El
amigo de la Villa de La Orotava; JAVIER LIMA ESTÉVEZ. Graduado en Historia por
la Universidad de la Laguna, remitió entonces (27/08/2017) estas notas que
tituló; “BIOGRAFÍAS DE ILUSTRES PORTUENSES EN LA OBRA DE ÁLVAREZ RIXO”.
Publicadas
en La Opinión de Tenerife, el sábado
26 de agosto de 2017: “…Para el destacado polígrafo portuense,
José Agustín Álvarez Rixo (1796-1883), la vida y obra de algunos hijos ilustres
de su ciudad natal, encontraría un espacio en el libro Descripción histórica
del Puerto de la Cruz de La Orotava, publicada en el año 2003 con un magnífico
estudio de introducción, transcripción y notas a cargo de Margarita Rodríguez
Espinosa y Luis Gómez Santacreu, en una preciosa edición que tendría el apoyo
del Ayuntamiento de Arrecife y el Cabildo de Lanzarote.
Inicia Álvarez Rixo su relación exponiendo
algunos rasgos biográficos respecto a Domingo Álvarez, “quien en el año 1687 se
opuso al pago opresivo del derecho de quintos en la isla de Fuerteventura con
aplauso de aquellos naturales, quienes yacían oprimidos de sus señoríos
territoriales”.
Cita asimismo a Sebastián de Herrera, hijo
del Conde La Gomera, el cual vendría al mundo en la localidad portuense en
1713, con una importante trayectoria en el ámbito religioso.
De la familia Iriarte reflejaría numerosos
detalles, tal y como llegaría a relatar respecto a Juan de Iriarte, esbozando
su paso por París y Madrid. Además, apunta algunos datos de su trayectoria como
secretario de la embajada de Parma, junto a otros cargos y reconocimientos.
Álvarez Rixo no dudaría en mencionar algunas características en atención a
Bernardo, así como su final en Francia en 1814, junto a otros datos de Domingo
de Iriarte, el cual destacaría como diplomático. En su relación sobre tan
ilustre familia no olvida a Tomás de Iriarte, describiendo a través de unas
pocas líneas la formación y producción del mismo e incluyendo en esa misma
nómina a fray Juan Tomás de Iriarte, aunque con ciertas dudas respecto a su
lugar natal.
Por otra parte, Álvarez Rixo expone algunos
rasgos biográficos de fray Francisco de Guzmán, sin obviar curiosas anécdotas
de las que sería protagonista.
A Agustín Ricardo Madam dedica algunas
líneas, en atención a su cargo como catedrático de Hebreo, así como canónigo y
diputado a la Corte Real, lamentando el propio Rixo no conocer más detalles
sobre su trayectoria.
Por otra parte, enunciaría algunos detalles
de Juan Perdomo, hijo de naturales del núcleo portuense, y dejaría diversos
testimonios de su labor y papel en Venezuela. Asimismo, señala algunas
características de la biografía de José Dávila, siendo beneficiado en el
Realejo Alto, “donde ideó y dirigió aquella elevada torre de la parroquia de
Santiago”.
Además, destacaría a Manuel de la Cruz,
estableciendo algunas consideraciones relacionadas con su formación e
influencia.
Otro de las biografías de ilustres
portuenses redactadas por Álvarez Rixo nos sitúa ante la destacada trayectoria
de Luis de la Cruz y Ríos.
Expondría algunos detalles relativos a
Bernardo Cólogan Fallon, recordando su excelente formación en países como
Francia e Inglaterra, y su papel como autor de numerosos escritos, siendo un
ser comprometido con la sociedad de la época y el promotor de acciones en pro
de la educación y la seguridad.
En su relación también ocupa un espacio el
fraile Domingo Hernández y su participación en los actos posteriores a la Gesta
del 25 de Julio de 1797, así como registrando las características de la vida y
obra de Enrique Hernández Rosado.
Álvarez Rixo también dejaría presente
algunos datos biográficos sobre Antonio Álvarez Rempuja, destacado carpintero
muy estimado y valorado por el propio Agustín de Béthencourt y Castro.
También enunciaría algunas características
respecto a Vicente Pérez Goraz, o respecto al afamado carpintero que emigró a
América, Isidro Barradas y Valdés, así como en atención a las aventuras cómicas
de Juan B. Pouldon.
Termina su relación de portuenses ilustres
con el polígrafo realejero, José de Viera y Clavijo. Ese hecho lo justifica por
trasladarse el mismo desde muy joven junto a su familia al núcleo portuense,
afirmando Álvarez Rixo que en tal localidad “empezaron las Musas a inspirar al
joven Viera”…”
BRUNO
JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR
MERCANTIL
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