domingo, 8 de octubre de 2017

DON DOMINGO GUTIÉRREZ GARCÍA



Fotografía que remitió (2/10/2012) el amigo poeta festivo; DOMINGO DEL ROSARIO correspondiente a una familia añeja de Santa Úrsula.

En el mes de Julio del año 1993, fallecía en la localidad norteña de Santa Úrsula, Don Domingo Gutiérrez García de 75 años de edad ex-maestro nacional, que había sido alcalde de la encantadora ciudad del norte de Tenerife,  -ciudad del buen vino y buena carne, allá por los años cincuenta, A Don Domingo a pena le conocí aunque por esos años visitaba Santa Úrsula con mis padres, pero conozco a su desconsolada hija Yolanda Gutiérrez Yumar compañera de profesión y del Consejo Escolar del Instituto de Bachillerato Villalba Hervás de La Orotava, al que pertenecíamos en representación de padres de alumnos, esposa de Oscar González y González fallecido amigo mío de infancia en La Orotava. Coincidiendo con este óbito y con el permiso de los habitantes de Santa Úrsula, me gustaría dedicar a ese pueblo maravilloso mi primer artículo periodístico, utilizando como archivo la desaparecida revista semanal que se publicaba en La Villa de La Orotava de todo para todos y que se titulaba "Canarias" con fecha del 30 de Julio de 1955, en su página dedicada al pueblo de Santa Úrsula, un pueblo que por entonces comenzaba a experimentar un progreso notable. Concretamente nos habla de su alcalde, el Sr. Gutiérrez García que había tomado posesión de su cargo el 25 de Enero de 1.950, y había realizado bajo su mandato, obras de gran importancia, tales como la Casa Consistorial, edificio de dos plantas situado frente a la plaza denominada del Generalísimo Franco. Hallándose  en esa moderna construcción todos los servicios municipales, la Jefatura Local de Movimiento y el Juzgado de Paz.
La Corporación Municipal de Santa Úrsula en el año 1.955, presidida por Don Domingo Gutiérrez García, estaba compuesta  por los siguientes señores: Don Felipe Ruiz Hernández, primer teniente alcalde; Don Nicolás Yumar Medina, segundo teniente alcalde; Don Ricardo J. González Socas, depositario y los demás concejales, señores, Don Joaquín González Correa, Don Miguel González Monje, Don Antonio Fernández García, Don Eliseo Gutiérrez Afonso, Don Manuel García Correa y Don Aureliano Izquierdo García. Desempeñaba el cargo de Secretario accidental, Don Enrique Dorta Pérez. Santa Úrsula por entonces contaba con 4.765 habitantes de derecho y 4.774 de hecho; todo en una sola feligresía parroquial del mismo nombre, cuyo templo se yergue junto a una bella plaza ornada de variadas plantas, de las que destacaban las gráciles palmeras, especie arbórea que en toda la jurisdicción es como un símbolo de la historia campesina de la localidad. Aun se ven junto a las casas, en medio de los feraces campos, en los bordes de los caminos, en los acogedores rincones, las viejas palmeras de otras épocas, que los hijos de Santa Úrsula cuidan con ejemplar esmero.
Decía el "Canarias": Que el pueblo de Santa Úrsula es una progresiva localidad del Norte de la Isla, muy próxima al Valle de La Orotava. Su vida económica basase en la agricultura, que en pocos años ha alcanzado un auge y desarrollo notables, consecuencia del éxito que ha acompañado a los trabajos de alumbramientos de aguas. La circunstancia, además, de sus excelentes comunicaciones con todos los pueblos de la isla, ya que por ella pasa la carretera general, la ponen en condiciones de poder alcanzar a lo largo de una continuada labor de engrandecimiento, un rango o categoría de pueblo, que si ya es en ella signo distintivo de entre muchos de la provincia, lo será mucho más en no lejanos años. En los tiempos del Sr. Gutiérrez García, se modernizó el pueblo en escaso tiempo, a dotarlo, aparte de otras mejoras, de un magnífico teatro por el que desfilaron algunas destacadas novedades teatrales y las más aplaudidas películas que circulaban en la provincia. Se realizaron reformas importantes en el cementerio tanto en su ornato como, y principalmente, en sus mejores condiciones de utilización, al construírsele cuarenta nichos. Otras obras que se ejecutaron son: la reparación del segundo tramo del camino de la Tosca de Ana María; el arreglo del camino de la Bastona hasta su enlace con el del Cantillo; la total reparación del camino de los Zarzales y primer tramo de el de la Tosca de la Iglesia. Asimismo se han hecho obras en los caminos de las Tosqueras y Farrobillo. En el antiguo edificio ayuntamiento posteriormente se convirtió, mediante importantes reformas, edificio escolar de amplias y modernas aulas dotadas de material pedagógico moderno. Al espacio árido que rodeaba a edificio le ha sucedido un bello jardín que es amena antesala perfumada con aromas de variadas flores. Pero una importantísima y trascendental obra diseñada por el desaparecido alcalde señor Gutiérrez García que destacó el acelerado progreso de Santa Úrsula, fue la instalación del servicio de fluido eléctrico, que desde el sector central del pueblo se extendió a la Puntilla, Farrobillo, Vera y Bastona, y se prolongó a todos los rincones del término en no lejana fecha. Con respecto al servicio de aguas para el abasto público, el Sr. Gutiérrez García manifestó al semanario Canarias, "...es propósito instalar tan necesario servicio como corresponde y para todo el pueblo, existiendo a tal fin un proyecto pendiente de acuerdo del Excmo. Cabildo Insular, que se llevaría a cabo, con la cooperación de Estado, es decir; con cargo a la ayuda del Ministerio de Obras Públicas. Este proyecto rebasa el millón de pesetas. Entre otros planes pendientes también de realización urgente, figuran el de electrificación de los sectores Tosca de Ana María, Cuesta de Santa Úrsula y Barrio de La Corujera; el de instalación de agua potable en la nombrada Cuesta de Santa Úrsula, aparte del plan general de mejoras del servicio de aguas  a que hemos hecho referencia; y también, el entubamiento de las necesarias para el riego de jardines públicos y servicios en las escuelas nacionales del casco. Esta instalación partiría desde el depósito de Tosca de la Iglesia.
Don Domingo Gutiérrez García, siempre pensaba en el futuro de su pueblo, de un pueblo que empezaba arrancar hacía el progreso, con aspiraciones a efectuar obras; ampliación en el cementerio, construyéndose una sala de autopsias y otra para depósito de cadáveres, mediante subvención de la Junta Nacional del Paro a través de la Obra Social del Movimiento. Las escuelas nacionales son: dos unitarias de niñas, dos de niños y tres mixtas, por lo que entre los planes para el futuro, una vez lograda la realización de los actuales proyectos, deben figurar los de desdoblamiento de las escuelas mixta de la Puntilla, Tosca de Ana María y Farrobillo y construcción de más escuelas unitarias en los nombrados lugares y demás de la localidad. Nuestra población escolar -añade el Sr. Gutiérrez García- es de 1.200 niños, para cuya educación haría falta trece escuelas más. Hemos de pensar, para un futuro no lejano, en la necesidad de construir viviendas para los funcionarios municipales y maestros nacionales, así como la edificación de una vivienda Rural, con clínica anexa, para el médico titular. A los proyectos de inmediata ejecución -nos dice finalmente- "...únesele el de la terminación del camino del Farrobillo, importante vía de comunicación con el populoso barrio de dicho nombre; es una obra que el ayuntamiento realizará construyéndole una sólida calzada. Ante las obras realizadas y ante estos planes a ejecutar, han acudido a nuestra memoria recuerdos, no muy antiguos por cierto, de la situación de este próspero pueblo, cuando todo él era tan diferente a lo que es en la actualidad. Aún nos parece ver a ambos márgenes de una polvorienta carretera la melancolía del campo sediento; la vieja Casa Consistorial llena de silencio, abrumada por el abandono; la plaza desnuda de arbolado y reseca bajo el Sol; el paisaje tenebroso de aquellas noches sin estrellas, sin rayos de luna. Parecía palparse en el ambiente el silencio, el tedio, el temor a las tinieblas llenas de ruidos lejanos, de pasos desconocidos, de batir de alas de aves nocturnas.
Santa Úrsula actualmente es alegre, optimista y activa, sus noches pobladas de risas entre luminarias. Creemos que esta especie de milagro ha brotado del agua. Los hijos de Santa Úrsula han transformado al viejo pueblo en una localidad atrayente, simpática, turística, donde todos se afanan en la bíblica y honrosa tarea de labrar la tierra. Cuando es llegada la jornada del descanso, la plaza florida se llena de lindas mujeres muchas de ellas alumnas y ex-alumnas mías en el antiguo Instituto de FP de La Orotava (actual IES La Orotava Manuel González Pérez) en el Barrio de San Antonio que charlan alegremente; de los ventanales de las casas se derrama la melodía musical que cabalga sobre las ondas: es la música de los modernos aparatos musicales, y la televisión que constituye un grato disfrute educativo hogareño, antiguamente inasequible para Santa Úrsula, sin fluido eléctrico. Todo esto y muchísimo más surgió, gracias a su ex-alcalde Don Domingo Gutiérrez García: hombre de ejemplar tesón, prestigioso ex-maestro nacional, a quien felicitaba El Canarias desde sus columnas por su encomiástica labor municipal, así como a los señores compañeros concejales del entonces. Su labor es una clara lección de cómo se lleva a un pueblo por las rutas del bienestar. Recuerdo visitar Santa Úrsula en mis mocedad, evidentemente al empaquetado de los Sres. Larrastre y compañía donde trabajó mi recordado y querido tío Enrique Abreu González, un caballero de gran talento que siendo encargado general de dicho almacén, hizo una labor humanitaria por todos los trabajadores del empaquetado mimándole y enseñándole como hijos suyo, no quisiera terminar esta crónica para recordarle a los habitantes de Santa Úrsula que le conocieron, que nos dejó aún siendo joven y para siempre cuando empezaba a vivir y a trabajar en ese querido pueblo norteño.

BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL

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