lunes, 22 de enero de 2018

DON LUIS DE TORRES FERNÁNDEZ



Mi estimado y querido profesor de Ciencias Naturales en 5º curso de bachillerato en el Colegio de San Isidro de la Villa de La Orotava; don Luis de Torres y Fernández remitió entonces desde Pozoblanco provincia de Córdoba, que lo dejé patidifuso: “…¿Cómo tienes tiempo para publicar tanto en tu Blog personal y Altruista EFEMÉRIDES”?, ¡Madres mía!. No sabes la alegría que me he llevado con tantos recuerdos en tan poco tiempo, me he emocionado. Me han llamado por teléfono y me han mandado correos con fotos. ¡Qué alegría!...”
Don Luis el tiempo para escribir, para hacer lo que a mí siempre me ha gustado, nunca es escaso pues ya soy jubileta en la vida, tú lo sabes bien don Luis, yo escribo con el corazón, con amor.
Siempre tengo en mi mente los recuerdos de mi infancia y juventud, parece que tengo un disco duro dentro de mí que me informa los aconteceres de aquellos años que eran hermosos. Luis el tiempo me sobra cuando mis amigos me piden que le recuerde el pasado. Aquellos tiempos fueron mejor, excelente en filosofía, la vida era una quimera, se vivía a medio gas y todo era maravilloso.
Por eso me he vuelto a sentar en mi despacho con las fotos de color que me acaba de mandar con toda tu gratitud, para escribir de nuevo sobre la figura que muchos AA. AA. Salesianos del colegio de San Isidro de La Villa de La Orotava, especialmente los de mi promoción 1967 -68, han querido tributarte, tal como me lo cuenta el compañero Juan Jesús de Francisco Rodríguez, RINGO (fallecido en el mes de octubre del 2015) oriundo de La isla Bonita de La Palma, que fuiste un padre de los buenos para él, en su calidad de interno en el centro, un padre bueno, solidario y ejemplar.
Esta vez titulo este alegato “DON LUIS DE TORRES FERNANDEZ”,  la última vez que te vi como salesiano fue en las Bodas de Plata de la llegada de los salesianos a la Orotava, en el mes de junio del año 1973. Ese año me acababa de graduar en el PROFESORADO MERCANTIL, después de presentar el proyecto de final de carrera con sobresalientes, en la Escuela de Comercio de Santa Cruz de Tenerife (actualmente de empresariales).
Nos despedimos y volví a reencontrarme siete años después, en el mes de agosto del año 1980, en casa de mi hermana Carmilla en Las Palmeras, cuando regresaba de realizar y aprobar por libre las oposiciones en Madrid de profesor de Tecnología Administrativa. Aquello fue de otra manera, me sorprendió el cambio en la vida, dejaba el sacerdote y el salesianísmo por una vida sistémica, unido a una bella mujer Matilde cordobesa de verdad, de aquellas que salían de la espátula del famoso pintor retratista cordobés Julio Romero de Torres, cuyas obras más destacadas figuran Amor místico y amor profano, El Poema de Córdoba, Marta y María, La saeta, Cante hondo, La consagración de la copla, Carmen, y por supuesto, La chiquita piconera o El retablo del amor.
Cambia los hábitos por la docencia civil en la tierra del Sol, Andalucía, Córdoba por excelencia, hasta que se retira definitivamente y merecidamente, mientras que su señora Matilde también lo es y así disfrutar en Chiclana provincia de Cádiz en la playa muy cerca de la roca hispana anglosajona EL PEÑÖN del Gibraltar. Me alegró por la sencilla amistad que tenía con don Luis de Torres y me alegró que escogiera el camino de constituir una familia aunque fuera una sorpresa. Tenía entonces una niña de un año Elena, celebraba en casa de mi hermana su cumpleaños, yo también me había casado con Antonia María González de Chaves y Díaz, entonces tenía un niño Juan Félix también de un año, nunca pensé que 20 años después se convirtiera en una clarinetista de elite, tras sus estudios en el Conservatorio Superior de Música de Santa Cruz de Tenerife, posterior marcha a Londres para continuar sus estudios “Guildhall School of Music & Drama” y terminar su carrera en Basilea (Suiza).
Así es la vida, yo me integré en lo que siempre me había gustado las enseñanzas, después de trabajar cinco años como jefe de la administración de la Cooperativa Bananera de Tenerife del Puerto de la Cruz, mi  primer destino como profesor fue muy cerca de tu pueblo, en Andalucía concretamente en el Instituto de Formación Profesional de la ciudad onubense de Minas de Riotinto, para terminar a través de un concurso de traslado en mi propio pueblo orotavense, concretamente en el Instituto de Formación Profesional de La Orotava actual  IES la Orotava Manuel González Pérez en el barrio de San Antonio donde actualmente sigo al pie del cañón.
La familia fue aumentando tu tuviste una nueva niña y yo un nuevo niño Enrique Bruno, otro profesional de la música, que estudió en el Conservatorio Superior de Música de Tenerife, Basilea, y Universidad de Alcalá de Henares en Madrid, del dificultoso instrumento  de c aña puntiaguda conocido por el oboe, profesional al igual que su hermano de los llamados de elites.
Me enteré que volviste por este terruño en el año 1999, tus hijas ya tenían 22 y 20 años, según me contó el amigo de infancia y la juventud Francisco Trujillo Díaz, pero no te pude saludar, creo recordar que me encontraba de viaje con la Banda de Música de la Agrupación Musical Orotava por tierra peninsular.
Cuatro fotos para encabezar este relato. perteneciente a dos etapas diferentes de su visita familiar a Tenerife a tu Villa de La Orotava, cuatro foto para encabezar mi premeditada denominación “DON LUIS DE TORRES FERNANDEZ”.
La primera de arriba a la izquierda corresponde a la visita del año 1980, en la panorámica de copas de vino, desconozco el lugar, aparece primero a la izquierda el amigo Isaac, el indestructible portero o conserje del Colegio que a más de uno le mandó un fuerte bastonazo (decirte Luis, que me lo tropiezo en el Puerto de la Cruz, cada vez que bajo de paseo, por la avenida de Colón en un cochito eléctrico con sus dos piernas desbastadas. Isaac merece un gran homenaje de toda la familia del Colegio de San Isidro de La Orotava), le siguen Luis de Torres, Francisco Trujillo, Fátima Pérez. Por la derecha; Matilde bella esposa de Luis de Torres, Pepe Reyes y ex señora. La foto de la derecha de arriba, también pertenece al año 1980, en casa de mi hermana Carmilla en Las Palmeras, en el cumpleaños de su hija Elena (1 año). De izquierda a derecha; mis sobrinos Koki y Gilberto, Luis de Torres ayudándole a su hija Elena a apagar la vela, Andrés Gutiérrez Duscason, Matilde esposa de Luis de Torres y mi sobrina Xili. La primera foto de abajo a la izquierda, pertenece a la visita del año 1999, en casa de mi hermana Carmilla en Las Palmeras, de izquierda a derecha; Mi hermana Carmilla, Matilde esposa de Luis de Torres, Elena hija de Luis de Torres, Luis de Torres y Gilberto Naranjo Sosa. En la foto de abajo a la derecha también pertenece al año 1999, en el mirador de Garachico, de izquierda a derecha; Gilberto Naranjo Sosa, mi hermana Carmilla, Elena hija de Luis de Torres, Matilde esposa de Luis de Torres y mi sobrina Carmen Aurora.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABÉU
PROFESOR MERCANTIL

No hay comentarios:

Publicar un comentario