Entonces estaba terminada la fábrica de los hermanos Sacramento conocidos
por “Los Molinas”. Y Vemos el automóvil rubia aparcada por fuera de la
casa de don Manuel Fariña Hernández, que fue propiedad de su familia, después
de pernotar con un Citroën de tres asientos y dos velocidades. Adquiriendo
posteriormente un nuevo vehículo también de estilo rubia marca Austin, a la
derecha la casa de don Paco Polo donde estuvo la Academia Mercantil Atlántida
de don Pepe Dorta y don Félix Calzadilla ambos fallecidos, anexa a la vivienda
de don Santiago Oramas y familia, continuando por la derecha y por la misma
acera estaba el despacho del doctor odontólogo don Juan del Castillo, el taller
de Villavicencio, los futbolines y chapolines de don Eustaquio Lima y la venta
polivalente de Juanillo Santos en donde adquiríamos varias clases de navajas.
Por la acera de la izquierda en primer término los arboles de las especies “Plátano
de Líbano”, y “Laurel de India” (se conservan en la actualidad) de la plaza de
Franchi Alfaro, Estación de servicios Texaco de mi padre, plaza El Llano de San
Sebastián, Carpintería de maestro Pancho “Barranco”, Agencia de Repuesto de
Leopoldo Ascanio Carpenter, tintorería Borbolla, Herrería de Toribio Quintero,
gasolinera la Mobil (que se prendió fuego en un mes de agosto de esos años) y
comercio del libanés don Felipe el Jarandín.
Esta fotografía me lleva a los recuerdos de mi infancia y mi primera
juventud, cuando la calle el Calvario de La Villa de La Orotava era una calle
de especial relevancia centro neurálgico de todos los orotavenses (estación de
las guaguas encarnadas, carismáticos y populares e inolvidables centros
industriales y comerciales y la cancha de baloncesto de la plaza de Franchi
Alfaro).
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
No hay comentarios:
Publicar un comentario